Tenglo e Ilque: las dos escuelas más antiguas de Puerto Montt
Además, durante este año, alumnos de ambos establecimientos ganaron el concurso "Guardianes del Patrimonio de Mi Comunidad Educativa" que organizó el Daem, lo que demuestra el buen trabajo que se está realizando en estos recintos educacionales ubicados en el sector rural.
Tradicionalmente se considera que en las ciudades todo empezó y eso se explica históricamente por el sistema colonial español cuando se forzó a la creación de 'pueblos' o fuertes donde agruparon a las familias que vivían mayoritariamente en los campos para así poder controlarlas y civilizarlas mejor. Por ello se asume en las ciudades que la Escuela N°1 o Escuela N°2 son las más antiguas, lo que es un error, al menos para la comuna de Puerto Montt.
Los registros de inscripciones de propiedades de Calbuco indican que desde el siglo XVIII los chilotes comenzaron a repoblar el Seno de Reloncaví después de la cruenta guerra de la Frontera de Arriba. Ellos extraían alerce con las que confeccionaban tablas de madera que intercambiaban por sus alimentos siendo uno de los primeros lugares que habitaron las islas Huar, Maillen y Tenglo.
La prueba más antigua del poblamiento de la isla Tenglo, mucho antes de la fundación de Puerto Montt en 1853, fue en el sector de 'La Capilla', donde funcionó una escuela dirigida por Manuel Salinas por lo menos desde 1845 de acuerdo al registro de Visitadores de Escuelas (actuales supervisores del Ministerio de Educación). Las listas de estudiantes la integraban numerosas familias chilotas como los Alvarado, Gallardo, Soto, Vera, Uribe, Ulloa, etc.
Como se trataba de una escuela parroquial, al igual que casi todas las escuelas que existían en esos años antes de que el Estado asumiera su responsabilidad en el siglo XX, era esencial contar con una capilla o iglesia donde realizar el culto, la que actuaba como eje de la actividad espiritual y social de cada comunidad, especialmente para la cultura Chilota en donde la Fe fue desarrollada por los Jesuitas en las llamadas Misiones Circulares desde 1608.
Según el padre Harter SJ "Maillen y Tenglo, islitas ambas más cercanas a Puerto Montt, estuvieron despobladas hasta fines del siglo XVIII, en que comenzaron a ser visitadas por el cura de Calbuco" ('Los Jesuitas en el Antiguo Reino de Chile y su Actividad Misional') y desde el retorno de los Jesuitas a la zona en 1859, hay registros de numerosas visitas de los sacerdotes de esa orden desde 1869 (Historia Domus Colegio San Francisco Javier).
La Capilla está dedicada a Nuestra Señora de Lourdes por lo que cada 11 de febrero se realiza una procesión y celebración masiva hasta hoy. "Según datos históricos, el padre Teodoro Schwerter SJ [fundador del Colegio San Francisco Javier], fue uno de los primeros misioneros jesuitas llegados a Puerto Montt, que misionó en la Isla Tenglo en 1859. En 1887, la Vice Parroquia de Puerto Montt compró un terreno a un lugareño para construir allí la primera parroquia de isla Tenglo, que fue inaugurada en marzo de 1888, bajo la advocación de Nuestra Señora de Lourdes" (Diario El Llanquihue, 11 de febrero de 1998).
La escuela pública del sector rural de Ilque, ubicada a aproximadamente 20 kilómetros al suroeste de Puerto Montt, es también la más antigua de la comuna gracias a la documentación aportada por su ex Directora Eliana Quijada Cárdenas quien encontró en el Archivo Nacional de Santiago informes del visitador de Escuelas de Ancud de 1845.
Además de la mayoritaria población chilota, en el sector de Ilque, hay numerosos corrales de pesca y conchales gigantescos que demuestran que hubo una presencia importante de pueblos canoeros desde hace más de 5.000 años. Solo hace poco más de 150 años llegaron a Ilque unos pocos colonos germanos los que se integraron y mezclaron con la población nativa sin dificultades.
La Escuela de Ilque así como su capilla, que también sería anterior a la fundación de Puerto Montt en 1853, se originó gracias a la evangelización de la Iglesia Católica de Ancud pero el 13 de junio de 1897 una solicitud hecha por más de 60 vecinos, todos identificándose con nombre y apellido y firma, solicitaron el apoyo del Estado para poder contratar a la profesora Teresa Trujillo, la que se desempeñaba de manera excelente de acuerdo a la misiva pero solo recibía una baja remuneración con los aportes de los mismos apoderados.
Finalmente, el 2 de enero de 1898, el Obispado de Ancud traspasa la tuición de la escuela al fisco. También hay un informe elaborado en Ancud el 10 de octubre de 1848 de un visitador de escuelas (actual Supervisor) que indican que en la Provincia de Chiloé, en el departamento de Calbuco se encuentra la escuela de Ilque la que está dirigida por el profesor Miguel Velásquez y que tenía una matrícula de 23 alumnos, todos hombres. Como referencia la escuela de Huelmo aparece con 25 alumnos.
Por todo lo anterior, no resulta extraño que en el concurso "Guardianes del Patrimonio de Mi Comunidad Educativa" del Daem obtuviera el 1er Lugar Esteban Colhuante Mañao de 2º básico (Escuela Tenglo), el 2° Lugar Constanza Epuyao Montiel de 6º básico (Escuela rural Ilque) y el 3er Lugar Gabriel Maragaño Milanca de 1º básico ( Escuela Tenglo) quienes elaboraron videos cortos donde divulgaron el Patrimonio Cultural y Natural de sus escuelas (material educativo disponible en el Facebook de la Unidad de Desarrollo Estudiantil del Daem de Puerto Montt) y que fue evaluada por una comisión presidida por el reconocido escritor regional Manuel Gallegos quien también donó libros autografiados para incentivar la lectura con Identidad Cultural entre los jóvenes.
La historia se va reconstruyendo permanentemente en la medida de que se van encontrando nuevas fuentes o se reinterpretan las disponibles. Las nuevas pruebas demuestran que tenemos una gran deuda con las escuelas rurales e insulares de nuestra comuna ya que generalmente no son lo suficientemente valoradas a pesar de que allí todo surgió, incluso mucho antes de que se fundara oficialmente Puerto Montt en 1853.