El presidente de la Corte de Apelaciones de Puerto Montt, ministro Jorge Pizarro, rayó la cancha esta semana en una publicación respecto al nuevo centro cerrado e internación provisoria que se levantó hace casi dos años a un costado del penal de Alto Bonito y que a la fecha no ha podido ser ocupado.

El ministro Pizarro no tuvo "pelos en la lengua" para calificar al recinto como "un elefante blanco", porque se invirtieron casi 10 mil millones de pesos y a la fecha ningún niño, niña o adolescente lo ha podido ocupar, todo tras entregas simbólicas, por lo menos dos se han efectuado entre el gobierno pasado y el actual y que no han quedado en nada, porque el enorme edificio lleva dos años sin que se le entregue el uso para el cual fue levantado.

El ministro Pizarro, quien cumplió 10 años en la Corte de Apelaciones, había advertido sobre esta situación el 1 de marzo en plena inauguración del año judicial y frente a las autoridades. La situación preocupa, porque además es un recinto con una plaza para 74 niños, niñas y adolescentes, pero resulta que en el actual centro cerrado, no hay más de cuatro y a veces seis internos.

Tampoco se puede pensar en el traslado desde otras ciudades, porque se pierde el sentido del arraigo familiar.

Se sabe, por lo demás, que la Seremi de Justicia tiene un plan para dar un buen uso al nuevo centro, pero las autoridades hasta el momento tampoco la han visualizado.

jorge pizarro, presidente de la corte de apelaciones.

Chile fue fundado en base a sencillos valores, con esfuerzo, trabajo y lucha por subsistir ante una naturaleza maravillosa, pero a veces hostil. Al principio, había labriegos cultivando la tierra productiva, con dedicación y cariño por lo que el destino entregó. Nada se construyó con rencor, pues éste no engendra buenos frutos. Contrariamente. El odio hace que los frutos del quehacer humano se marchiten, y desvanezcan.

Con odio nadie llegó a tener una casa de madera, con listones pulidos y bien encajados. Tampoco hubo frescos en las iglesias que fuimos levantando, con paraísos pintados, arpas y música celestial. No hay grandeza en el odio entre hermanos; no permite que los padres puedan ver a sus herederos. El odio es un pecado contra la naturaleza, hace que el alimento se vuelva seco como el papel, y el trigo no de buena harina; hace que los límites de lo permitido se borren y nadie encuentre sitio seguro para vivir.

Si sembramos odiosidad, ninguna cosa estará hecha para durar ni acompañar la vida entera, sino para venderse lo más rápido posible, antes que otros lleguen y la aniquilen. El odio se vincula y entronca con la envidia, y ambos se encargan de que los productos no lleguen al mercado, pues no hay ganancia que sea permitida, ni éxito que no genere rechazo. El odio está presente ahora, y se asemeja a una plaga. Mella el juguete en manos del bebé y achata la destreza de la madre que lo cuida, la distrae y preocupa por lo que flota en el ambiente, por lo que se ve venir. Jorge Teillier poeta no trabajó con odio, tampoco Armando Uribe. Ni una sola obra fecunda nació con ello, ni podría haberlo hecho y ser reconocida como tal.

A Solón le tocó vivir una época colmada de odiosidades, en la Grecia antigua. Pero no fue seducido por las pasiones del momento, y gobernó con paciencia, sabiduría; escuchó a todos, menos a los necios y los violentos, a quienes dejó al descubierto para que el propio pueblo rechazara sus oscuros objetivos. Otro tanto ocurriría unos milenios más tarde, cuando Mandela hubo de enfrentar las injusticias de su pasado, donde hombres que profesaban el fanatismo lo habían encarcelado, y mancillado su dignidad. Sin embargo, él no tropezó con el espejismo aciago del odio o la venganza, sino que guió a su patria natal por los senderos del reencuentro y la paz social. Con toda seguridad, sabía que el odio mata el amor naciente, instala en el lecho la impotencia, y se interpone entre el hombre y la mujer.

El odio alimenta la revancha, se proyecta infinitamente en el tiempo, y produce sólo calamidades. No lo queremos para Chile.

El alcalde de Puerto Montt, Gervoy Paredes, vive su último período como jefe comunal, debido a que se encuentra imposibilitado por ley de postular nuevamente al cargo en el que se encuentra desde el 6 de diciembre de 2012.

Y si bien corresponde que deje el sillón edilicio el 6 de diciembre de 2024, es posible que dicha fecha se adelante a octubre de este año.

¿La razón? Gervoy Paredes figura como uno de los nombres que ronda en el ambiente político como carta de su partido, el Socialista, para postular al puesto de gobernador regional, comicios que tendrán lugar en octubre del próximo año, al igual que las municipales.

Pero no es la única opción, puesto que también figura como posible candidato a diputado para los comicios que tendrán lugar un año más tarde.

En todo caso, si Paredes llegase a convertirse en el abanderado de su tienda para la elección de gobernador regional, tendrá que renunciar a la alcaldía en octubre de este año, dejando así la corporación edilicia de la capital regional luego de 11 años de gestión.

Según los trascendidos, Paredes no vería con malos ojos aparecer en la papeleta para postular al cargo que hoy ostenta Patricio Vallespín, el primer gobernador regional elegido por votación.

paredes podría dejar la alcaldía en octubre.