Estudio de dosis de refuerzo arroja sobre 87% de efectividad para evitar hospitalizaciones
COVID-19. Realizado en Chile, el análisis a 4,7 millones de inmunizados demostró alta efectividad de "tercera dosis" para prevenir contagio e internaciones.
Redacción
El primer estudio mundial sobre la efectividad de la dosis de refuerzo de la vacunación contra el covid-19, realizado en Chile fue dado a conocer ayer por el Ministerio de Salud (Minsal).
Según la investigación, encargada por la autoridad sanitaria, las tres vacunas usadas como tercera dosis muestran efectividad para prevenir el covid-19 sintomático y las hospitalizaciones, si se compara con las personas que no han sido inoculadas.
De esta manera, la efectividad para prevenir una posible hospitalización con la dosis de refuerzo de la vacuna CoronaVac, del laboratorio Sinovac, aumentó de 84% a 88%, mientras que con Pfizer se incrementó de 84% a 87% y con la fórmula de AstraZeneca se elevó de 84% a 96,3%.
Asimismo, las personas que recibieron una tercera dosis de Sinovac para prevenir la enfermedad, aumentaron su efectividad de 56% a 80%, y los inoculados con Pfizer pasaron de 56% de protección a 90%. En el caso de AstraZeneca, pasaron de 56% a 93%.
Estudio pionero
El estudio, considerado el primero en el mundo en reportar resultados en el uso de dosis de refuerzo, con distintas vacunas, en personas que tienen un esquema primario de inmunización contra covid-19 con virus inactivado, analizó a todos los afiliados al sistema de Fonasa, a los mayores de 16 años sin historial de infección y que hayan recibido CoronaVac como esquema primario de inmunización.
El estudio incluyó a 4.785.749 inmunizados con CoronaVac. De ellos, 2.017.878 recibieron una dosis de refuerzo. En el desglose, 1.506.154 recibieron AstraZeneca; 371.592, Pfizer-BioNTech, y 140.132 CoronaVac.
"no comparar"
La efectividad se calculó 14 días después de haber recibido la dosis de refuerzo y se compara con personas no inmunizadas, explicó el doctor Rafael Araos, asesor de la Subsecretaría de Salud Pública.
En esa misma línea, Araos explicó que no hay que comparar la efectividad de las vacunas entre sí, debido a que las "las poblaciones vacunadas son súper distintas. Sabemos que gran parte de la gente de AstraZeneca tenía cerca de 65 años, la población que se vacunó con Pfizer era significativamente más joven, alrededor de 48 años, y la media de la edad de las personas que recibieron Sinovac era cerca de 70 años".
El médico apuntó que es extremadamente dificultoso señalar que una vacuna es mejor que otra: "Lo que sí podemos saber es que las tres vacunas aumentaron de forma significativa su efectividad (...) las tres vacunas usadas como refuerzo lograron aumentar la efectividad contra la infección sintomática de covid-19 y la hospitalizaciones asociadas en forma significativa".
Finalmente, Araos sostuvo que los datos del estudio revelaron que "la decisión del uso de una dosis de refuerzo es correcta y acertada para la prevención de covid-19 en el país. Los resultados son robustos y sugieren que el efecto de la dosis de refuerzo, con cualquier vacuna, son altamente efectivos en prevenir covid-19 y hospitalizaciones".