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Tareas de los concejales
Con relación a varias cartas relativas a la función de los concejales municipales, con gusto aprecio que hay una constructiva discusión respecto de que éstos no sólo están para fiscalizar, con lo que estoy muy de acuerdo. Los concejales deben, además de fiscalizar, normar y reglamentar, presentar proyectos, promover iniciativas, fomentar inquietudes vecinales, ayudar a la solución de problemas y cualquier otra forma orientada al progreso de la comuna.
No cabe duda que esta última es una actividad importante y gravitante, pero queda la impresión que fiscalizar está como en segundo lugar. Creo que no es así, si entendemos que la acción de fiscalizar es una actividad que verifica que lo presupuestado se cumpla, que no haya desvíos de dinero hacia otros lados, que los contratos sean transparentes y bien estudiados y desde varios oferentes, etc.
Fiscalizar es mucho mas que una función de contralor. Es ocuparse que la gestión municipal y en particular la del alcalde, ofrezca certeza a la comunidad, que los recursos de todos nosotros están muy bien administrados y la corrupción definitivamente está erradicada.
Eduardo Mas Huber
Día de la Mujer I
En 1977 se instaura el 8 de marzo como día de los derechos de la mujer, espacio que desde entonces celebra los logros en igualdad, pero principalmente que visualiza las brechas para la construcción de una sociedad que garantice la participación política, civil, económica, social y cultural de niñas y mujeres. La pandemia ha implicado un retroceso de 10 años en igualdad económica y laboral de las mujeres. Las medidas sanitarias recrudecieron las cargas asociadas a la feminización de los cuidados domésticos y no remunerados, y aumentó el desempleo y empobrecimiento femenino, especialmente en mujeres en situación de pobreza y marginadas.
Por otro lado, a nivel mundial más del 70% de quienes se desempeñan en la salud y apoyo psicosocial son mujeres, convirtiéndolas en la primera línea del abordaje de la pandemia, aumentando su riesgo de contagio, pero no así su representatividad en la política pública.
El llamado para este año se centra en reconocer los liderazgos femeninos en la crisis sanitaria con miras a un futuro igualitario en la respuesta y recuperación social ante la pandemia; donde mujeres y niñas sean partícipes efectivas de las decisiones en todas las esferas de sus vidas, públicas o privadas, apuntando a la igualdad salarial, la distribución equitativa del cuidado y el fin de toda forma de violencia contra mujeres y niñas.
Diana Cornejo Díaz, académica de la Universidad de Las Américas
Día de la Mujer II
Este 8 de marzo celebramos el Día de la Mujer, fecha que nos invita a relevar sus distintos roles en la sociedad como es el caso de las mujeres emprendedoras. El año 2020 estuvo marcado por la pandemia y la disminución de la participación laboral femenina producto de la pérdida de empleos, donde organismos como la Cepal hablan de un retroceso de prácticamente 10 años para Latinoamérica.
Hoy uno de nuestros grandes desafíos es poder entregar oportunidades a aquellas mujeres que deciden emprender, ya sea porque son jefas de hogar, porque perdieron su trabajo o bien porque en tiempos difíciles se hace necesario un ingreso adicional al presupuesto familiar. En ese sentido, apoyar el emprendimiento femenino a través de herramientas como el microcrédito se convierte en un instrumento de apoyo concreto y real que genera oportunidades a quienes no acceden a la banca tradicional.
En Fundación Banigualdad, el 90% de las personas que apoyamos son mujeres que a diario nos demuestran su responsabilidad y compromiso, devolviendo en más de un 95% sus préstamos. Nuestra tarea es seguir creando oportunidades, especialmente a quienes ven al emprendimiento como su motor de desarrollo.
Héctor Feeley, gerente general de la Fundación Banigualdad
Uso de la violencia
Una idea generalizada que conspira en contra del combate al terrorismo es aquella de condenar la violencia "venga de donde venga"; es decir, una condena universal de la violencia, sin distinguir entre la que es ilegítima y la que es legítima.
Si al llegar a su casa usted viere a un sujeto que está agrediendo brutalmente a su esposa con la manifiesta intención de violarla: ¿trataría de disuadir al agresor con buenas palabras, llamaría por teléfono a Carabineros para denunciar el hecho o ejercería algún grado de violencia física en su contra?
El Estado tiene tiene la obligación de usar la violencia física legítima -de la cual tiene el monopolio- para reprimir la delincuencia, el terrorismo y la insurrección revolucionaria.
Esto a fin de garantizar el Estado de Derecho y lograr mediante ella la restitución del orden exigido por el bien común.
Adolfo Paúl Latorre