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Sobre 18 mil personas se podrían vacunar con dosis de refuerzo durante esta semana

EN LA REGIÓN. En Arena Puerto Montt partió proceso de inoculación para la población sobre 86 años. Se espera alcanzar la próxima semana al grupo de 55 y más. Autoridad sanitaria destacó la eficacia que ha mostrado la dosis de AstraZeneca.
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Javier Andrade

Coincidiendo con un periodo de notoria disminución de casos activos y contagios en la región, se dio comienzo ayer en Arena Puerto Montt al proceso de administración de la vacuna de refuerzo contra el covid-19, con el que se espera inocular a una población superior a las 18 mil personas durante esta semana.

De acuerdo al calendario que maneja el Minsal, se comenzará a aplicar esta tercera dosis aquellos mayores de 86 años que completaron su esquema de vacunación con Sinovac, entre el 1 y el 14 de marzo. Para ello se eligió utilizar la dosis del laboratorio AstraZeneca.

A ellos se suman pacientes inmunocomprometidos desde los 16 años, que recibieron su segunda dosis hasta el 31 de mayo.

De acuerdo a la información proporcionada desde el Programa Nacional de Inmunizaciones, en la Región de Los Lagos serán exactamente 18 mil 767 personas las que deberán vacunarse con dosis de refuerzo esta semana, de las cuales 8 mil 745 son de las provincias de Llanquihue y Palena, 4 mil 158 de Chiloé, y 5 mil 864 de la provincia de Osorno.

El calendario indica que hoy será el turno de los adultos mayores entre los 82 y 85 años, y el viernes 13 le tocará a las personas entre los 79 y 81, para continuar durante toda la próxima semana, hasta llegar al grupo de 55-63 años.

ESQUEMA de dosis

De acuerdo a lo señalado por la seremi (s) de Salud, Marcela Cárdenas, ha sido un año y medio "tremendamente complejo. Podemos decir que actualmente estamos viendo los resultados del proceso de vacunación que partió en marzo".

Indicó que ese avance en el esquema de inoculación se ha evidenciado en una menor cifra de contagios del virus y también en un menor número de camas UCI ocupadas.

Acerca de las razones para determinar la aplicación de esta dosis de refuerzo, señaló la autoridad que ha sido por el hecho de que la cantidad de anticuerpos circulantes ha tendido a bajar con el tiempo. "Por ello es que hemos iniciado esta campaña con aquellas personas que han sido vacunadas con Sinovac, privilegiando a la población adulto mayor, a quienes tenemos que proteger con mayor fuerza", precisó.

Refiriéndose a la calidad y eficacia de la vacunas AstraZeneca, la profesional aclaró que se trata de un inmunizante seguro y que ha mostrado una alta efectividad, tanto en estudios clínicos como en el seguimiento de vacunados que se realizan en el Ministerio de Salud, mostró un 68% de efectividad para prevenir el covid y un 100% de efectividad para prevenir hospitalizaciones, ingresos a UCI y fallecimientos.

El encargado provincial del Programa Nacional de Inmunizaciones, David Sánchez subrayó que "para esta dosis de refuerzo es importante considerar que para personas sanas se considera un intervalo mínimo de administración de 4 meses, y para personas con inmunosupresión o inmunocompromiso, se ha establecido un intervalo de 2 meses en adelante desde la segunda dosis de Sinovac".

Afirmó que el llamado, de acuerdo a esta calendarización, es que todas las personas que fueron vacunadas con dos dosis- y que cumplen con el criterio de la edad- entre el 1 y el 14 de marzo, a que deben vacunarse en este periodo.

POBLACIóN COMUNAL

A nivel comunal, el director de la Dirección de Salud Municipal, Miguel Aravena, informó que se ha implementado la modalidad presencial, con cuatro puntos de vacunación: Arena Puerto Montt, Escuela Kimun Lawal, Escuela Padre Hurtado en el sector de Mirasol y jardín infantil de Cecosf de Puerta Sur, y la modalidad domiciliaria, la que se solicita a través del fono 800 650 100, para que sea utilizada por familiares que personal de salud pueda concurrir a los hogares.

Indicó Aravena que a través del programa Asiste están concurriendo a inocular a más de 1.600 adultos mayores "que están catastrados y que serán atendidos de forma permanente hasta el viernes 20".

