La llegada de los "turbazos"
En la zona más insegura de Puerto Montt se produjo el aterrizaje de un nuevo e inquietante tipo de accionar delictual.
Mientras los puertomontinos disfrutaban de las animadas jornadas dieciocheras del fin de semana largo, en una de las zonas más inseguras de la ciudad se registraba el primer incidente de los denominados "turbazos", que corresponde a acciones violentas y masivas de parte de delincuentes que se coluden para entrar a un local comercial y llevarse todo lo que puedan, ante la mirada atónita de los encargados y clientes de turno. Ocurrió el domingo en la tarde en el supermercado Santa Isabel que se ubica frente al Terminal de Buses, en la esquina de Salvador Allende con Diego Portales, mismo sector que en los últimos años ha sido escenario de homicidios, robos, quema de vehículos y hasta de secuestros.
De los 12 involucrados en lo que parece ser el primer turbazo en Puerto Montt, se logró capturar sólo a dos, los cuales por decisión del juez de garantía quedaron en prisión preventiva, atendida la violenta naturaleza del hecho, el peligro de fuga y los antecedentes penales. De los otros 10 poco se sabe hasta ahora. Es de esperar que la Fiscalía y la policía esté tras de sus pasos, los detenga y los someta a la instancia judicial pertinente.
Eso es lo que correrá por cuenta de los organismos que realizan la persecución penal y los que administran justicia. Hay, no obstante, otra tarea primordial que se deriva de este turbazo, y que no es otra que mejorar pronto los índices de seguridad ciudadana en un sector que es frecuente plaza de incivilidades y delitos, considerado por muchos como el más complejo de Puerto Montt, producto de un comercio ambulante que campea a sus anchas y estructuras que facilitan el accionar antisocial. Lamentablemente, afecta a la que es una de las puertas de entrada a la ciudad, pues hasta allí llegan los buses de recorrido interprovincial, ofreciendo una pobre escena de una ciudad que a pesar de sus esfuerzos por consolidarse como polo turístico, sufre de cánceres urbanos que en lugar de disminuir, se han ido acrecentando con los años.
El turbazo del fin de semana significa un nuevo escalamiento de los delincuentes. Si no se le pone coto ahora, tanto con la detención de los que siguen libres como por una estrategia de seguridad sólida de parte de las autoridades, se añadirá una nueva constante en la delincuencia urbana.