Gobierno afirma que no quedan migrantes venezolanos en Chacalluta ni en Colchane
INMIGRANTES. El Ejecutivo envió a los inmigrantes a obtener visas a los consulados de Tacna, en Perú, y La Paz, en Bolivia, donde se les está entregando ayuda humanitaria y alojamiento. Además, negaron que la situación sea una crisis.
Hasta los consulados de Chile en Tacna y La Paz han sido trasladados, respectivamente, los cientos de venezolanos que buscaban ingresar a Chile a través de los pasos fronterizos de Chacalluta (frontera con Perú) y Pisiga (frontera con Bolivia).
El viernes, se llevó a los migrantes en buses desde Chacalluta hasta la ciudad peruana, mientras que ayer se hizo lo propio con quienes estaban en el paso cercano a Colchane, para que realicen en Tacna y La Paz los trámites respectivos.
Colapso
El importante número de venezolanos que se había congregado en ambos sectores para entrar a Chile y la negativa de las autoridades de nuestro país a dejarlos ingresar, pues no habían tramitado aún su visa respectiva en los consulados chilenos, como se exige desde hace más de una semana, había provocado un colapso en los pasos fronterizos.
En ellos, según denunció el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), muchos estuvieron horas sin comer, sin abrigo suficiente y sin medicinas en el caso de quienes presentaban problemas de salud.
En la semana, incluso, el INDH planteó que el Estado chileno estaba violando los derechos humanos de los migrantes y expuso que era particularmente grave que hubiera niños durmiendo a la intemperie y varios de ellos muy enfermos.
El viernes, la Comisión de Gobierno Interior de la Cámara de Diputados anunció que citará al jefe del Departamento de Migración del Ministerio del Interior, para que explique la situación ocurrida, informó la diputada Joanna Pérez (DC).
Normalización
Ayer, el Gobierno chileno expuso que la situación en los pasos fronterizos estaba normalizada. Bellolio, aseguró que "tanto en Chacalluta como en Colchane, hoy (ayer) en la mañana, no hay ningún venezolano indocumentado sin su trámite esperando en el paso, sino que están haciendo la evaluación y la postulación a su visa en los consulados respectivos".
Sobre los ciudadanos venezolanos, Bellolio explicó que "todas estas personas tenían estatus de residentes, ya sea en Perú o en Bolivia, países que no los persiguen políticamente ni violan sus derechos humanos, y estas medidas justamente apuntan a ordenar la migración y garantizar el respeto a los derechos de los migrantes. A través de sus visas y tener documentación vigente, se facilita su inserción en el país".
El asesor en política migratoria del Ministerio del Interior, Mijail Bonito, dijo que en los consulados chilenos se está entregando ayuda humanitaria y alojamiento para los venezolanos. Además, comentó que hay organizaciones de la sociedad civil brindándoles apoyo.
Niegan crisis
Consultado sobre si ya está solucionada la crisis en los pasos fronterizos, Mijail Bonito respondió que "esto nunca tuvo visos de una crisis migratoria. Una crisis migratoria habla de miles de personas. Lo que tuvimos fue un exceso de presión sobre las fronteras".
"Si bien algunas personas tenían temas humanitarios importantes, otras no, y trataban de aprovecharse un poco de lo que estaba pasando", agregó el asesor gubernamental.
A propósito de que ya son alrededor de 400 los venezolanos que han ingresado al país en la última semana (ver recuadro), la mayoría con visa de responsabilidad democrática, el abogado nacido en Cuba y hoy asesor del Ministerio del Interior manifestó: "Uno no puede declarar que se solucionó el tema migratorio con respecto a los venezolanos porque Nicolás Maduro continúa en el poder".
Unos 400 ya han ingresado a Chile
Luego de que Perú comenzara a exigir visa consular a los venezolanos que deseen ingresar a ese país como turistas, el Gobierno de Chile dispuso lo mismo para los venezolanos que quieran entrar al nuestro. Según la Subsecretaría del Interior, cerca de 400 personas pudieron ingresar al país con esta nueva condición. La mayoría de ellos llegaron a Arica, para trasladarse posteriormente hasta Santiago.