Fidel Espinoza y municipio
Muy preocupante y graves las acusaciones del diputado Fidel Espinoza vertidas en la entrevista del Diario El LLanquihue del día pasado lunes, referentes a la gestión del alcalde de Puerto Montt (Gervoy Paredes).
En una de sus declaraciones manifiesta: "A diferencia de muchos de su círculo cercano, tengo las manos muy limpias". ¿Significa esto que los asesores del alcalde tienen las manos muy sucias por corrupción, soborno, cohecho, coimas o mordidas? No da mayores antecedentes.
Acto seguido expresa: "Hay una crisis de confianza muy grande en el municipio, donde trabajan familias enteras con sueldos gigantescos". No da mayores detalles, pero uno se imagina que serán muy superiores a su dieta y las asignaciones que él recibe como diputado, para que sean gigantescos.
Continua declarando que: "En ese municipio muchos tendrán que explicar cómo han logrado obtener todo lo que han logrado adquirir en ocho años". No da mayores detalles tampoco, pero pienso que serán parcelas alrededor del lago LLanquihue; o bien casas, departamentos en barrios exclusivos o autos de lujo etc. ¿Eso será?
Hay otra afirmación del diputado que es muy preocupante, cuando dice: "Hay muchos antecedentes que me hacen llegar desde el interior de la municipalidad y que tengo la obligación de recibir", dando a entender que él ¿acaso dispone de informantes o soplones que delatan a alguien y le informan de forma secreta acerca de algo? Si esto fuese así, sería grave por cuanto fue un método siniestro muy usado e institucionalizado durante la dictadura militar, de lo cual tengo tristes recuerdos.
Si todo la manifestado por el diputado del Partido Socialista es verdadero y tiene los antecedentes que lo respalden, sería bueno y sano que recurriera a los organismos fiscalizadores correspondientes. Y por otro lado, sería sano y bueno también que el alcalde salga a defenderse, ya que el silencio significa aprobación.
Alfredo Raddatz S.
En defensa de MEO
Respondiendo a la carta enviada por Luis Enrique Soler denominada "MEO en la Casa Rosada" (publicada en la edición del pasado martes de El Llanquihue), el lector deja en manifiesto su total desconocimiento sobre el trabajo que realiza el ex candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami. Además de se consultor internacional, docente universitario en programas de postgrado, impulsor de la Fundación Progresa y líder del Partido Progresista de Chile, hace un año aproximadamente propició el origen del Grupo de Puebla junto a diversos referentes latinoamericanos, entre ellos el Presidente de la Argentina, Alberto Fernández.
Aquí no sólo los une un proyecto de desarrollo progresista, de social prosperidad, sino además una fraterna amistad. Decir que Marco Enríquez estaría cumpliendo su sueño dorado en la Casa Rosada, al asesorar al Presidente, es un escribir con mala fe.
Marco Enríquez-Ominami ha dejado en evidencia que sus tres campañas presidenciales seguidas son una respuesta de convicción por querer cambiar Chile. No sólo con una nueva Constitución reclamada en su primera campaña en 2009 o con mejorar las pensiones en jubilados propuesto el 2013, o con liberar a Chile de los abusos el 2017. Hoy más que nunca se refuerza la idea en que no se trata de vivir mejor, sino de vivir mejor juntos.
Gonzalo Valenzuela
Apertura de los mall
Hoy se abren los mall de Puerto Montt. Hoy se pone a prueba la cordura de los puertomontinos.
Pedro Ramírez
Ausencia del Estado
El estallido social y la pandemia han dejado graves consecuencias. Pero no todos enfrentaremos esta tormenta en las mismas condiciones.
Una minoría somos muy afortunados, porque tenemos casa propia, comodidades y podemos adquirir en cualquier momento lo que necesitamos para vivir y algo más. Otros, la mayoría, están sufriendo más de la cuenta, sin casi lo mínimo para alimentar a sus familias, sin casa propia, sin poder pagar sus cuentas básicas.
Algunos de estos seres humanos cuentan con sólo una precaria ayuda del padre de todos nosotros. Este es el Estado chileno, el que con cuentagotas apoya a una parte de sus hijos. Sin embargo, a la gran mayoría simplemente los ha dejado sin nada de apoyo y a la deriva.
Este mal padre no recuerda que es lo que es gracias a sus hijos, los cuales, con su esfuerzo y aporte, lo han hecho ser lo que es hoy. Desde los más humildes han hecho su aporte a través del IVA, la mayor fuente de ingresos de este padre, hoy semi ausente.
Ruego porque este "padre Estado" recapacite, y pronto. El tiempo y paciencia se le está acabando a los hijos que ha dejado desamparados, amenazando seriamente con hacer zozobrar este barco llamado Chile, que ya venía muy averiado después de los sucesos de octubre pasado.
Daniel Zapata Z.