Hernán Osses S.
La ciudad la construimos todos. Ese es el eslogan de la aplicación "Línea Ciudadana", la que pretende transforman a los gobiernos comunales en una verdaderas "Smart City".
La aplicación fue creada en España, donde está presente en más de 40 ayuntamientos, y arribó primero a Perú. Ahora, la empresa responsable la está promocionando entre los municipios chilenos y entre los primeros están los de la Región de Los Lagos.
Rodrigo Larraín, representante de la compañía, aclara que la aplicación no pretende transformar a las urbes en ciudades digitales, sino que es permitir una interacción efectiva entre la ciudadanía y sus gobiernos locales. La aplicación permite, a la vez, dar respuesta a las inquietudes de los vecinos y, por esa vía, mejorarla calidad de vida de las personas.
Para ello, las personas pueden descargar en forma gratuita la aplicación en sus teléfonos celulares. A través de ella, las personas pueden reportar "incidencias", que ocurren en la ciudad, como problemas con la recolección de basura o con la iluminación pública.
Larraín explica que esta información es transmitida a los encargados de cara área del gobierno comunal, los que pueden entregar directamente una respuesta a los ciudadanos.
"Esta aplicación recoge lo que está sucediendo en la ciudad", recalca.
Larraín explica que con la información, los gobiernos comunales pueden ir midiendo las externalidades que tienen.
Larraín da un ejemplo. "A lo mejor tiene una externalidad relacionada con el tema de las basuras. Las personas pasan por ahí, encuentran un basurero roto, y toman una foto. La mandan un comentario, la que es enviada por la aplicación a la municipalidad de manera de hacer más eficiente la gestión", explica.
La aplicación también puede ser utilizada en los más diversos ámbitos en que tengan injerencias los municipios, como seguridad ciudadana, iluminación pública y turismo, entre muchas otras. "La idea es que el ciudadano se contacte con la Municipalidad. La aplicación ayuda a la gobernanza y hace más interactiva la relación entre los ciudadanos y el municipio", explica Larraín.
"La idea es hacer ciudades más inteligentes", recalca.
Las ventajas de esta aplicación para los vecinos es que permite responder a sus necesidades. Los vecinos pueden interactuar directamente con los municipios. Además, estas inquietudes son medidas a través de indicadores. Ello permite que los vecinos participan en la construcción de las ciudades en que habitan.