"Si bien no podemos cerrar la comuna (…) hemos realizado todas estas acciones de coordinación".
Carlos Soto, alcalde de Cochamó,
lugar que se mantiene sin contagios.
"Endurecí el corazón tanto en la despedida como en la llegada (…) además no había demasiado tiempo".
Mario Cárdenas, poeta puertomontino, tras su regreso a Chile desde Perú.
Entre tantas informaciones negativas vinculadas al impacto de la pandemia en la región y el país, positivamente ha sido recibida por la opinión pública el anuncio del comienzo oficial del proceso para licitar la anhelada interconexión vial entre Alerce y Puerto Montt, proyecto que cuando se concrete -se espera que en diciembre del año 2022-, vendrá a saldar una vieja deuda con los residentes del poblado ubicado en el camino a Puerto Varas, históricamente marginados de una serie de comodidades básicas para la vida urbana. La obra, que forma parte del Convenio Ciudades Más Humanas del Gobierno, considera una cuantiosa inversión de $10 mil millones, con la participación del Gobierno Regional y los ministerios de Obras Públicas, Vivienda y Transportes, dada la magnitud de variables que tendrán que contemplarse para su correcta ejecución.
La futura interconexión vial permitirá un flujo más expedito de vehículos particulares y transporte público entre Puerto Montt y Alerce, y viceversa. Las primeras estimaciones, entregadas por el seremi de Transportes, apuntan a que los viajes sufrirán una significativa disminución entre ambos lugares: de 40 a 20 minutos. Basta señalar que en Alerce viven más de 40 mil personas, muchas de las cuales se desplazan diariamente hasta Puerto Montt por trabajo o por estudios, para dimensionar el enorme impacto que este proyecto debiera representar para la comunidad.
Con todo, dado el complejo momento económico que está viviendo el país por la pandemia y que hasta ahora no tiene salida, será necesario que la ciudadanía permanezca muy atenta al cumplimiento del cronograma anunciado por las autoridades. Tal cantidad de recursos comprometidos seguramente serán objeto de debate en el mediano plazo para atender las urgencias sociales. Aun así, habrá de enfatizarse que una obra de estas características, por lo demás, brindará numerosos puestos de empleo a la población local en una época en que la cesantía ya empieza a hacer mella en los bolsillos de las familias. Para ello, eso sí, es necesario que la empresa que gane la licitación garantice precisamente que priorizará a los trabajadores puertomontinos.
Este fin de semana recién pasado se celebró el tradicional Día del Patrimonio. Pero de tradicional no tuvo mucho; el vecino no pudo este año recorrer hasta los últimos rincones de palacetes públicos, quintas, antiguas fábricas o museos atestados de eufóricas familias. Tampoco encontró en la calle los sonidos propios, las deliciosas recetas tradicionales; los creadores no armaron ferias, estuvimos pegados a las pantallas con la nostalgia de pasar la cultura por el cuerpo.
Si bien patrimonio suena a piezas de museo envitrinadas, el patrimonio es en realidad ese caldo bullente que se va resignificando en cada época y sobre el que generamos hábitos y preferencias con las que habitamos el mundo. Es tan cotidiano que se nos hace invisible.
Todos participamos del fluir vivo del patrimonio, especialmente los creadores, quienes son capaces de revitalizarlo a través de nuevos espacios que habitar, recetas que comer, canciones que escuchar y bailar, libros que leer, vestidos para vestir, aparatos por los que hablar… nuevas maneras de habitar nuestro mundo. A ello hoy llamamos las industrias creativas.
En la Región de Los Lagos, el acervo patrimonial y el talento creativo es enorme, es un inmejorable territorio para considerar en nuestras estrategias de desarrollo al patrimonio y la creación como un eje central. Hoy en Fundación Plades nos preguntamos cuáles son las oportunidades en torno a la industria creativa y cómo podemos con ello mejorar el bienestar de los habitantes de Frutillar.
En medio de la búsqueda global por nuevas maneras de habitar el mundo, resignificar la planificación de la ciudad, la experiencia de los habitantes y visitantes, lo que ocurre en las salas de clases, en los parques o la relación con el medio ambiente, son preguntas que nos movilizan, y para ello creadores y creadoras son nuestros primeros socios.
Luego de un Día del Patrimonio pegados a la pantalla las preguntas son ineludibles, ¿cuáles son esas nuevas maneras de habitar el mundo?, ¿en qué anclar la construcción de este nuevo mundo?, ¿quiénes son nuestros aliados para ello? Pareciera que el patrimonio y las industrias creativas pueden ocupar en ello un lugar protagónico, hasta hoy inexplorado en nuestras ciudades.
José Feuereisen, director Sociocultural e
Inteligencia Territorial de la Fundación Plades
Durante la noche y el día de ayer nuestra ciudad fue azotada por un recio temporal de lluvia y viento, con las consecuencias propias de este tipo de eventos. Fue así como en horas de la mañana obreros de la empresa eléctrica trabajaron intensamente en la reposición del alumbrado público que fue destruido por el viento.
Los empresarios de Puerto Montt no se quieren quedar atrás en la revolución digital del comercio. Es por eso que nuestra ciudad será sede en julio próximo de un megaencuentro regional de líderes y empresarios del sur chileno, quienes analizarán las perspectivas y factores necesarios que permitan sellar una alianza regional.
Preocupados por la conectividad de Cochamó están sus dirigentes vecinales, los que enviaron una carta al Ministro de Obras Públicas, Hernán de Solminihac, con el fin de adelantar obras de asfalto en la única comuna de la Provincia de Llanquihue en comparación de las otras, que no cuenta con este adelanto en sus accesos.