Javier Andrade

Con las máximas ganas de haber disputado el título de Chile ante el puertovarino José Árgel, Luis Junior Cruzat se despliega con entrenamientos en doble jornada en el espacio que habilitó en su hogar de Llanquihue

El púgil de 19 años lamenta que la pandemia fue más fuerte y frustró sus sueños de combatir en la pelea que se gestionaba para llevarla adelante en junio próximo.

"Desde el último combate, he seguido entrenando, pero también se me ha ido acortando el año, tenía muchos proyectos en mente y entre ellos, el combate por la corona del peso pluma. Estábamos programando una velada ante Árgel, en el Casino Monticello o en el Club México", aseguró. el novel púgil.

Agregó que aguarda con impaciencia que pase esta tormenta del coronavirus, para poder realizar la pelea a fines de año.

De hecho, también se había adelantado la posibilidad de hacer un combate previo en el Casino Dreams en septiembre, para el cual tendría el apoyo de este centro de entretenciones de Puerto Varas.

Entrenamientos

Tal como ha ocurrido con muchos deportistas locales, "La Joya" Cruzat dejó hace un mes de asistir el gimnasio municipal de Llanquihue que debió ser cerrado, por lo que agarró toda su implementación deportiva y se trasladó a su casa en la que instaló una sala en la que se prepara.

"Para mí lo más importante es el boxeo, tengo todo cifrado en lo que pueda ser como púgil. No me cayó muy bien la idea de dejar el recinto, así que hemos tenido que irnos acomodarnos a los trabajos, sin la presencia física del PF Rodrigo Ortega, quien me envía la pauta y las hago en casa", aseguró.

Aseguró que la motivación es distinta de la idea de no estar en un ring y en la que le hace falta contar con sparrings. "Estamos solos con mi papá acá, ha sido una etapa estresante en lo emocional, pero tenemos que acostumbrarnos a prepararnos en turnos de mañana y tarde", precisó.

Por otro lado, a Junior Cruzat, este momento lo deja también en un mal pie económico, especialmente por su padre Luis Alberto Cruzat, quien además de dirigir a su hijo, mantenía una escuela de boxeo y desarrollaba clases de aerobox en el reducto llanquihuano y no sabe qué sucederá con el proyecto.

"Ahora, aparte de entrenar, trato de cuidarme, no salir y me dedico a ayudarle a mi madre (María Cornejo) en la cocina a preparar productos gastronómicos para solventar los gastos. Necesitamos generar nuestras lucas, porque esto se ha transformado una situación bien compleja para la familia", explica.

Afirmó también que no ha dejado de contar con el apoyo del alcalde Víctor Angulo, quien ha seguido muy de cerca su trayectoria.

Por último, Cruzat puntualizó que también estaba en los planes, disputar un título latino juvenil de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) y para ellos se estaba armando un combate ante un rival que se iba a confirmar, para octubre o noviembre, sin embargo, aún no hay claridad para su realización.

Claudio Bravo, arquero de la selección chilena y el Manchester City, destacó el saludo de la cuenta oficial de Colo Colo en Twitter por su cumpleaños número 37. El Cacique no quiso quedar al margen de un nuevo año de vida del experimentado golero, quien suma 21 títulos en su carrera y dos de ellos con los albos. Ante esto, el bicampeón de América respondió: "Muchas gracias por el saludo aún tengo frescos en mi memoria todos los días de entrenamientos y sacrificios en esos pastos. Abrazo grande y mis mejores deseos siempre estarán hacia todo el pueblo colocolino".

No muy bien cayeron las palabras de Walter Montillo. Hace unos días atrás, el volante de Universidad de Chile dejó en claro que nunca jugaría en un equipo como Colo Colo diciendo que "yo prometí que nunca jugaría por un archirrival. Hay que tener respeto por la gente".

Y la respuesta llegó de su excompañero en Universidad de Chile, donde coincidieron entre 2008 y 2010, durante el primer paso del argentino por los estudiantiles.

"Yo a Walter lo respeto mucho como persona y profesional, pero eso no quiere decir que comparta todo lo que diga y sus opiniones. Creo que cada uno elige el camino que considere más correcto, y eso hice yo al venir a Colo Colo", comentó Pinto, quien fue formado en la cantera azul, donde debutó en el 2002 y se mantuvo hasta su partida a fines del 2010 al fútbol mexicano.

"Fue un tema que lo hablamos en familia, con mi esposa. No fue fácil, pero creo que la decisión que tomamos fue la correcta. Estar jugando en Colo Colo en Copa Libertadores y compitiendo en un alto nivel eleva mi carrera como futbolista", enfatizó el golero nacional, agregando que "yo siempre voy a estar agradecido de mi pasado, de lo que me entregó Universidad de Chile. Pero hoy mi presente es Colo Colo y quiero lograr muchas cosas con ellos".

A sus 36 años, y tras una dilatada experiencia a nivel nacional, en la liga azteca y también en la selección chilena, Pinto es consciente que no le queda mucho tiempo bajo los tres palos, y cree que su paso por el Cacique también será importante para su proyección una vez que cuelgue los guantes.

"Esto también mejora mi planificación a futuro como director técnico. Haber estado en dos equipos grandes posiblemente me ayudará a surgir en los proyectos que tengo", explicó el arquero del Cacique, quien hasta la paralización del torneo hacía de suplente de Brayan Cortés.

"Creo que cada uno elige el camino que considere más correcto, y eso hice yo al venir a Colo Colo".

Miguel Pinto, Arquero del Cacique

2002 el año en que Miguel Pinto debutó en la "U", club en el que se mantuvo hasta fines del 2010.