Secciones

(viene de la página anterior)

E-mail Compartir

¿Coinciden esos embalses con las zonas más afectadas?

-Así es, los niveles más críticos en los embalses están en las regiones más afectadas por la sequía.

-La sequía, ¿afecta igualmente a todo el país o tiene una incidencia distinta en las diversas regiones?

-En efecto. Prácticamente todo el país presenta déficit de precipitaciones superiores al 30%. Sin embargo, la región más afectada es la zona central y la zona centro-norte. Esto se debe a que, al ser zonas con precipitaciones relativamente bajas, son mucho más sensibles a las caídas en los niveles de las lluvias. Dicho de otra manera, perder 300 milímetros de precipitaciones no tiene el mismo efecto en Puerto Montt que en Talca. En esta última ciudad la situación sería mucho peor.

-¿Cuál considera que es, a grandes rasgos, el panorama hídrico para las zonas del país?

-A pesar de tener en la zona central más de una década de sequía, y de haber enfrentado años extraordinariamente secos como el 2019 y el 2021, las grandes ciudades de la zona central no han enfrentado racionamiento de agua. Ese es un dato que habla bien de la capacidad de adaptación del país. Sin embargo, la situación es mucho más grave en zonas rurales donde el estrés hídrico ha amenazado la disponibilidad de agua incluso para consumo humano.

-¿Cree que se han tomado medidas adecuadas?

-En zonas rurales se pudo y se debió hacer más.

-Hablando de medidas, ¿hay algo que hacer en cuanto a la gestión del recurso hídrico, más allá de la situación de la sequía?

-Siempre se puede mejorar la gestión de un recurso escaso. El sistema actual de entrega de derechos de agua sin límite de tiempo y con volúmenes fijos, presenta inflexibilidades no adecuadas a la intensa variabilidad interanual que el cambio climático exacerba.

-Se ha ocupado en países como China y alguna vez se propuso para Santiago la medida de la siembra o bombardeo de nubes. ¿Podría funcionar acá?

-No. Esa técnica no ha funcionado nunca.

-La sequía, ¿afecta, por igual, la agricultura y el consumo humano de agua?

-Cuando no hay agua todos sufren.

-¿Podría ocurrir que no estén tan lejanas medidas como el racionamiento de agua potable para ciertas zonas?

-Probablemente las zonas urbanas de nuestro país no sufrirán racionamiento. La situación es diferente para las ya 400.000 personas que habitan zonas rurales y que reciben agua en camiones aljibes.

-¿Qué puede decir de la situación de la nieve en Chile? Su disminución, ¿es grave?

-Es igual de grave que en el caso de las precipitaciones líquidas.

-¿Cómo es la relación entre nieve caída o acumulada y el agua disponible en las estaciones de más calor?

-La mayor parte del caudal de los ríos en la zona central, durante la primavera y el verano, es nieve y hielo que se acumuló durante el invierno. Por lo tanto, menos nieve en el invierno significa menos agua en los ríos en el verano.

-¿Cuál es el estado de los humedales y los glaciares?

-Es el mismo problema. Si no cae nieve, los glaciares no recuperan durante el invierno la masa que perdieron por derretimiento durante el verano. En todo caso, los glaciares en todo el mundo, no sólo en Chile, están retrocediendo.

-¿Podrá todo esto significar un cambio definitivo del clima de las zonas afectadas, especialmente la centro-sur del país, hacia algo mucho más seco como tendencia a largo plazo?

-Lamentablemente, así es.

-¿Hay zonas del país que se convertirán en zonas desérticas?

-Todo indica que sí: las zonas del centro-norte, especialmente.

-¿Y eso es algo lento o rápido?

-Para escalas de tiempo geológicas, el cambio climático es algo extraordinariamente rápido.

-¿Sería entonces recomendable criar camellos en Chile?

-Bueno. Hay fauna nativa adaptada a condiciones semiáridas. No es nunca bueno importar especies animales o vegetales exóticos.

-Todo esto, ¿tiene implicancias no sólo en los ecosistemas, sino también en el desarrollo social y económico?

-Evidentemente la escasez de agua está alimentando el conflicto social y político en la zona central.

-¿Y cree que la pandemia puede tener algún efecto (por ejemplo, por el aumento el consumo de agua con el lavado de manos)?

-No. El agua en Chile es mayoritariamente consumida por la agricultura, en más de un 70%. El consumo humano representa apenas el 8% de todo el consumo de agua. En lavado de manos tiene un impacto nulo.

-¿Cómo ve la situación para los próximos meses en el país?

-Las perspectivas no son buenas, pues se está desarrollando el fenómeno de la Niña, que se asocia a bajos precipitaciones en la zona central.

-Se han visto eventos catastróficos en cuanto a lluvias y calor en el hemisferio norte. ¿Podrían darse en Chile?

-Por supuesto, se trata de un problema global.

"Probablemente las zonas urbanas de nuestro país no sufrirán racionamiento (de agua potable). La situación es diferente para las ya 400.000 personas que habitan zonas rurales y que reciben agua en camiones aljibes".

