Erwin Schnaidt Ávila
Durante esta semana, deberá resolverse el plan definitivo para proceder a la descarga de 100 toneladas de salmones muertos desde las bodegas del wellboat "Seikongen", que desde el pasado 15 de agosto permanece fondeado en la bahía de Puerto Montt.
Sin embargo, esa decisión está condicionada a la resolución de "puntos críticos", según estableció la seremi de Salud, Scarlett Molt, y que debe cumplir la propietaria, CPT Empresas Marítimas.
"No ha sido un plan único, que se presenta, se revisa y se devuelve. La semana pasada recibimos la última versión, sobre el que tenemos algunas observaciones", especificó.
Entre ellas, mencionó la forma cómo se realizará la descarga, así como que el personal que participe, disponga de elementos de protección; que los camiones cuenten con resolución sanitaria, para asegurar que no haya filtraciones; que la empresa que los reciba, tenga la capacidad de tratamiento; si esa tarea tardará horas o días; y conocer cuál va a ser su disposición final, entre otros.
La seremi Molt definió que desean verificar que cada paso esté controlado, porque "no queremos encontrarnos con sorpresas, en la medida que vayamos avanzando".
Con todo, la seremi de Salud estimó que "estamos en la etapa final. Esta semana debería estar terminado. Lo más complejo se solucionó. Ahora son un par de detalles", reconoció, con los que buscan asegurar que el procedimiento no generará impactos en el medio ambiente, ni riesgos en la salud de las personas.
Sobre el lugar de la descarga y dónde se haría la disposición final, Molt dijo que no ha sido definido.
Desde la empresa informaron que recibieron los resultados del laboratorio que analizó las muestras al contenido del buque, las que "ratifican que no presenta condiciones de material peligroso, ni tampoco trazas de hidrocarburos".
Anunciaron que en las próximas horas harán tareas de mantención a bordo de la nave "a la espera de la aprobación del plan de extracción, presentado a las autoridades".
Inyectan nitrógeno
En cuanto al mantenimiento de los residuos, que permanecen en esa bodega desde el 18 de octubre de 2017, cuando se hundió el navío frente a la playa Pilpilehue, en Chonchi, Chiloé, la seremi Molt afirmó que se trata "de compuestos líquidos, más que de materia orgánica sólida".
Para mantener esos niveles y que no sigan aumentando, han inyectado nitrógeno que permite "mantener una concentración que para nosotros es segura".
Eso se hace habitualmente, comentó el teniente Víctor Herrera, oficial de Relaciones Públicas de la Gobernación Marítima de Puerto Montt. "Forma parte de las distintas pruebas y muestras que hacemos a diario, junto con la estanqueidad y estabilidad , calidad del agua y seguridad", puntualizó.
Sobre el plan que presentó la empresa, reveló que "estamos en el proceso aprobatorio, tal como lo están haciendo las distintas autoridades sectoriales, que lo revisan en forma independiente".
El oficial aseguró que luego de su traslado, el pasado 29 de agosto, desde el punto "H" (punta Cementerio, isla Tenglo), "el buque no se ha movido desde el sector Chincui. Permanece resguardado por una patrullera de la Armada, con sus dos remolcadores. El lugar no presenta riesgos para la navegación, ni obstrucción para la pesca artesanal", estableció.
Respecto de un video que circula en redes sociales, en la que se observa la apertura de compuertas, la seremi de Salud enfatizó que ese material "no debe ser real", ya que las maniobras realizadas "son en escotillas muy pequeñas, bajo presión controlada", por lo que reiteró que "la apertura de bodegaje no es real".