Sudán: más de 180 civiles muertos por choque entre Ejército y FAR
REBELIÓN. Se abrieron ayer por tercer día corredores humanitarios en medio de los combates entre fuerzas armadas y paramilitares que ya suman 1.800 heridos.
Más de 180 civiles muertos y al menos 1.800 heridos el triste corolario que dejaban anoche, al cierre de esta edición, los tres días de enfrentamientos en Sudán entre el Ejército y la poderosa milicia paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR).
Según el reporte del enviado especial de la ONU en el país africano, Volker Perthes, "hemos registrado más de 180 muertos, civiles muertos, en los últimos tres días, incluidos tres compañeros del Programa Mundial de Alimentos, que fueron asesinados mientras trataban de servir a los sudaneses en el norte de Darfur".
Sudán entró ayer en su tercer día consecutivo de enfrentamientos, que se desarrollan en Jartum y otras regiones del norte y del oeste del país.
El Ejército informó a última hora del domingo la situación general es "muy estable" y que solo hubo "enfrentamientos limitados" con las FAR, esencialmente en la capital sudanesa.
Las Fuerzas Armadas aseguran que controlan la mayoría de las instalaciones militares e infraestructura vital en Jartum, y que han arrebatado a las FAR el estratégico aeropuerto de Merowe, en el norte de Sudán, así como amplias zonas de la conflictiva zona del Kordofán, además de otras regiones.
COrredores
Por su parte, el Ejército de Sudán anunció ayer su adhesión a una nueva propuesta de Naciones Unidas para abrir corredores humanitarios por un periodo de tres horas, una iniciativa que fue adoptada por primera vez el domingo y que fue parcialmente respetada.
Asimismo, dijo que respetará este breve cese de los combates en áreas residenciales y centros urbanos siempre y cuando el poderoso grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) no continúen atacando.
Las FAR, por su parte, no se habían pronunciado acerca de si se adherían o no a esta pausa.
No obstante, el enviado especial de la ONU en Sudán, Volker Perthes, añadió ayer que estaba "extremadamente decepcionado" por el incumplimiento de la tregua del domingo, y apuntó que "solo se cumplió parcialmente" a pesar del compromiso de ambas partes.
Esa breve pausa permitió la evacuación de más de mil personas en la capital, como es el caso de una escuela en el centro de Jartum, de la que pudieron salir unos 450 niños y niñas que permanecían atrapados en el colegio desde el inicio de los combates el sábado.
Tregua humanitaria
Los disparos, bombardeos y ataques contra los hospitales de Jartum han sido una constante desde que estalló la rebelión.
Los combates han dejado atrapados dentro de los centros sanitarios a cientos de pacientes, que conviven con los muertos que no pueden ser evacuados por la intensidad de los choques.
"Pedimos por lo menos obtener permisos para enterrar a los fallecidos y evacuar a los pacientes atrapados en los hospitales, y trasladarlos a centros más seguros y alejados de los choques", dijo Razan al Dawri, la vocera del comité de Sindicato de Médicos de Sudán.
La facultativa aseguró que en los hospitales falta de todo, desde personal y suministros médicos hasta sangre para hacer transfusiones, pero debido a la escalada de violencia sólo pidió ayer que se respete la dignidad humana con una tregua humanitaria de 72 horas.
Al cierre de esta edición, Josep Borrell, jefe de la diplomacia de la Unión Europea, reveló que el embajador de la UE en Sudán, Aidan O'Hara, fue agredido en su casa.