Correo
Protección de los humedales
En el último tiempo hemos observado una serie de manifestaciones de los vecinos de diferentes barrios de Puerto Montt que han dado a conocer su inquietud por las diversas obras inmobiliarias que son necesarias, pero que estarían en conflicto con el medio ambiente y el resguardo de los recursos naturales, especialmente en lo que se refiere a los humedales.
Hemos visto los problemas que han dado a conocer los dirigentes del Comité de Trabajo Alto La Paloma, sector oriente, donde las obras inmobiliarias habrían afectado un humedal de esa zona, sumado a una serie de dificultades que por años llevan reclamando los residentes, por ejemplo, la falta de agua potable y un proyecto inconcluso hace más de una década.
Hay que poner atención a estas problemáticas sin soluciones, pero la idea es entregar propuestas acordes. Creo que es necesario que las empresas se preocupen del resguardo del entorno, entre habitantes y recursos naturales, por ejemplo, incluir en los proyectos a los humedales y convertirlos en un parque donde los vecinos puedan disfrutar de un lugar distinto en un barrio acorde a los tiempos.
En La Vara también los residentes han reclamado por la tala de especies nativas e incluso alerces, producto de las empresas de áridos que funcionan en esta zona y donde también se habrían visto afectados algunos humedales.
No sólo corresponde fiscalizar estas obras, sino que además procurar reglamentar de mejor forma el cuidado de estos puntos verdes que son muy necesarios para el equilibrio.
Rodrigo Wainraihgt Galilea
Juicio por lacrimógena
Leo en El Llanquihue que solicitan 5 años de cárcel para el carabinero que hirió a una joven con una lacrimógena, mientras la izquierda pide en pleno, incluida la Democracia Cristiana, que no es de centro, un indulto a los presos de la revuelta, usando una vez más los eufemismos típicos de los nuevos tiempos de nuestro país para un grupo de delincuentes, ladrones, revolucionarios pagados y el gran grupo de aprovechadores de todo tipo que siempre abundan en todo tipo de circunstancias extraordinarias.
Por todo lo que está ocurriendo ha revivido el libro "1984", de George Orwell, y la definen como "Novela Política de Ficción Distópica".
Creo que habría que ponerla simplemente como el futuro que adivinó Orwell.
Pablo Brahm Rosas
Errores de la Lista del Pueblo
En las elecciones previas a la Convención Constitucional se levanta una nueva bandera de lucha que toma un nombre particular: la Lista del Pueblo, que poco a poco se ha ido despoblando.
En medio de tantas complejidades, muchas personas proclamaban que no querían más políticos profesionales y que eran mejores, moral y gratuitamente, los nuevos profetas de nuestra sociedad, los candidatos de la Lista del Pueblo, que removieron a nuestra clase política.
Este profetismo, nuevamente, demostró que los compromisos y las voces sonantes de "salvación" y "cambio radical" son propios del populismo, demagogia y, en parte, fascismo. A la larga se quiere derogar las élites para llegar a ser los nuevos privilegiados del sistema.
La Lista del Pueblo quedó sin representantes en la Constituyente y se evidencian malas prácticas ya instaladas, sin embargo, ¿cuándo aprenderemos?
Juan Carlos Alvial
Candidatura de Ancalao
Diego Ancalao no podrá llegar a ser Presidente de Chile, pero aun así debiese estar contento, ya que ha pasado a asumir como rey (de los huevones) de este hermoso país, y quizás del mundo. Lo malo es que el reinado lo ha comenzado a ejercer de manera sinvergüenza, ya que ahora anda buscando entre sus súbditos a los que le hicieron esa fea maniobra.
Señor Ancalao, con el nuevo rango que ha obtenido, póngase bien los pantalones y diga "yo soy el responsable".
Pedro Olave
Plebiscitos dirimentes
La idea de realizar plebiscitos dirimentes sobre las materias en las que la Convención Constitucional no logre los quorum de los dos tercios es violar las reglas del juego a las que nos sometimos cuando votamos en el plebiscito de 2020. Son los convencionales los que están llamados a generar los acuerdos para alcanzar un texto que luego será sancionado por la ciudadanía en un plebiscito de salida.
Si no, ¿para qué hicimos una Convención Constitucional? Si los representantes de la izquierda, que son los que impulsan estas consultas temáticas, no son capaces de hacer su trabajo dentro del marco reglamentario -labor por la cual les pagamos con nuestros impuestos-, mejor que den un paso al costado.
Catalina Pérez Cruz