Correo
Comercio de Antonio Varas
La semana pasada salió a la la luz algo que los vecinos de calle Antonio Varas, en la zona de trabajos de soterramientos, venían avisando desde el año pasado. Las obras van tremendamente atrasadas. No en días. No en meses. Quizás un semestre o incluso un año. Y al parecer la noticia no llamó la atención a autoridades municipales o de la Seremi de Economía.
No se ha visto ninguna intención de apoyar o conocer la situacion del comercio. Ni una caminata por el sector viendo el drama económico. Es probable que las autoridades no dimensionen ni comprendan lo que está pasando. Lo expongo en sencillo.
Primero: la zona de obras agrupa a más de 300 locales de comercio de vitrina pequeña. Trabajan en él 1.200 personas. Segundo: sobre el 75% de ellos son pequeños comerciantes arrendatarios (más de 230 locales).
Tercero: la caída de ventas en la vereda norte, donde no hay excavaciones ni pasarelas, es de un 40% en promedio. Cuarto: la caída en ventas en la vereda sur, donde hay excavaciones y sólo acceso por pasarela, es de un 70% en promedio.
La obra proyectaba terminarse en diciembre de este año, pero al conocerse la realidad, no será sino hasta el último trimestre de 2023. ¿A ninguna autoridad, de verdad, le baja siquiera curiosidad de conversar con el comercio pequeño?
Las obras de soterramiento debían empezar en mayo de 2021 como tope, para no afectar la ruta crítica del trabajo constructivo. La realidad indicó que empezaron en abril de 2022. Once meses de atraso por mera falla administrativa. Un error de presupuesto que implicó pedir más fondos. No fue una falla constructiva.
¿Cómo ayudamos al comerciante pequeño? ¿De verdad tan indiferente puede ser la autoridad? Invito a las autoridades a que trabajemos anticipadamente esto. Antes de que este sector fallezca por olvido.
Hay un drama invisibilizado que se hace necesario dar a conocer. Y como puertomontinos, hagamos un gesto de cariño. Cuando necesitemos adquirir artículos de hogar, electrónica, librería o ropa, quizás almorzar, quizás hospedar a alguien, intentemos ir a comprarle a ese comerciante golpeado por la indiferencia en el sector de las obras. Ese pequeño comerciante lo atenderá como condesa o conde, y verá en sus ojos, emoción y agradecimiento de que lo visitó, le tendió la mano y compró algo.
El sector es altamente variado en su oferta. Los vecinos de calle Antonio Varas necesitan percibir cercanía de su autoridad. No la frialdad de la espalda y la indiferencia que hasta hoy exhibe. Un gesto. Ya que el atraso nace de un error administrativo del municipio, reflejado en que tuvieron que pedir un aumento de fondos para el trabajo de soterramiento, en septiembre de 2021. Me imagino que ya propusieron y pusieron en tabla del Concejo Municipal, por ejemplo, liberar de cobro de patentes al comercio de ese sector, hasta el término de las obras. Gestos y proactividad.
Luis Díaz Guajardo
Pandemia y caos escolar
Durante los últimos tres años en curso se ha notado una disminución en la celebración de aspectos "no académicos" en muchas de nuestras escuelas y liceos. Esto trae como excusa la pandemia. ¿Cuál es la importancia de los actos?
Respondiendo a ello, no se puede dejar de nombrar el término de cultura escolar, la que incluye sistemas de creencias, valores, estructuras cognitivas generales y significados dentro del sistema social caracterizado por un patrón de relaciones de personas y grupos dentro de ese sistema. En términos muy generales, a partir de las ideas expresadas en las definiciones precedentes, la cultura escolar se podría definir como los patrones de significado transmitidos históricamente y que incluyen las normas, los valores, las creencias, las ceremonias, los rituales, las tradiciones y los mitos comprendidos, quizás en distinto grado, por las personas miembros de la comunidad escolar.
Este sistema de significados generalmente forma lo que la gente piensa y la forma en que actúa.
Algunos autores tienen una visión más bien holística, mientras otros enfatizan el hecho que toda cultura escolar incluye diversas subculturas en su interior.
La cultura escolar está compuesta de tres factores, los que son cruciales para que se haga presente: actitud, participación de los padres y/o apoderados, comunicación. Por protocolos y distintas situaciones, la participación de las familias ha disminuido, lo que va en desmedro de la celebración de distintos "hitos" escolares, los que daban el sello o potenciaban la vida escolar. Dentro de las mismas, tenemos vivencias que los estudiantes dejaron de percibir y hoy pasan a ser un recuerdo.
Con el paso del tiempo se han ido normalizando ciertas prácticas, pero sólo enfocadas en lo académico. Después nos quejamos sobre el nivel de estrés o violencia de los alumnos, pero si ya no entregamos otra cosa que no sea contenido, cómo esperamos que los estudiantes tengan tiempo de esparcimiento.
Hay establecimientos que sin duda han ido recobrando esto, pero son los menos. ¿Quién es el responsable de ello? Incluso la forma de comunicarse cambió, el uso de plataformas electrónicas o canales digitales poco han ayudado en "esa cercanía" que existía con los profesores y el establecimiento. Alumnos que están conociendo a sus profesores y sus colegios; desconociendo la parte no académica.
No han disfrutado de actividades extraprogramáticas, actos ceremoniales, ni han visto a sus profesores en otra instancia. Esto genera otro tipo de recuerdos, y no la aversión hacia el estudio o la institución. El tema es muy amplio y no da sólo para una carta.
Para finalizar dejo las siguientes preguntas: ¿qué es lo que más recuerdas de tu escuela, colegio o liceo? ¿Cuáles y dónde fueron los momentos felices en tu etapa escolar?
Francisco Ojeda Navarro
Menú constitucional
Menú con las alternativas constitucionales: Apruebe, y después se mejora. Algo así como "coma" tranquilo, no se haga problemas, para eso existen las pastillas de carbón, por si algo le indigestara después.
Rechace, y le mejoran la que existe (o le hacen una nueva). Algo así como más vale una cazuela conocida y probada, que empezar hoy a conocerle la mano al chef, y si está medio aburrido de la cazuela, le prometen mejorarla o hacerle una nueva. ¡Muy buen provecho!
Luis Enrique Soler
Fiasco de convencionales
Hay convencionales que pasaron sin pena ni gloria. Prometieron mucho, hablaron harto, pero una vez en la discusión constitucional, sucumbieron ante el octubrismo que tiene hoy ya medio muerto el proceso.Muchas gracias por nada. No fueron capaces de exponer, argumentar ni menos colocar un freno. Un fiasco.
Esteban Meza