La semana de las equivocaciones
La situación por la que está pasando Puerto Montt requiere de liderazgos claros de parte del Gobierno y del municipio. Hay que tener mucho cuidado con la generación de expectativas en la ciudadanía. Ahora se necesita de mensajes claros y consistentes.
Tiempos complejos y llenos de incertidumbre como los que ha generado la pandemia alrededor de todo el mundo, exigen liderazgos claros, consistentes y coherentes en el tiempo. Los voluntarismos y frases de buena crianza de poco sirven cuando se trata de enfrentar la doble crisis que ha traído el covid-19 al país y la Región de Los Lagos: la sanitaria, que amenaza las vidas de las personas en la medida que la red asistencial no pueda absorber la demanda de pacientes; y la económica, que tiene en vilo a la actividad comercial de prácticamente todas las ciudades del país, en particular de aquellas que tienen al turismo como una de sus actividades principales.
Lamentablemente, Puerto Montt ha carecido esta semana de este tipo de liderazgos por culpa de un festival de visitas vacías y anuncios para la galería que más que generar certezas en una población que espera y necesita una dirección clara, están provocando una confusión que puede ser muy cara para enfrentar con éxito las dos crisis desatadas. La capital regional está sufriendo con la cuarentena de más de tres meses y su consiguiente paralización económica, y por la constante presencia de un virus que, hoy por hoy, está reduciendo la disponibilidad de camas críticas en la red asistencial de la región.
Por un lado, estuvieron en Puerto Montt las dos subsecretarias con mayor visibilidad este año, la de Prevención del Delito y la de Salud Pública, cuya presencia suponía una atención mayor del Gobierno hacia lo que está ocurriendo en la capital regional. No obstante, se trató de una visita casi informativa y de anuncios que perfectamente podría haber realizado la autoridad regional, como aquel de la formación de cuadrillas sanitarias. Y por el otro lado, el alcalde de Puerto Montt ha asegurado que abrirá el comercio de la ciudad, ignorando que en el país está vigente un Estado de Excepción Constitucional y que aquellas determinaciones le corresponden a la autoridad sanitaria, lo mismo que hizo hace unos meses cuando anunció que decretaría cuarentena en la ciudad.
No es la hora de anuncios vacuos, sino que de responsabilidad y trabajo colaborativo entre todas las autoridades.