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de sectores como Mirasol, Alerce Sur y Pelluco.
Para Jimena Cofré, presidenta de la junta de vecinos Raíces de Alerce de la Población Navegando el Futuro II de Alerce Sur, señala que las principales problemáticas que se viven en su sector las son los robos, el narcotráfico y las carreras clandestinas, es por ello que se han organizado como comunidad para enfrentar esta problemática.
"La idea principal fue organizarnos, tomar un trabajo en terreno con las autoridades, que desde hace cuatro años no se hace. Enfrentar una temática que es transversal para toda la comunidad de Alerce que es la delincuencia y lo poco seguro que nos sentimos en nuestro propio sector. Esperamos que se tome un trabajo en serio y con todas las partes involucradas", explicó la dirigente vecinal.
En la misma línea, la presidenta del Consejo Vecinal de Desarrollo Alerce Norte, Ivette Manosalva, detalla que uno de los inconvenientes que presenta su sector es la falta de carabineros que realicen rondas por los barrios.
"Vivimos con mucho temor, falta dotación de carabineros, los que hoy no dan abasto para poder resguardar a la comunidad, sobre todo en un sector tan grande y con tanta población como la que tiene Alerce hoy en día y en donde además la delincuencia parece haberse apoderado de los barrios", describe.
Por su lado, Valeria Argel presidenta de la junta de vecinos de Pelluco, señala que su sector arrastra hace más de 10 años el tema de los disturbios nocturnos, fiestas y carreras clandestinas que no les permiten conciliar el sueño, afectando no solo su calidad de vida, sino también su estabilidad emocional.
"Con la pandemia y el toque de queda esto había parado un poco, pero ahora volvieron con todo. Comienzan a las 10 de la noche y hacen rugir hasta la madrugada sus motores. No podemos dormir, corren toda la noche, hacen fiestas sumado al peligro que implica para los vecinos, ya que conducen en contra del tránsito, fácilmente podrían atropellar a alguien", sostiene Argel.
La dirigente continúa relatando que se encuentran en proceso de recolección de firmas para solicitar la instalación de un retén de Carabineros en el sector para poder detener estas actividades y así recuperar la paz y tranquilidad de la comunidad. "Esta situación es insostenible, somos prisioneros en nuestros hogares, porque si algún vecino se acerca a estas personas para pedirles que se vayan, que dejen de hacer ruidos, te agreden. Son personas violentas bajo los efectos de las drogas y el alcohol", añade Argel, quien asegura que este conflicto no solo los afecta a ellos como sector, sino que es una realidad que atañe a otros barrios de la comuna.
Al respecto el prefecto de Carabineros, el coronel Fernando Fajardo se refirió a estos hechos denunciados por los vecinos de Pelluco, el pasado 17 de abril en el Diario El Llanquihue, donde expresó estar al tanto de la alteración de los residentes del barrio, debido al retorno de las carreras clandestinas, fiestas, peleas, balazos e ingesta de alcohol. "Este problema lo tomamos como propio y la idea es contar con un servicio preventivo para evitar que estas situaciones se sigan generando", manifestó Fajardo.
El prefecto reconoce que la demanda de los servicios en algunos fines de semana es altísima por lo que "no se puede abarcar el horario nocturno en ese sector, debido a la gran cantidad de solicitudes por procesiones, tránsito y rondas extraordinarias en otras poblaciones".
Organización vecinal
Otro de los barrios que se ha visto golpeado por la irrupción de hechos de violencia ha sido Valle Volcanes, donde el Comité de Seguridad de Valle Volcanes, Juan Carlos Contreras, indica que en el último tiempo el sector ha sufrido robos que antes no solían ocurrir.
En febrero de este año, tres sujetos armados irrumpieron en un hogar ubicado en el Santuario de La Laguna de Valle Volcanes, destrozando todo a su paso y amenazando a los dueños de casa, solicitando drogas, huyendo posteriormente en el auto que se encontraba en el inmueble.
Este asalto a esta familia fue frenado por unos vecinos que a través de un mensaje de WhatsApp se enteraron de lo que les estaba ocurriendo a sus vecinos.
"No estamos acostumbrados a esto, personas motorizadas, organizadas para robar y lo más grave es que creemos que esto puede ir incrementando y agravándose en el tiempo", apunta Contreras.
Es por esto que en este sector, los vecinos han organizado rondas nocturnas de vigilancia. "Los fines de semana hacíamos rondas en auto, desde las 12 de la noche hasta las 4 de la madrugada aproximadamente, para evitar los delitos que estaban ocurriendo en el barrio".
Autoridades
Esta problemática bien la conocen las autoridades, quienes ya han sostenido algunas reuniones con dirigentes de estos barrios para intentar encontrar una solución. La delegada presidencial Giovanna Moreira explica que este conflicto debe abordarse en comunidad junto a los vecinos que se ven afectados. "Creemos que las decisiones políticas que tomemos en materia de seguridad deben ser socializadas con los vecinos y vecinas, por lo que nos hemos reunidos y levantado planes de trabajo con algunos sectores de Puerto Montt como Alerce y Pelluco, con la finalidad de seguir sumando actores y territorios a este trabajo de seguridad pública regional".
En este sentido Moreira, agrega que es importante conocer la situación de boca de los vecinos y vecinas, para así poder crear en conjunto un plan de acción eficaz.
"Este trabajo con las organizaciones y juntas de vecinos, sumado a los diagnósticos y diligencias de las policías y los servicios públicos, nos permitirán actualizar el Plan Regional de Seguridad pública para que responda aún más a la necesidades de todas las familias de nuestra región y permita entregar seguridad y tranquilidad en los barrios".
Respecto a soluciones en el corto plazo, la delegada comenta que "este trabajo de construcción de políticas públicas regionales de seguridad pública y prevención del delito, vienen acompañadas de acciones inmediatas como controles, fiscalizaciones y otras