Sernapesca sigue fiscalización por último escape de salmones
EN CALBUCO. Revisan plan de contingencia de la empresa. Vocero de Greenpeace cuestionó repetición de eventos en la región.
El Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca), realiza supervisiones constantes para comprobar que la empresa Salmones Camanchaca, ejecute las acciones correspondientes de contingencia respecto al más reciente escape de ejemplares ocurrido la madrugada del 27 de agosto.
Luego de verificado el incidente, Sernapesca confirmó el hecho ocurrido en el sector San José, Canal Caicaén en la comuna de Calbuco, específicamente en el centro de acopio San José de la mencionada compañía.
En ese momento se determinó que se vio afectada la jaula N°105 (de destino de la descarga de peces provenientes del centro de cultivo Fiordo Largo), estimando un total de 124.309 especies escapadas, de aproximadamente 500 gramos cada uno.
Sernapesca solicitó un informe para detallar la "verificación del estado de las estructuras y redes de las balsas-jaula, mediante filmaciones con uso de un robot submarino (ROV, por su sigla en inglés) y de las cámaras de vigilancia del centro, recuento de peces y registros documentales para determinar el número exacto de peces fugados".
Desde ese servicio informaron que se sigue con la evaluación de antecedentes "para determinar las responsabilidades y acciones legales, según corresponda".
A pesar de los numerosos intentos de comunicación con la empresa Camanchaca, no se obtuvo respuesta para conocer el estado de avance de esas gestiones, así como el desarrollo de la investigación y control del incidente.
Hechos repetidos
En tanto, el vocero de la organización medioambientalista Greenpeace, Mauricio Ceballos, criticó la investigación de Sernapesca en torno a esta fuga y calificó de desconcertante la cantidad de escapes de salmonídeos que se ha registrado en la zona las últimas semanas.
"Nos tiene bastante impresionados esta seguidilla de escape de salmones en los últimos días, en distintos puntos del sur del país. Aunque es bastante obvio que esto va a seguir sucediendo mientras exista la actividad salmonera, porque es una parte sustancial e implícita de la industria. Pero lo que impresiona es cómo las autoridades están de brazos cruzados respecto a lo que está sucediendo", precisó.
Asimismo, Ceballos expresó que no hay sanciones reales que desincentiven la práctica y obliguen a las salmoneras "a tomar medidas verdaderas para que no sigan ocurriendo estos accidentes".
A fines de junio, en el Seno de Reloncaví, se produjo un masivo escape de salmones desde el centro de cultivo Caicura, operado por la empresa Salmones Blumar. El recinto reportó más de 800 mil peces, en etapa de engorda.
En esa oportunidad, la industria atribuyó el incidente al fuerte viento cordillerano en la zona durante esos días, provocando la caída de 16 de las 18 balsas-jaula dispuestas para el engorde.
Este accidente también sigue siendo investigado por las autoridades de pesca, quienes solicitaron los días posteriores al escape, la verificación del hundimiento de ese módulo de cultivo, compuesto por 18 balsas-jaula, y materiales del centro a la deriva; monitoreo de las faenas de remolque del pontón con destino a Puerto Montt; inspecciones diarias en la planta reductora para el recuento de ejemplares recapturados y fiscalización con la ayuda de un robot submarino (ROV) para identificar la presencia de la estructura en el fondo marino, entre otras.
124.309 ejemplares de 500 gramos cada uno, en promedio, escaparon del centro de cultivo de la empresa Camanchaca.
27 de agosto se produjo el incidente en el centro San José, del canal Caicaén en Calbuco, específicamente en la jaula N° 105.