Correo
Suicidio de conductora
Ante la dolorosa situación por la que atraviesa la familia de la señora María Luisa Sandoval, quien debido a su estado de salud y por problemas relacionados con carabineros tomó la triste determinación de terminar con su vida, y leyendo, además, la carta aparecida en El Llanquihue el domingo pasado, firmada por su sobrino Andrés Sandoval, me permito felicitarle a él por la franqueza que hace en su defensa. Demostró las falencias que existen en los servicios policiales y judiciales, los cuales no siempre actúan con la debida imparcialidad.
A pesar de que guardo especial deferencia hacia Carabineros, no se puede negar que en una institución como esa, integrada por más de 60.000 personas, de repente aparezcan algunos funcionarios que desvirtúan su finalidad; pero lo más importante es que la propia institución es la que realiza el saneamiento, eliminando de sus filas a quienes no merecen pertenecer a ella. En el caso en comento, tal vez no se procedió con la debida deferencia hacia una persona con problemas de salud y que, además, era mujer, lo que muchas veces vemos que no se procede igual cuando se trata de una persona del sexo masculino.
Aldo Forno Bas
Agua para Calbuco
La respuesta al grito de ¡agua para la comuna! es desesperante, agua con sal, barrosa, turbia, de mal sabor, insuficiente e inexistente para una población rural que crece en todo sentido, sabiendo que la captación actual está en grave riesgo y en ocasiones ha producido diarreas colectivas. Finalmente todo continúa igual, puesto que la autoridad no posee capacidad de análisis técnico ni social, mientras los sectores rurales e islas sufren las consecuencias de no tomar decisiones que resuelvan el problema con proyección para 30 a más años de abastecimiento.
Mientras Calbuco tenga un alcalde que resuelve sólo con decisiones personales y equivocadas, el problema sin duda aumentará en el tiempo. Espero el cambio de autoridad donde al menos se pueda entregar información para resolver con antecedentes y medidas técnicas correctas, y no con promesas electoreras.
Francisco Cofré Silva
Homenaje a profesores
El jueves pasado, leyendo a nuestro Diario El Llanquihue, en la página de defunciones me encuentro con la triste noticia del fallecimiento de dos distinguidos profesores: Víctor Lemus Tapia y Miguel Villagrán Brule, ambos mis dilectos colegas y amigos.
La emoción llega con fuerzas, época de antaño, cuando Víctor Lemus era un apreciado profesor de la Escuela Industrial de Puerto Montt y en los talleres junto a sus alumnos le nacía la vocación de guiar las conductas deseables de los jóvenes estudiantes.
A Miguel Villagrán lo conocí en la ciudad de los rosales, en Puerto Varas, distinguido educador, como profesor normalista, quien junto con transmitir conocimientos y rectas conductas, era aficionado al deporte y un activo gremialista del Colegio de Profesores. Esos lejanos tiempos no volverán.
Víctor: tu escuela, hoy, está titulada de Liceo Industrial. La tecnología trajo cambios: computadores, celulares, TV, todo vía satélite.
El altruismo solidario y fraternal parece haber sido sustituido por el egoísmo individual, ya no verás al educador -fuera de horario- empeñado en la formación del hombre integral en sus alumnos.
Miguel: la Escuela Normal en que te formaste con el desarrollo de tu vocación como educador de niños y jóvenes en edad escolar, ya no existe. Fue suprimida en el período oscuro y convulsionado -duró 17 años- de la historia de Chile.
Estoy recordando una época anterior de paz republicana, en la cual el civismo buscaba el perfeccionamiento de la democracia para una adecuada convivencia fraternal; en cuyo escenario los profesores aportaban sus granitos de arena. A las familias de Víctor Lemus y Miguel Villagrán les expreso mi sentido pésame ante tan injusta noticia.
Evi Barría Cárdenas
Indultos y estallido social
Hace pocas semanas se comenzó a discutir en la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados la moción impulsada por parlamentarios de oposición que busca conceder un indulto general para quienes estén imputados por una serie de delitos cometidos desde el 7 de octubre de 2019, en el marco de las protestas a que dio lugar el estallido social.
La medida señalada se aplicaría para los imputados por los delitos de incendio -en sus diversas variantes-, homicidio frustrado, quema de estaciones de Metro, saqueos, alzamiento empleando la fuerza o la violencia, barricadas y atentados contra la autoridad, entre otros.
Pese a los diversos argumentos que desde un sector de la oposición buscan instalar para su defensa, no encuentra aún adhesión ni siquiera en su sector, ya que, en definitiva, se trata de una iniciativa que fomenta la violencia, la valida y peor aún, busca perdonarla.
Renata García D.