La estafa silenciosa que afecta a las familias que luchan por la casa propia
Los dirigentes de algunos comités de vivienda realizan diversos cobros ilegales a los postulantes, tales como cuota de ingreso, para la postulación a subsidios, entre otros beneficios que el Estado otorga de forma gratuita. Los afectados temen denunciar o hablar por represalias, mientras el Serviu llama a evidenciar formalmente estas malas prácticas.
Tener una casa propia está dentro de las metas de vida de la gran mayoría de las personas que, para lograrlo, realizan múltiples esfuerzos por años. Por lo mismo, resulta indignante que existan personas que se denominan "dirigentes sociales" dedicados a transformar esta legítima aspiración en un negocio donde los únicos beneficiados son ellos.
Estas personas operan realizando cobros ligados a comités de viviendas con el pretexto de realizar trámites ante el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), cuotas altas que pueden llegar al millón de pesos, cobran dinero para agilizar el acceso y la obtención de subsidios que entrega en Estado, entre otras acciones que son ilegales y un claro aprovechamiento de los anhelos de las familias más vulnerables.
Una estafa silenciosa que afecta a quienes luchan por cumplir con el sueño de la casa propia y también a los cientos de dirigentes que con mucho esfuerzo trabajan por las familias de sus comités de forma honrada y sin enriquecimiento monetario.
En la región se han realizado múltiples denuncias de este tipo, donde familias que llevan años intentando tener su vivienda se han encontrado con comités donde sus dirigentes realizan estas malas prácticas. El problema es que al momento de formalizar estas denuncias, la personas afectadas tienen temor, porque son amedrentadas y amenazadas por los mismos dirigentes o su entorno cercano.
Los argumentos utilizados apuntan a quedar fuera de cualquier comité de vivienda, perder la opción de acceder al beneficio habitacional entregado por el Estado e incluso hostigamiento por redes sociales y llamadas telefónicas.
Estas irregularidades han sido descubiertas en otras comunas del país, donde incluso los dirigentes fueron denunciados por el Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu) ante la justicia, lo que ha servido para disminuir este tipo de malas prácticas, pero no erradicarlas del todo.
A través del relato de afectados, quienes optaron por resguardar su identidad, así como dirigentes que trabajan de forma correcta y legal, podemos acercarnos a la forma de operar de estos comités que pasan a ser verdaderas "sectas", donde incluso sus dirigentes hacen constante alusión a Dios.
Un secreto a voces
Patricia, quien pidió resguardar su apellido, relata que hace más de una década comenzó su lucha por tener una casa propia y lamentablemente en el camino se cruzó al menos dos veces con comités que se diluyeron en el tiempo.
"Nuestra anhelo era tener la casa propia en Chiloé, pero no son muchas las opciones que se generan, dado que es tan disperso, entonces básicamente piensan en Castro o Ancud. Bueno, al primer comité llegué por una amiga y en esos años cobraban una especie de matrícula o cuota de incorporación, que no te da derecho a nada, sólo a estar en sus listados. Y la verdad uno puede desconfiar, pero cuando escucha hablar a los dirigentes quedas convencido que es tu oportunidad y terminó en nada, así como la devolución de la plata. No denunciamos, porque si lo haces quedas como fichada de 'sapa'", expresa la asesora del hogar.
Relata que la segunda vez se sumó a uno de los comités que maneja una conocida dirigenta en la región, donde tuvo que pagar por incorporarse: le cobraron cuotas por reunión, cuotas para gestiones de la dirigenta en Santiago, entre otros.
"Al final me salí, pero es un secreto a voces que esta señora tiene un excelente negocio, al igual que otros que realizan estas malas prácticas. Y entiendo por qué no denuncian: porque en realidad son los mismos que están con ellas los que la defienden, aun sabiendo que los estafan", dijo.
Efectivamente, uno de los principales problemas es el temor que tienen las personas para realizar las denuncias formales contra estas personas, debido a que operan como verdaderas "sectas" donde los involucrados optan por defenderlas, aun sabiendo que son víctimas de una estafa.
Esto, debido a que hay familias que logran acceder a los subsidios habitacionales, cumpliendo el sueño de la casa propia, pero pagando montos de
"En el Serviu nadie se salta la fila y no se cobra por postular, por lo que quien ofrezca una posibilidad irregular de acceder más rápido a un subsidio o beneficio, pagando cierta cantidad de dinero, está engañando a la persona que requiere apoyo del Estado"
Isabel de la Vega, directora regional del Serviu