Migración y conectividad
El último estudio de opinión de Gente del Sur y la USS arrojó dos elementos relevantes en cuanto a la realidad regional.
En un encomiable esfuerzo de método e interés por lo local, la Fundación Gente del Sur y la Universidad San Sebastián (USS) le están tomando el pulso al estado de la opinión pública regional mediante encuestas que buscan arrojar luz acerca de las principales inquietudes de los habitantes de las 30 comunas de Los Lagos. Desde que comenzó su aplicación y difusión, los ámbitos de seguridad ciudadana han llevado la delantera, en consonancia con los estudios de opinión nacional, todos los cuales han recogido que la ciudadanía, hoy por hoy, se siente más insegura que antes.
Aun así, en la última encuesta, liberada esta semana, se pueden apreciar dos elementos muy relevantes respecto del nivel de las inquietudes ciudadanas de Los Lagos, toda vez que la migración y la conectividad experimentaron un fuerte salto. Mientras la primera pasó del 35,4% al 44,9% a la hora de consultar sobre temas de preocupación regional, la segunda transitó del 33,4% al 42,1%. Estos números entregan claras luces sobre un par de fenómenos que deben ser atendidos con cuidado por la autoridad.
En cuanto a la migración, es casi evidente que la prioridad obedece también al estado de la situación nacional en esta área. Se ha extendido la idea de que las fronteras están demasiado porosas y que el Gobierno, muchos de cuyos integrantes tuvieron en el pasado un discurso ambiguo en esta materia, no está haciendo todo lo posible por ordenar un fenómeno que, muchas veces de forma injusta, se ha asociado con el incremento de la inseguridad ciudadana.
Es en la conectividad, no obstante, donde resalta el estudio de opinión. Se trata de una variable profundamente local que da cuenta de lo mal que lo está pasando la población. Basta con mirar lo que ocurre en Puerto Montt, por ejemplo, para notar que el vertiginoso crecimiento del parque vehicular y la falta de planificación vial está derivando en una congestión que se torna invivible para las personas.
La ciudad crece, hay más autos y más viajes, pero las calles y avenidas, salvo contadas excepciones, son las mismas. El más claro ejemplo es la larga espera por la ampliación de la vía a El Tepual y el cuello de botella que sufren los conductores en sus trayectos entre Puerto Montt y Alerce. Ha habido una y otra promesa, pero pocas cosas concretas en algo tan evidente. Depende de las autoridades.