El conflicto que comenzó en 2018 entre la Municipalidad y la sociedad Enjoy, que logró la licitación para operar el Casino de Puerto Varas, se mantiene a flote a pesar que esta última no logró dar cumplimiento al compromiso para poner en funcionamiento un nuevo recinto de entretenimiento en la calle Klenner.

Y es que el 21 de junio era la fecha establecida por la Superintendencia de Casinos y Juegos (SCJ) para que ello ocurriera, tras una prórroga acordada con la compañía, debido a las dilaciones que ha presentado el proyecto y que tiene de protagonista a la Dirección de Obras Municipales (DOM), entidad que negó en varias oportunidades los permisos de edificación del proyecto.

Ante superintendencia

En este conflicto de casi tres años, Enjoy pidió a la SCJ declarar la terminación del procedimiento administrativo de ejecución de sus obligaciones, ante "la imposición de una serie de obstáculos administrativos de parte de la autoridad municipal".

A través de un comunicado, la empresa afirmó que "la persistente omisión de los deberes funcionarios de parte de la autoridad municipal, habrían afectado de igual manera a cualquier operador que enfrente las mismas obstrucciones y arbitrariedades, las que pueden constituir una seria amenaza para todo el sistema de licitaciones de casinos del país", señalaron.

Indicó la misma fuente, que como empresa pusieron todo el esfuerzo y las evidencias técnicas para ejecutar el proyecto. "Los tribunales nos dieron la razón y la Seremi (de Vivienda y Urbanismo) le ordenó a la Municipalidad darnos los permisos e incluso la misma SCJ pidió explicaciones al municipio en tres oportunidades y la autoridad no contestó", precisaron.

Expusieron que se ha llegado a un punto en que por los plazos existentes, resulta inviable ejecutar el proyecto ante tamaña obstrucción del municipio -reiteraron -, no sólo para Enjoy, sino para cualquiera que estuviese en esta situación.

"Hemos solicitado a la Superintendencia que lo reconozca formalmente", apuntó.

Enjoy acusó asimismo de graves ilegalidades e infracciones a los deberes funcionarios de la DOM, orientadas a dilatar el inicio del proyecto, "desde la clasificación errónea y discordante de las calles aledañas al proyecto, materia en la que finalmente tuvo que intervenir la Seremi; junto a la dilación injustificada de los plazos de respuesta, en magnitudes nunca vistas, no cumpliendo con la normativa procesal en materia de urbanismo y construcción; la negativa reiterada para aprobar anteproyectos de edificación; y, al final, la denegación injustificada, fuera de plazo, y en desacato a la autoridad de vivienda, a otorgar el permiso de edificación".

De todos modos Enjoy informó que la empresa mantendrá la operación del hotel en la ciudad y "estaremos siempre disponibles para dialogar con las nuevas autoridades entrantes en las próximas semanas".

Diferencias

Para el alcalde de Puerto Varas, Ramón Bahamonde, la situación de Enjoy es injustificada, porque "como buen observador, la oferta que ellos hicieron (en la licitación) era irreal a la industria de casinos, para los intereses del municipio. Estaba desproporcionada la oferta en relación al aumento que solicitaba la Superintendencia de Casinos y Juegos, donde se concentraba sin pérdidas a los municipios en la nueva licitación".

Recordó Bahamonde haber levantado su voz y que manifestó en ese momento sus dudas "sobre qué se escondía detrás de esas tremendas cifras. Se veían como beneficiosas para la ciudad, pero a la vez era irreal para la industria, en cuanto al porcentaje".

Sobre el papel de la DOM de Puerto Varas, cuyo actuar la empresa ha objetado, el jefe municipal lacustre comentó que "ese departamento rinde cuentas al Minvu (Ministerio de Vivienda y Urbanismo). Ellos no han hecho otra cosa que aplicar las normas, de acuerdo a la cabida que tienen las calles y al volumen de gente sobre la cual ellos comprometían el pago de lo que habían ofertado".

Bahamonde comentó que la empresa no puede estar utilizando la actual infraestructura de calle Klenner, hacer cambios a ese recinto, "culpar al municipio e irrespetar la historia de Puerto Varas".

También evidenció que en la propuesta de ampliación del Hotel (ex Patagónico), "solicitaban la modificación de los ingresos al recinto, con lo cual no estaban acatando las disposiciones legales vigentes".

Defendió el trabajo de la DOM y señaló que no ha habido obstáculos, "sino más bien una respuesta ante una solicitud de aprovechamiento indebido para violar las inspecciones que hoy rigen la constructividad en la comuna".

Bahamonde apuntó que la empresa tampoco cumplió con el plazo para finalizar las obras en julio del año 2020, momento desde el que la Municipalidad "debió haber recibido los recursos ofertados".

"Considero que en este caso, fue la Superintendencia la que falló, ya que la Municipalidad debió haber sido compensada económicamente, en base al incumplimiento del desarrollo de la infraestructura", aseguró el jefe comunal.