Sello fundacional del gobernador
Quien asuma el cargo regional tras las elecciones de este año, tendrá una oportunidad única para definir el rumbo de Los Lagos. Reactivación económica, relación con el nivel central, nueva Constitución y desarrollo y medio ambiente serán temas prioritarios.
Aunque el próximo 11 de abril, la elección de constituyentes, en primer lugar, y la de alcaldes, en segundo, acapararán todas las miradas de la opinión pública, tanto por la convención que comenzará a trabajar en la nueva Constitución como por la configuración del poder en los municipios (habitualmente un indicativo de lo que serán los siguientes comicios presidenciales); para las regiones, al menos, la que defina a los primeros gobernadores regionales se constituirá en todo un hito en su vieja aspiración por obtener mayores grados de autonomía. Esta figura, por primera vez en la historia de la república, será la depositaria de la soberanía popular de los territorios ubicados más allá de Santiago y, como tal, habrán de responder a la voluntad local más que a las directrices del nivel central, que es lo que ocurre con los intendentes.
En el caso de la Región de Los Lagos, hay cinco candidaturas que ya están trabajando en una campaña inédita, tanto por lo que está en juego como por las limitaciones sanitarias que impone la pandemia. Dos de esas cartas fueron dirimidas en una primaria, las de Patricio Vallespín y Jaime Sáez, por el pacto de la Unidad Constituyente y el Frente Amplio, respectivamente. Además de ellos, compiten por el cargo, Ricardo Kuschel, de Chile Vamos; Paola Venegas, de Dignidad Regional; y Alfonso Belmar, del Partido Ecologista Verde.
Independiente de los programas de cada uno, los postulantes de Los Lagos habrán de definir de forma muy clara su postura frente a cuatro temas muy sensibles para la comunidad regional: para el corto plazo, la reactivación económica, debido a las profundas secuelas que ha provocado la crisis sanitaria en el tejido productivo local. Y para el mediano y largo plazo, la relación que habrán de llevar con el nivel central, en función de la más que probable contienda de competencias que haya con el delegado regional (sucesor del intendente); la nueva Constitución, por el rol de las regiones en la nueva Carta Magna; y la relación entre desarrollo y medio ambiente, por las especiales características geográficas de Los Lagos. En cada una de esas materias se irá dibujando el sello fundacional del primer gobernador regional. Una oportunidad única, sin duda.