Proyectos para el transporte local
Los puertomontinos están asistiendo a un florecimiento de propuestas para mejorar la movilización urbana. Ojalá prosperen.
Es muy probable que los resultados del Censo que se está realizando actualmente en el país termine por consolidar la sensación que hay respecto del enorme crecimiento demográfico que está experimentando Puerto Montt, agudizado aún más durante la pandemia, cuando se hizo costumbre que producto de las medidas de confinamiento e impulso del teletrabajo, llegasen numerosas familias a vivir desde la zona central. Todos en la ciudad deben conocer casos de gente que lo dejó todo en Santiago para venirse a disfrutar de las bondades paisajísticas que hay en la zona. Este fenómeno no abarcó sólo a la capital regional, sino que se vivenció quizás con más fuerza en comunas como Puerto Varas, Frutillar y Llanquihue.
Esta realidad emergente trae varios desafíos, sobre todo para una urbe de las características de Puerto Montt. Una de ellas es la del transporte público, que por años ha sido una de las grandes deudas para con la calidad de vida de los habitantes de esta zona. Si hasta antes de la pandemia ya se evidenciaban los problemas, durante la emergencia sanitaria tal variable hizo crisis con la significativa disminución de microbuses en servicio, habida cuenta de conductores que prefirieron emigrar hacia otros rubros.
Desde hace alrededor de un mes entró en vigencia el nuevo plan de ordenamiento del trasporte terrestre, más conocido como "perímetro de exclusión". Aunque es prematuro todavía para hacer un balance, da la impresión que ha mejorado la frecuencia de los recorridos, así como su cobertura, excepto para sectores como Alto La Paloma, avenida Austral y Valle Volcanes, marginados de esta política pública.
Pero el crecimiento demográfico exige más, pues la actual configuración no bastará para lo que viene. En este sentido, el proyecto de regreso del tren, para el tramo entre Llanquihue y la estación La Paloma, en Puerto Montt, así como la iniciativa para instalar ascensores y teleféricos (la primera parece estar más avanzada que la otra), vendrán a constituirse en necesarios complementos para una ciudad que por su condición geográfica, requiere de soluciones innovadoras y con viabilidad económica.
Por cierto, salvo el perímetro de exclusión ya en marcha, los otros tres proyectos están aún en el plano de las intenciones. Habrá que ver cuánto se avanzará y cuántos recursos económicos se dispondrán para ello.