Uber y Didi en Puerto Montt
Por circunstancias de la vida me quedé sin movilización propia por varios días. Debí, por lo tanto, recurrir a a la empresa Uber por todas las bondades que había escuchado respecto de su funcionamiento. Sin embargo, la primera vez que quise usar este servicio, sin haberlo ocupado nunca antes, tenía una deuda de $ 1.136.
Traté, por diversos conductos, de solucionar este problema; pero nadie lo logró. Finalmente, me informé que Uber tenía una oficina y a ella recurrí. El funcionario que me atendió se asombró por esta situación y estuvo haciendo varias movidas a través de mi teléfono y me indicó que ya estaba solucionado el problema, y que en un par de horas estaría operativo el sistema.
Sin embargo, pasaron dos, cuatro y un par de días y la cosa sigue igual. Mientras tanto, logré que una personas entendida ingresara a mi teléfono la aplicación Didi, que es similar a Uber; pero más barata, y con ella me estuve defendiendo; pero con varios problemas.
Estando en calle Guillermo Gallardo, a la altura de la iglesia de los jesuitas, pedí un taxi. Me contestaron que estaban buscando un conductor, el que prontamente apareció y me comunicó que venía en camino. Después de esperar varios minutos, ese conductor me comunicó que por algún motivo no podría cumplir con el viaje, por lo tanto, llamé nuevamente y se presentó otro conductor que al igual que el primero no pudo cumplir con mi pedido.
Finalmente, al tercer llamado apareció un conductor que me transportó. Claro que esto significó más de media hora de espera.
Al día siguiente, estando con mi señora a la altura del supermercado O'Higgins, al comienzo de calle Varas, llamé un taxi por tres veces. Los dos primeros se desistieron y el tercero indicó que venía en camino y que lo esperara.
Ahí estuvimos por más de media hora hasta que anulé el llamado y ocupé un taxi del paradero que hay en ese lugar. A raíz de lo sucedido, se me ocurre que los conductores de Didi, cuando el viaje es relativamente corto, simplemente no concurren al pedido.
Si así fuera, considero una falta de formalidad de esos conductores y que la empresa a la cual sirven debiera tomar cartas en el asunto.
Aldo Forno Bas
Apruebo y Rechazo
Frente al improbable triunfo del Apruebo el 26 de abril, próximo, me comprometo firmemente a apoyar el proceso constituyente, desde la elección de la comisión que la redactará hasta participar objetivamente en el plebiscito "de salida".
Me gustaría mucho oír lo mismo del sector del Apruebo para cuando gane la opción Rechazo y haya que apoyar la vuelta a la normalidad y buscar los cambios legislativos y constitucionales razonables, a través de los mismos mecanismos que establece nuestra Constitución vigente.
En ambos escenarios se necesitará una fuerte vocación democrática y de sentido común. Espero que los chilenos estemos a la altura.
Andrés Fuentes Belmar
"Guerrilla urbana"
Lo que queda del estallido social es una mera guerrilla urbana. Como toda guerrilla, puede golpear por sorpresa en algunos puntos, pero su efecto es cada vez menor a medida que caen sus integrantes.
Lástima que en Chile nuestras leyes, entiéndase nuestros legisladores, y nuestros jueces (ambos) son incapaces de mantener presos por unos días siquiera a los violentos. Carabineros ha ido mejorando y ya se han visto las primeras líneas de detenidos unidos por sus muñecas.
No será necesario insistir en que los promotores de la violencia la condenen, no lo harán y poco importa: el fracaso de la violencia, así como el fracaso de los que la estimulan, se está haciendo evidente.
José Luis Hernández
Mujeres dirigentes vecinales
Saludamos a todas las mujeres dirigentas vecinales en este 8 de marzo, Dia Internacional de la Mujer, ocasión en que se recuerdan los acontecimientos heroicos de la lucha de la mujer trabajadora por hacer respetar sus derechos y ser reconocidas como personas con dignidad que tienen derechos políticos, civiles y sociales.
En cada población y localidad rural hay mujeres que trabajan por su comunidad en las diferentes facetas de la actividad humana, y es así como su rol en las juntas de vecinos es determinante para que esta organización tenga dinámica, capacidad propositiva y realice sus gestiones sociales.
En la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Puerto Montt las mujeres son mayoría entre el más de medio millar de dirigentes que representan a más de 100 organizaciones vecinales, tanto en la ciudad de Puerto Montt, así como en Alerce y el sector rural.
Un fraternal abrazo en este día y todos los días.
Hernán Navarro, presidente de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Puerto Montt