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el universo de personas con las que podrán trabajar, porque dada "nuestra experiencia es muy probable que no todos quienes habitan en las tomas puedan acceder a soluciones habitacionales".
Además, explica que el trabajo con sitios de este tipo debe ir enlazado con proyectos de recuperación y aprovechamiento de los terrenos o iniciativas que, al menos, permitan evitar su repoblamiento, para lo cual es fundamental trabajar con los propietarios de dichos predios.
De esta forma señala que el Minvu está definiendo las acciones a seguir, de manera de "involucrarnos en un trabajo que debe ser multisectorial con familias que hoy residen en tomas y campamentos, en el que deben participar municipalidades, privados y otros organismos públicos, porque si bien existe una necesidad de vivienda, la pobreza es multidimensional y requiere la apertura de oportunidades en diversos ámbitos".
En el municipio de Puerto Montt también están trabajando en la elaboración de un catastro que permita determinar el número de habitantes que tiene en la actualidad el campamento.
Así lo confirma Jacqueline Paz, directora de Desarrollo Comunitario de la municipalidad, quien recordó que de las 10 personas que habitaban el lugar el año pasado, hoy el número es muy superior y por ello la administración del alcalde Gervoy Paredes solicitó la realización de un nuevo estudio que permita precisar cuántos pobladores tiene la toma.
Una labor que está realizando la Dideco junto al Departamento de Vivienda.
Conflictos
Sandra Mansilla reconoce que en el lugar existen problemas graves.
De hecho, "dos veces han intentado entrar a mi casa para matarme porque hicimos público el que están cobrando la luz y el agua", agregando que esto lo han expuesto de distintas maneras.
Junto con ello, describe que hoy el campamento se divide en dos partes: "el lado derecho y el lado izquierdo. Yo vivo en el primer sector y desgraciadamente en medio de las personas que hoy causan problemas".
Además, reconoce que están conscientes de los peligros que corren, sobre todo de derrumbe. "Pero es eso o morir de frío, porque no tenemos dónde irnos. Ahora, hay personas que no tienen que estar en el campamento y así lo hice saber desde un principio, de antes de constituirnos como comité".
Ello porque, según cuenta, hay quienes tienen terrenos o han vendido sus propiedades y hoy habitan en la toma "Esperanza".
Por esta razón pide que se pueda investigar a las personas y así precisar si es que existen quienes vendieron o tienen en arriendo sus casas y se fueron a vivir a este terreno.
Con Mansilla coincide el diputado Fidel Espinoza (PS), quien es el presidente de la Comisión de Vivienda de la Cámara Baja, quien solicita a la gobernadora Leticia Oyarce que actúe de acuerdo a lo que le exige la ley.
Para Espinoza, es importante que se realice una investigación que determine cuál es el rol que está jugando el Estado para permitir que ocurra este tipo de situaciones.
El diputado señala que no comparte que hoy día existan tomas de terrenos privados, puesto que Chile tiene una buena política habitacional si se compara con el resto de los países de Latinoamérica, por lo que se puede postular a una vivienda y en uno o dos años tener la casa propia.
"Hay muchos comités que dicen que llevan unos ocho años esperando, pero lo concreto es que cuando se postula al Serviu, al primer o segundo concurso, la persona ya tiene su subsidio en la mano", destaca.
Espinoza admite que uno de los problemas que se puede generar en Puerto Montt es la especulación de los terrenos, pero ello no es excusa para que "nos llenemos de campamentos porque ello se traduce en algo negativo para el propio desarrollo urbanístico de la capital regional".
" En (Pellines) y Frutillar está ocurriendo un fenómeno parecido, ya que han llegado a tomarse terrenos personas que tienen una camioneta 4x4 afuera"
Fidel Espinoza, Presidente de la Comisión de Vivienda de la Cámara de Diputados