Responsabilidad al conducir
Se acercan meses en los que aumenta considerablemente el flujo vehicular en las carreteras, y con ello, el riesgo de accidentes. Un aspecto sensible es el de conductores que de manera muy irresponsable consumen alcohol o drogas. Eso es un peligro evidente.
Un fuerte reforzamiento en los controles viales a los conductores que guíen vehículos motorizados están realizando diversas instituciones del Estado en el país, con el fin de evitar accidentes de tránsito durante las fiestas de fin de año y la temporada veraniega, donde ya se avizora un alto flujo vehicular, gracias a la normalización alcanzada por el país después de dos años y medio de restricciones sanitarias.
Estos controles vehiculares buscan, además de disminuir la accidentabilidad, identificar y retirar de circulación a aquellos conductores que manejan bajo la influencia del alcohol y las drogas, toda vez que se exponen a graves accidentes con consecuencias insospechadas para ellos y otras personas que ocupan el espacio público. El país conoce de sobra las consecuencias de estas actitudes irresponsables.
En este sentido, se aplicarán test de alcohol y drogas en fiscalizaciones en ruta que buscan identificar a aquellos conductores que además de infringir la ley, no están en condiciones de guiar un vehículo motorizado. La iniciativa denominada "Cuida tu vida" es una invitación a morigerar las conductas riesgosas de quienes conducen, toda vez que la mayor parte de los accidentes se produce justamente por acciones irresponsables, temerarias o descuidos de los conductores.
De ahí que se debe hacer un fuerte llamado a la conciencia de los conductores a no infringir la normativa y guiar sus vehículos con absoluta responsabilidad. Ello, además de jamás hacerlo bajo la influencia del alcohol o las drogas, en cuyo caso se debe entregar las llaves a otra persona que sí esté en condiciones de conducir. De acciones de este tipo dependerá no tener que lamentar nuevas muertes en unas fechas que debieran estar reservadas sólo para el reencuentro familiar y el relajo.
Los días que vienen serán la prueba de fuego para constatar que los conductores sean responsables. Han de comprender que de sus actos depende la vida propia, la de quienes transportan y la de los usuarios de las vías.