Calentamiento global, el costo de no actuar

Ursula von der Leyen, presidenta de la CE, pide a los países hojas de ruta con planes concretos -como la tarifa al carbono- siguendo el "camino" europeo.
E-mail Compartir

La presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, animó a todos los países a que sigan el "camino" trazado por la Unión Europea (UE) y que presenten también una hoja de ruta "clara" sobre cómo alcanzar objetivos "ambiciosos" contra el cambio climático.

Con el Pacto Verde Europeo y su primera ley sobre el clima, Europa "muestra el camino" y ese es el "espíritu" con el que la UE participará este otoño en la conferencia de las Naciones Unidas sobre el clima, la COP-26, en la ciudad escocesa de Glasgow, adelantó Von der Leyen en una entrevista con la agencia de noticias Efe.

En esa línea, animó "a todos los demás países, la mayoría con objetivos ambiciosos ya definidos, a que presenten también una hoja de ruta clara sobre cómo alcanzarlos".

Afrontar la realidad

"Tenemos que afrontar la realidad. El costo de no actuar contra el calentamiento global está aumentando drásticamente en todas partes: fuertes lluvias e inundaciones en Bélgica y Alemania, temperaturas mortales en Canadá, fusión del permafrost en Siberia, sequía y agotamiento de pozos en España", advirtió Von der Leyen.

El mundo "ha despertado" a la "realidad" del cambio climático, afirmó la política alemana sobre el paquete legislativo, bautizado como "Objetivo 55", que presentó antes de las vacaciones de verano y que establece la hoja de ruta para que la UE reduzca sus emisiones de CO2 en 2030 al menos en 55% con respecto a 1990 para alcanzar la neutralidad climática en 2050.

Se trata de una docena de iniciativas legislativas con "objetivos climáticos ambiciosos" y acciones concretas en el transporte, la energía, el mercado de emisiones de carbono o la biodiversidad con las que Bruselas pretende convertir la crisis climática en una oportunidad para crecer de forma más sostenible, ya que para Von der Leyen "el mayor desafío de nuestra generación es, con diferencia, la lucha contra el cambio climático global".

"Con el Pacto Verde Europeo y las leyes que ahora se presentan, Europa es la primera región del planeta que muestra concretamente cómo y en qué fases pretende frenar el calentamiento global. Si cambiamos esta tendencia unidos, habremos marcado un hito histórico para todas las personas que desempeñan alguna responsabilidad política en Europa", destacó.

Las propuestas tienen que negociarse ahora con los Estados miembros, representados en el Consejo, y con el Parlamento Europeo, en debates que la política alemana espera con "interés" y apela a la "responsabilidad" de todos para actuar "sin demora".

Bruselas nunca ocultó que será una transición profunda y dura con grandes cambios estructurales en muy poco tiempo, pero Von der Leyen subrayó que se están "invirtiendo miles de millones en la creatividad y la capacidad de innovación de las empresas, lo que puede generar un millón de empleos verdes en la UE de aquí a 2030 y dos millones para 2050".

Tarificación del carbono

Para Von der Leyen la reducción de las emisiones pasa por "fijar un precio para el carbono" y "debe ser lo suficientemente elevado como para ofrecer incentivos a la inversión".

"La tarificación del carbono funciona", como demuestra -dijo- el régimen de comercio de derechos de emisión que "ha contribuido a reducir significativamente las emisiones en la industria pesada y en la generación de electricidad".

Con la misma filosofía, el establecimiento de un segundo régimen de comercio de derechos de emisión para el transporte por carretera y la construcción, que ahora están exentos, le parece a Von der Leyen "necesario para recompensar a las industrias europeas que invierten en soluciones innovadoras y limpias".

Los edificios son responsables del 40% del consumo energético de la UE y el transporte es el único sector en el que las emisiones han seguido creciendo desde 1990, según la presidenta de la CE, para quien "ya no podemos permitirnos" esas cifras.

Ahora bien, para que la transición sea "justa" y el transporte y la energía sigan siendo "asequibles para todos", Bruselas prevé que el Fondo Social para el Clima, dotado de 72.000 millones de euros, entre en vigor "un año antes" para ayudar a las personas de rentas más bajas a financiar el uso de tecnologías limpias.

En la dirección correcta

"La antigua economía, que considera aceptables las emisiones masivas de gases de efecto invernadero, ha alcanzado sus límites", explicó Von der Leyen, quien constató que "últimamente" se ha avanzado "mucho" a favor de la lucha contra el cambio climático, especialmente con el cambio de inquilino en la Casa Blanca: "Hace un año, todavía teníamos una administración estadounidense que apenas quería hacer nada en favor de la protección del clima, y ahora Estados Unidos vuelve a estar con nosotros".

Destacó, asimismo, que en los últimos meses "muchos países industrializados importantes se han comprometido a alcanzar la neutralidad climática y han fijado incluso las fechas concretas para este objetivo", al tiempo que "empresas de fama mundial han anunciado miles de millones en inversiones para que su producción y productos sean respetuosos con el clima".

"Son pasos en la dirección correcta, pero, por supuesto, debemos seguir insistiendo con determinación", concluyó.

las temperaturas han sido "mortales" en américa del norte, considera von der leyen.