Nuestro país está enfrentando unas de las crisis más duras de la historia, la cual ha marcado la forma en que resistimos los problemas, donde la prioridad es proteger la vida. Esta premisa es la que nos mueve en el sector construcción. Desde el 18 de marzo hemos trabajado en implementar todas las medidas necesarias para cuidar la salud de nuestros trabajadores. Así elaboramos un Protocolo Sanitario para Obras con los ministerios de Trabajo y Economía y socializado con los ministerios de Vivienda y Obras Públicas, para ser aplicado en las construcciones.
Pero como sector nos encontramos en grandes dificultades. Por un lado, la autoridad nos llama a continuar con las obras, pero la realidad es que hay zonas de la región con cuarentena, como es el caso de Osorno, o cordones sanitarios como Chiloé, lugares en los cuales no podemos continuar con nuestra labor. Si bien estamos haciendo todo a nuestro alcance por conservar el empleo y mantener activa la construcción, es imposible que los empresarios se hagan cargo de los costos generales de una obra detenida por dos o tres meses.
Si bien las medidas de protección al empleo son una buena noticia, no resuelven el problema, ya que plantea que si existe paralización de una empresa por la actual crisis sanitaria, el trabajador podrá hacer efectivo el seguro de cesantía mientras el empleador continúe solventando los gastos previsionales. Lo anterior es muy difícil de llevar a la práctica cuando una empresa que no está generando ingresos debe pagar las cotizaciones de cientos de trabajadores.
Además, el Banco Central anunció la baja de sus tasas a 0,5%, pero es fundamental que estas medidas lleguen de manera efectiva a los usuarios. Por lo que nuestro llamado es a que la banca local entregue el apoyo necesario a las pymes y grandes empresas para que pueden contar con su capital de trabajo.
Por otro lado, el Presidente de la República creó una mesa público-privada, donde participa la CChC junto a otros gremios, con el fin de coordinar los esfuerzos para enfrentar la crisis. Esperamos que esta iniciativa genere medidas que apoyen la mantención de la actividad de la construcción como actividad estratégica, debido a la cantidad de empleo que ésta genera. El llamado a la autoridad es a tomar decisiones de fondo, a paralizar las obras que no pueden continuar e implementar medidas aptas a la realidad de las empresas regionales, con el fin de que una vez terminada la crisis aún contemos con empresas que puedan reactivar la economía y generar empleo.
Vivian Pinilla, presidenta
de la CChC de Puerto Montt