Marcelo Galindo

La violencia parece haberse apoderado del entorno del Mall Paseo Costanera de Puerto Montt.

Una seguidilla de incidentes graves ha marcado las últimas 48 horas en los accesos al centro comercial, con dos menores apuñalados -uno el lunes, sin detenidos- y otro adolescente detenido previamente por portar un cuchillo (el sábado). En una cruda paradoja, el último joven acuchillado, un adolescente de 16 años atacado ayer por la tarde, es el mismo que fue formalizado por apuñalar a un cliente dentro del mismo recinto el pasado 8 de abril, y quien acumula más de 20 detenciones.

El último ataque se registró ayer, cerca de las 17:00 horas, en la intersección de calle Illapel con la Costanera Diego Portales.

El hecho ocurrió justo cuando el cuartel móvil de Carabineros, que durante la semana había estado resguardando esta zona como punto fijo, se había dirigido a atender una emergencia en un jardín infantil.

El adolescente de 16 años, ya conocido por su historial, fue atendido en la vía pública por voluntarios de la Unidad de Rescate de la Cuarta Compañía de Bomberos. Ellos lograron controlar el sangrado de la herida cortopunzante que presentaba en su pierna derecha. El suceso, observado por numerosas personas que circulaban por la zona exterior del centro comercial, se tornó aún más tenso. Los jóvenes que acompañaban al menor herido se mostraron exaltados, llegando a hurtar el celular a un reportero de Radio Bío-Bío, mientras que otro periodista estuvo a punto de ser agredido.

Historial

La situación del menor herido es compleja. Además de la agresión que protagonizó el 8 de abril, registra más de 20 detenciones por diferentes ilícitos. Es más, sólo en la semana comprendida entre el 8 y 14 de abril, compareció ante el Juzgado de Garantía de Puerto Montt en tres oportunidades. En todas ellas, quedó en libertad con medidas cautelares de baja intensidad y sin la intervención del Servicio Nacional de Reinserción Social Juvenil (ex Sename), la entidad encargada de los jóvenes infractores de ley.

¿Medida de protección?

El adolescente lesionado se encuentra actualmente bajo una medida de protección emanada del Juzgado de Familia, residiendo en un centro del Servicio de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia. Pedro Adrians, director regional de este servicio, criticó duramente la situación ayer. Señaló que este caso, como otros, evidencia cómo el sistema penal no está abordando adecuadamente a los adolescentes con problemas delictuales, dejando una carga que los servicios de protección no pueden manejar.

"Nuevamente nos encontramos frente a un escenario donde el sistema penal no abarca situaciones que, como Servicio de Protección Especializada, no podemos contener", afirmó Adrians.

Explicó que su servicio está enfocado en la protección y reparación de derechos vulnerados, y sus residencias son hogares, no centros de reclusión. "No obstante, en ocasiones los mismos niños pueden presentar conductas delictuales, siendo estos casos excepcionales", añadió.

"Cuando se da este último escenario, necesitamos que el sistema penal adolescente opere y brinde medidas no solo para penalizar, sino también para resguardarlos y trabajar en su reinserción social, lo que lamentablemente no ocurre como esperamos", lamentó la autoridad.

Adrians fue enfático al señalar las limitaciones de su servicio: "Trabajamos por ley solo desde la protección de derechos y no tenemos competencias en el ámbito penal".

Por ello, concluyó que "es imposible contener conductas que pueden y deben ser atendidas en los recintos penales dispuestos para ello, una vez que la justicia penal opere y disponga las medidas necesarias con la finalidad de que estos hechos no se sigan repitiendo".

Carabineros de la Segunda Comisaría, en rápidos procedimientos, lograron la detención de dos adolescentes de 15 y 17 años, ambos imputados por el incidente ocurrido en la vía pública, en el que otro menor, de 16 años, resultó herido con una puñalada en la pierna derecha.

Las primeras diligencias de Carabineros permitieron establecer que la presunta autora de las lesiones sería la joven de 17 años, quien registra 12 detenciones anteriores por diferentes delitos.

El adolescente de 15 años, también detenido por Carabineros, fue imputado por el delito de amenazas y registra 14 detenciones previas.

Una providencial salvada tuvo durante la mañana de este martes la dotación de una barcaza que se hundió a cerca de 3 kilómetros al sureste del puerto de Queilen. Los nueve ocupantes de la máquina lograron salir por sus medios tras el siniestro, contando con el rápido apoyo de otra nave.

La emergencia se produjo alrededor de las 7 horas, a la altura de punta Chomio, donde la nave Maximiliano Andrés sufrió un accidente que gatilló que rápidamente tocara fondo, con más de mil 200 litros de combustible a bordo.

Así lo detalló el gobernador marítimo de Castro, Ricardo Cárcamo, explicando que "la embarcación navegaba sin carga hacia Castro, sufriendo la escora (inclinación lateral) que produjo su hundimiento. Las nueve personas que estaban en su interior abordaron el bote auxiliar y fueron apoyadas por la lancha Don Francisco que estaba en las cercanías".

Igualmente, el jefe de la Guarnición Naval Chiloé detalló que gracias al oportuno llamado del patrón de la nave siniestrada como la comunicación permanente con el navío que materializó el rescate de los tripulantes, "se logró coordinar el operativo por parte de la Alcaldía de Mar de Queilen", aclaró.

Los afectados fueron remitidos al muelle local y, tal como confirmó el jefe de la unidad naval queilina, el suboficial José Lillo, "fueron trasladado al hospital queilino para constatar lesiones", donde se comprobó que resultaron ilesos.

A su vez, el oficial Cárcamo manifestó que se ordenó el zarpe de una unidad de emergencia desde el puerto de Castro con material de apoyo a la contaminación, más un biólogo marino y personal de buzos navales para tomar muestras.

"Se están desarrollando todas las diligencias para establecer las causas del hundimiento y si existen responsabilidad en el accidente", aclaró el capitán de navío, sumando que el despliegue igual incluyó la exploración del sector para determinar si existían trazas de combustible en la zona.

Junto con consignar que la empresa Servomar, a la cual pertenece la barcaza siniestrada, desarrolla maniobras con elementos destinados a evitar una afectación en el ecosistema acuático, el gobernador marítimo precisó que durante la tarde de ayer se realizó un sobrevuelo por el sector.

A este análisis aéreo se sumó el trabajo con un dron submarino. "Mañana (hoy) con bajamar buzos profesionales realizarán un rastreo para sellar la descarga del combustible y así evitar cualquier tipo de contaminación", puntualizó.

Cárcamo añadió que la Maximiliano Andrés prestaba apoyo a centros de cultivo, resaltando que hasta el cierre de la edición no se había dispuesto de barreras absorbentes, "puesto que el buque no ha dispersado el combustible que tenía a bordo, solamente existe presencia de líquidos oleosos que generan los flexibles y elementos de cubierta, pero que no son atribuibles a petróleo", aclaró.

Finalmente, desde la empresa Servomar informaron que están trabajando en la zona, pero declinaron referirse al siniestro que está siendo indagado por la Armada.