ONU: son "desgarradoras" las escenas de reparto de comida en Gaza por parte de EE.UU.
GUERRA. Multitud atravesó las vallas y fundación GHF debió dejar de distribuir.
El secretario general de la ONU, António Guterres, calificó ayer de "desgarradoras" las imágenes del reparto de comida que emprendió en Gaza por su propia iniciativa la Fundación Humanitaria para Gaza (GHF), creada por Estados Unidos sin el acuerdo de Naciones Unidas.
En nombre de la secretaría general, su vocero Stéphane Dujarric, dijo que esas imágenes son "desgarradoras, por decir poco", y volvió a insistir en que la ONU "no está involucrada" en esa operación.
Aunque no entró en detalles, el vocero se refirió a las imágenes de cientos de personas que saltaron las vallas e irrumpieron sin control en una de las zonas de distribución de ayuda gestionadas por la fundación.
La fundación aseguró en un comunicado que "en un momento de la tarde, el volumen de gente en el punto de distribución era tal que el equipo de GHF tuvo que retirarse para permitir a un pequeño número de gazatíes tomar la ayuda con seguridad y disiparse".
Dujarric insistió en que la ONU "no tiene confirmación independiente de lo que pasó en esos puntos de distribución, puesto que no estamos allí", y, por tanto solo puede basarse en lo que ha visto en "videos" que han circulado, pero explicó la razón de su incomodidad.
"Para nosotros, la ayuda humanitaria debe distribuirse de un modo que sea seguro bajo los principios de independencia e imparcialidad, en la forma que siempre hemos hecho", algo que según él no reúne la iniciativa de esta fundación creada por EE.UU. en acuerdo con Israel.
"Vimos el plan que tenían, lo que publicaron y lo que nos presentaron, y no se ha hecho con los parámetros que cumplen nuestros principios y que se aplican desde Gaza hasta Sudán o Birmania", remachó.
La fundación estadounidense ha sido criticada desde el primer momento por la ONU porque opera en lugares donde ni siquiera se ha declarado un alto el fuego, porque funciona según las exigencias del ejército israelí y porque deja a muchas mujeres y niños fuera, entre otras muchas razones.
GHF denunció ayer que Hamás estuvo bloqueando el acceso a los puntos de entrega, lo que provocó retrasos en la distribución. Sin embargo, Hamás negó estas acusaciones, declarándose "consternado" por ellas y tildándolas de "invención total".
Israel: hay 400 camiones
Por su parte, el Ejército de Israel admitió que "lanzó disparos de advertencia en la zona fuera del complejo" para dispersar a las multitudes, y negó los rumores difundidos a lo largo de la tarde, según los cuales las tropas abrieron fuego desde helicópteros contra la población.
Más tarde, el organismo militar de Israel que coordina los asuntos civiles en los territorios ocupados (Cogat) aseguró que unos 400 camiones con ayuda humanitaria esperaban en el paso fronterizo de Kerem Shalom para que las agencias de la ONU recojan su contenido.
"Los contenidos, mayoritariamente comida, se han acumulado en los últimos días y esperan a ser recogidos y distribuidos por los equipos de la ONU, que aún no han llegado, recoger y distribuir la ayuda a los civiles de Gaza en la última semana", señaló el comunicado difundido por el Cogat.
Mientras las autoridades israelíes apuntan a la ONU, sus voceros denuncian, desde que se reanudó el limitado flujo de ayuda en Gaza, que su acceso a ella y distribución se ve restringido por condicionantes como tener que atravesar zonas inseguras por los combates, el riesgo de saqueo o los retrasos por la coordinación requerida con el Ejército.