EE.UU. prepara sus instalaciones militares para casos sospechosos de coronavirus
EMERGENCIA. Unas 1.000 personas podrían ser aisladas.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Mark Esper, aprobó ayer una solicitud del Departamento de Salud (HHS) para el posible uso de instalaciones militares para acomodar a 1.000 personas que podrían ser puestas en cuarentena, tras la llegada del coronavirus al país.
El Gobierno solicitó al Pentágono el uso de varias instalaciones capaces de alojar al menos 250 personas en habitaciones individuales hasta el 29 de febrero. El HHS será responsable de los cuidados, el transporte y la seguridad de los evacuados.
Las instalaciones seleccionadas por Defensa son el 168º Regimiento, Instituto Regional de Capacitación, Fort Carson, Colorado; Base de la Fuerza Aérea Travis, California; Base de la Fuerza Aérea Lackland, Texas; y Marine Corps Air Station Miramar, California.
Al cierre de esta edición, casi 200 estadounidenses ya estaban en cuarentena en una base militar en el sur de California, después de ser evacuados y trasladados desde Wuhan, la capital de la provincia de Hubei.
Esta política se une a la orden del Presidente Donald Trump que prohíbe temporalmente la entrada a ciudadanos extranjeros que hayan viajado a China en los últimos 14 días, con la excepción de las familias inmediatas de ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes.
Los estadounidenses que regresen de China podrán ingresar al país, pero se enfrentarán a exámenes de detección en puertos de entrada seleccionados y deberán realizar 14 días de autoexamen para asegurarse de que no representen un riesgo para la salud. Los que regresen de la provincia de Hubei, el centro del brote, estarán sujetos a hasta 14 días de cuarentena.
Ayer por la tarde, el coronavirus aún no llegaba a Latinoamérica, pero Brasil reportaba 16 sospechosos, a quienes mantenía en observación. En tanto, el Gobierno chino daba cuenta de 259 muertos a nivel mundial, y 12.031 contagiados.