Agregó que los Centros de Salud Familiar están en coordinación con los Eleam, con los lugares donde se encuentran personas de la tercera edad, como casas de residencia, y con algunas juntas de vecinos para ir a vacunar en caso de que las personas no puedan trasladarse", dijo.

Acerca de la atención en las zona más alejadas, explicó que los días sábado se realizarán operativos de vacunación.

En cuanto a la cobertura de dosis de la capital regional, comentó que se alcanzó a un 85% de la población vacunada en dosis completa y en niños de entre 12 y 17 años, se está superando el 45% de inmunización y avanzando además con la segunda dosis.

85 por ciento de la población objetivo de Puerto Montt completó el esquema de vacunación contra covid.

1.600 adultos mayores es la cifra aproximada que registra el Disam Puerto Montt para ser vacunados a través del programa "Asiste".

La vejez no es enfermedad

Guillermo Tobar Loyola Académico del Instituto de Filosofía de la Universidad San Sebastián, sede De la Patagonia
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No hace mucho la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó la vejez como una enfermedad. Distintas sociedades médicas y profesionales dedicados al estudio y cuidado del envejecimiento hicieron presente su preocupación, su malestar y su rechazo.

Por supuesto que difícilmente se podrá estar de acuerdo con la OMS cuando se ve a un anciano caminando por la calle, leyendo el diario o manejando un automóvil. A nadie se le ocurre creer que por el sólo hecho de mostrar arrugas pronunciadas, cabello encanecido o un caminar cansino se está frente a un enfermo.

Si atendemos una definición de enfermedad como "alteración leve o grave del funcionamiento normal de un organismo", nos damos cuenta de que la vejez en ningún caso es una alteración a la condición humana. Si algo revela la edad de una persona es la etapa de su vida en la que se encuentra. Cada período evolutivo de estas etapas posee una particularidad concreta y una genialidad intransferible. Así, la infancia, la juventud, la edad adulta y la vejez son fases de una misma vida ordenada al desarrollo y plenitud en hombres y mujeres.

Cuando preguntamos la edad a un niño, un joven o un adulto, no le preguntamos por su enfermedad, sólo averiguamos en qué etapa de la vida está. De tal manera que en ningún caso un cúmulo de años o un trastabille en el andar son una alteración patológica de nuestro organismo, por el contrario, estamos frente a una transformación natural y esperada de la condición humana.

Me parece del todo necesario que la sociedad en su conjunto tenga entre sus prioridades la tarea de mostrar a niños, jóvenes y adultos el valor depositado en una arruga o en una cana. Ambas señales acompañan la vejez, pero en ningún caso la definen como tal.

Existencialmente hablando son sólo un pálido retrato de lo que realmente significa ser mayor. El paso del tiempo nos hace acumular años inevitablemente, pero alcanzando la vejez éstos se convierten en experiencia de vida que ninguna institución puede certificar.

Es la naturaleza misma la encargada de legitimar la etapa de la vejez en cuanto nadie puede alterar los ciclos de la vida humana para conseguir súbitamente lo que se alcanza a lo largo de una existencia vivida minuto a minuto. Siendo viejo puedes parecer más joven, es lo deseable por muchos, pero si así fuera no por eso se perdería la experiencia y lo que normalmente la acompaña, la sabiduría.

Lo que no se puede hacer es torcer el brazo a la naturaleza, mostrarse más viejo para alcanzar experiencia o algo de sabiduría. Una vez más, la práctica nos enseña que nadie da lo que no tiene y para tenerlo hay que ganarlo.

En este sentido la vejez tiene como característica excepcional haber adquirido pergaminos suficientes como para mirar la vida sentada en la madurez de sus vivencias.

La educación y las políticas públicas deben contribuir a una mirada de la vejez digna de aprecio y consideración. Por el contrario, se debe rechazar cualquier forma de condena que atente contra la etapa de la vida hacia la que natural e inevitablemente no sólo caminamos, sino también hacia la que aspiramos llegar lejos de la enfermedad.

"En ningún caso un cúmulo de años o un trastabille en el andar son una alteración patológica de nuestro organismo, por el contrario, estamos frente a una transformación natural"