Nadie se salva de la revisión

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Con la intercepción de algunos productos como fruta fresca, sándwich de jamón y queso, frutos secos sin envase ni rotulación, finalizó la inspección del SAG a pasajeros del Royal Princess, la lujosa nave de turismo que ayer recaló en la bahía de Puerto Montt, la más grande en su tipo que ha llegado a este control fronterizo marítimo