El Gobierno presentó los resultados del Catastro Nacional de Campamentos 2022, trabajo que se realizó con el Banco Interamericano de Desarrollo y el apoyo del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo. Según ese estudio, en Chile hay 1.091 asentamientos, de los que 355 son nuevos. Poco más de un tercio de quienes viven en esos lugares son inmigrantes que llegaron buscando oportunidades de desarrollo.

A pesar de que hay indicadores de desarrollo que han tenido avances importantes en las últimas décadas, siempre hay segmentos de la población que quedan al margen de esos avances y que requieren la ayuda estatal. La pérdida del empleo, los altos costos de arriendos y razones económicas llevan a muchas familias a tener que instalarse en esos asentamientos. También la inmigración se ha transformado en los últimos años en un factor importante en el crecimiento de los campamentos. Por ello, se requiere la coordinación de ministerios para relocalizar a las familias, o la urbanización y radicación de terrenos que ya ocupan.

Si bien muchos creen que las familias pasan de vivir en la calle a instalarse en campamentos, los estudios muestran una realidad distinta. Dos tercios de las personas que viven en los asentamientos antes habitaban una vivienda, aunque la gran mayoría estaba en la condición de allegados. Según cifras de la Fundación Techo, la mitad de las familias que llega a un campamento antes arrendaba y no pudieron seguir pagando la renta, muchas veces porque perdieron el empleo. Las alzas de los arriendos y las dificultades para acceder a créditos habitacionales también han influido en el tema, por lo cual el Gobierno lanzó el Plan de Emergencia Habitacional.

Aparte de los programas del Ministerio de Vivienda para contrarrestar el incremento de campamentos, se hace necesaria una discusión de reformas en materia de políticas de suelo, ya que en muchas comunas escasean los sectores susceptibles de urbanización, mientras que otros resultan muy caros.

El tema de los campamentos debe solucionarse eficazmente, avanzando en mejorar las condiciones de vida, pues la falta de una vivienda digna dificulta la cohesión de la familia y tiene una infinidad de derivaciones sociales negativas.

El tercer jueves de noviembre, es decir, el 17 de este mes, se celebrará el Día Mundial de la Filosofía, un saber inútil, no sé si necesario para el mundo moderno, pero con una validez desarrollada por años. Al hablar de filosofía, siempre se piensa en los grandes filósofos, en las tradiciones de pensamiento o en universidades, invisibilizando otros espacios formales para hacer filosofía, como son las escuelas y colegios.

La labor que realizan los profesores de filosofía en las aulas de enseñanza básica (en algunos establecimientos) y enseñanza media es digna de considerar, ya sea porque abren la puerta al asombro y la curiosidad a los estudiantes, presentan las diversas problematizaciones a la realidad o de modo didáctico, permiten dialogar a sus alumnos con los grandes pensadores de todas las épocas.

La formación del hábito filosófico en espacios escolares no es fácil, más si consideramos la preponderancia que se les da a las asignaturas que son medibles para fines ministeriales, sumado a que el pensamiento filosófico necesita sistematicidad y meditación, cuestiones que la rápida e inmediata vida actual desecha. A pesar de estos obstáculos, la labor de filósofos en las aulas escolares se extiende más allá de las típicas materias y problemas. Es posible ver a estos profesores en torneos de debates o de actualidad, generando charlas sobre problemas políticos y sociales abordados desde la filosofía o dando instancias al pensamiento, mediante la elaboración de ensayos y lecturas.

El quehacer filosófico en nuestra ciudad, justamente, ha tenido sus mayores aportes y apogeo en colegios y liceos emblemáticos, con nombres que han marcado personas e historias, como Ciro Smith, Francisco Fernández y Juan González de Requena, quienes en los colegios San Javier, Arriarán Barros y el Liceo de Hombres, respectivamente, forjaron el hábito filosófico de muchas generaciones que ven en ellos a pensadores que desinteresadamente los condujeron en la búsqueda del bien, la verdad y la belleza.

Sin embargo, la labor no culmina aquí, nombres como Patricio González, Julio Antipani, Mariela Vera, Javier Cárdenas, Andrés Sepúlveda, Francisco Velásquez y Nicolás Irarrázaval, entre otros, siguen el legado del búho de Minerva en medio de las juventudes puertomontinas.

Juan Carlos Alvial, filósofo

80 años | 5 de noviembre de 1942

Comisión aborda las carreras de las góndolas

La Comisión Reguladora de Tránsito abordó las carreras que realizan las góndolas en el radio urbano de Puerto Montt. Además, en otras materias, se resolvió que este servicio sea realizado por dos máquinas, mientras que también se trató la forma de solucionar la disminución de la cuota de bencina (3.000 litros) para esta zona.

20 años | 5 de noviembre de 2002

Comenzó traslado de 600 familias a Alerce

Una nueva fase comenzaron a vivir 600 familias del campamento Las Camelias de Puerto Montt que están siendo trasladadas a Alerce. Según las autoridades, la idea es cambiar a la totalidad de los pobladores en un plazo de 20 días. En el inicio de este proceso, se utilizaron 17 camiones de servicios públicos, del Ejército y la FACh.

10 años | 5 de noviembre de 2012

Los Delfines viven el día más triste de sus 29 años

Tras igualar sin goles ante Magallanes, Deportes Puerto Montt descendió a la Segunda División del fútbol chileno, toda vez que terminó en el último lugar de la tabla anual, con 39 puntos. El último encuentro de la temporada se jugó en el Estadio Santiago Bueras de Maipú, donde se vivió el día más triste en los 29 años de historia del club.