Concejales comparten idea de revisar la concesión del Terminal de Buses
ANOMALÍAS. A la deuda por multas y que no opere el hotel, los ediles sumaron cobros irregulares, fallas en seguridad y en el horario de los estacionamientos.
Deudas impagas correspondientes a multas por más de 284 millones de pesos y que el edificio del hotel siga sin ser utilizado, forman parte de la argumentación que está manejando la Municipalidad de Puerto Montt, para poner término anticipado al contrato con Inmobiliaria del Pacífico S.A. (IPSA), que administra y explota la concesión por 47 años del Terminal de Buses.
A la advertencia que en ese aspecto hizo el alcalde Gervoy Paredes, se sumaron concejales como Pedro Sandoval, quien estimó que debido a que no está operando el hotel, la corporación edilicia dejó de percibir más de $ 354 millones entre el 1 de abril de 2015 y el pasado 20 de junio. Esto, considera la ocupación de sus 127 habitaciones, a un costo de $25 mil diarios.
El presidente de la Comisión Infraestructura del Concejo explicó que por contrato el municipio recibe un 25 % de las utilidades de las nuevas unidades de negocios, como el hotel.
A ello suma que se deben cobrar multas por robos y problemas de seguridad en el terminal; responsabilidad que debe asumir el concesionario, según el contrato vigente.
Se suman concejales
Mientras que otros ediles también han denunciado situaciones anómalas por parte de la empresa.
Fernando España dijo que hay un cobro desmedido de arriendo de locales, que en algunos casos aumentó hasta en un 100 %, así como el de consumo de agua en locales donde no hay acceso al recurso y, para hacerlo, los locatarios deben acudir al baño público y pagar la tarifa de ingreso.
Mientras que María Elena Barría afirmó que los estacionamientos para vehículos particulares cierran a las 22 horas, lo que debería ocurrir a la medianoche.
Ante el Concejo, expuso que "quienes van a buscar a pasajeros, deben estacionar y esperar afuera (del terminal). Los pasajeros deben salir por el portón de los buses. Y, como el alumbrado no es el mejor, exponemos a todos los pasajeros a un eventual asalto", afirmó.
Barría se mostró partidaria de poner fin a la concesión, ya que "si no se está cumpliendo con los requerimientos y acuerdos firmados, es lo justo dar término a esa relación".
Su colega Eduardo Matamala llevó a la sala de Concejo la queja de choferes de minibuses intercomunales, que no pudieron hacer uso de los calzos de estacionamiento del terminal, producto del bloqueo de las carreteras durante la crisis de la Marea Roja.
"Ellos no pudieron ingresar al terminal durante esos 16 días de tomas, pero la concesionaria igual les cobró el derecho a losa por ese período. Esto es aberrante e incongruente, porque no puedes pagar por algo que no ocupaste", acusó.
Frente a estos hechos planteados por los concejales, Matamala dijo compartir la idea de poner fin a la concesión, pero amparada en un estudio acabado de la situación.
Coincidió con el alcalde Paredes, en cuanto a que se debe desviar personal municipal para esas labores. Comentó al respecto que "las plantas municipales no están diseñadas para eso, por lo menos en nuestro municipio. Hay que estudiarlo minuciosamente, desde todos los puntos de vista".
A pesar de ello, dijo ser partidario que "alguna vez el municipio 'tome el toro por las astas' y dijera esto se acaba y lo administramos nosotros".