Prevención ante el covid-19
Mientras no exista una vacuna, es crucial mantener el distanciamiento social, el uso de mascarilla y el lavado frecuente de manos. La tensión que se está experimentando en la red asistencial de la región es una muestra de lo complejo que es el coronavirus.
Tras ocho meses de emergencia sanitaria, la pandemia sigue mostrando toda su complejidad, con una prolongada cuarentena en Puerto Montt y tensión en la red asistencial de la región por la alta demanda de pacientes. Los rebrotes que han surgido en algunos países europeos, en tanto, develan los riesgos que hay al no contar con una vacuna, por lo que el control de la pandemia requiere necesariamente que la ciudadanía acate las medidas preventivas que en forma reiterada se dan a conocer: distanciamiento social, lavado frecuente de manos y uso de mascarilla.
La alta movilidad de las personas que no hacen caso de los persistentes llamados de las autoridades sanitarias para evitar la propagación del virus, ha significado que las cifras de contagiados y de fallecidos sigan subiendo en algunas zonas, como en Los Lagos, de manera que en esos lugares donde la población comete las mayores infracciones, se aleja cada vez más la posibilidad de retomar cierta normalidad. Las personas que circulan en la calle sin mascarilla, que organizan fiestas en espacios cerrados en horarios de toque de queda o salen en comunas en cuarentena, pueden ser perseguidas penalmente según el artículo 318 del Código Penal, al poner en peligro la salud pública, lo que se aplica dentro de la excepción constitucional en que se encuentra el país desde el 18 de marzo del presente año, por el coronavirus.
Si bien no hay acuerdo sobre la forma cómo se aborda la situación de los infractores, lo cierto es que hay muchas personas que incumplen deliberadamente las medidas de protección que involucran una responsabilidad con uno mismo y también con la sociedad, porque si las acciones preventivas no se acatan se demora el avance hacia menores grados de confinamiento.
Es clave que las familias entiendan la necesidad de acatar las medidas de prevención y cuidado que se disponen, tanto dentro como fuera del hogar, porque de lo contrario, las posibilidades de volver a una relativa normalidad se alejarán cada vez más.