Hace 66 años, comenzamos una labor importantísima para nuestra zona, inspirados en las ganas de mejorar nuestro rubro, propendiendo a una mayor profesionalización, perfeccionamiento y colaboración entre los que componemos el sector agrícola.

Agrollanquihue, que fue fundado el 21 de mayo de 1950, hoy está abocado a desarrollar y proteger las actividades agropecuarias, forestales, agroindustriales de la provincia; todo esto mediante la optimización de la comercialización de sus productores y la adquisición de sus insumos, además de representar al gremio en la defensa de sus propósitos e intereses comunes ante toda persona o autoridad, y ante todo otro organismo sea público o privado.

Estamos claros que el camino elegido no ha sido el más fácil; nos hemos encontrado con muchos obstáculos a lo largo de nuestra vida como asociación gremial, pero siempre luchando y velando por los intereses de nuestros socios y sobre todo del sector al cual representamos.

Como es sabido, en este momento vivimos como región un período complicado en materia económica y social, situación en la que nos hemos visto involucrados de forma muy cercana, sobre todo por la continua injusticia frente a las altísimas ganancias que tiene la industria lechera, que ha soslayado a los pequeños y medianos productores lecheros, quienes han visto mermar sus ingresos y por lo tanto su calidad de vida.

Nuestra idea, no es expandir aún más la brecha que existe en este momento, si no que hacer un llamado a todos quienes participan de la vida agrícola, a conjugar todo nuestro esfuerzo para que el sector al cual representamos crezca de manera sustentable, tanto en el cuidado de nuestro ecosistema como en el beneficio de quienes viven del campo.

Mañana es nuestro aniversario como asociación gremial y queremos darles un abrazo de esperanza a todos quienes están inmersos en el sector agrícola, y decirles que estaremos dispuestos a continuar mejorando nuestros servicios para que así continuemos y podamos colocar a la agricultura en el lugar que se merece.

Alexis Fuentes Loyola.

Ingeniero Agrónomo, gerente de Agrollanquihue A.G.

Algo que no puede pasar inadvertido y sin que se le confiera la debida connotación, aunque ello ocurrirá cuando se haga el lanzamiento oficial en los próximos meses, es la ya elaborada Ordenanza de Protección y Tenencia Responsable de Mascotas, que se encuentra en plena marcha blanca y en cuya creación intervinieron el municipio, concejales y agrupaciones animalistas, luego de dos años de trabajo en tan importante tarea. Una normativa muy esperada, especialmente, por lo que significa para frenar el preocupante incremento de los perros callejeros en la ciudad, el maltrato y descuido de los animales, entre otras conductas indolentes hacia ellos, nuestros hermanos menores.

En buenas cuentas, la ordenanza municipal resguarda la integridad y protección de las mascotas. Determina condiciones sanitarias y de higiene pública, junto con promover el control integral y reproductivo de la población canina y felina en la comuna de Puerto Montt.

En el marco de las obligaciones ciudadanas para con sus animales -según las nuevas disposiciones- está la entrega de alimentación, salud y condiciones adecuadas de vida, así como igualmente aplicarles las vacunaciones anuales e inscribirlos en los registros que llevará la Municipalidad. Y en cuanto a las prohibiciones, se consignan el abandono y mantenerlos en espacios reducidos o atados, maltratarlos o golpearlos. Todo lo cual se considerará como faltas graves, con aplicación de multas desde las 0,5 a las 5 UTM, además de exponerse a denuncias ante el Ministerio Público.

Hacía mucha falta esta directriz, para evitar los excesos en la tenencia de las mascotas. Un mal reflejado en las decenas de perros vagos que deambulan por la ciudad, en las camadas de animalitos que abandonan en áreas rurales y en la isla Tenglo, entre otras expresiones de inconsciencia ciudadana en el trato de sus animales, sean perros, gatos u otros.

Así también, será, en alguna medida, un alivio para las organizaciones animalistas, especialmente para aquellas que manejan caniles, pues están sobrepasadas en sus posibilidades de resguardo.

Bienvenida sea esta Ordenanza, que norma la debida relación humana con el mundo animal.