Inclusión financiera
Estrategia presentada por el Gobierno pretende aumentar el acceso a estos servicios por parte de la población.
Hace unos días el Gobierno presentó la Estrategia Nacional de Inclusión Financiera, iniciativa que tiene por objetivo realizar una serie de acciones transversales y en conjunto por parte de diversos organismos estatales para el bienestar financiero de las personas. Con 44 medidas definidas para desarrollar, las metas corresponden a aumentar la confianza de la población en el sistema financiero, robustecer la infraestructura financiera, incrementar el acceso y uso de productos y servicios financieros, y por último, avanzar hacia un sistema financiero más inclusivo a través de productos y servicios que se ajusten a las necesidades de la población.
Para su elaboración se utilizó como base un diagnóstico que indica que Chile presenta niveles favorables de acceso a productos financieros, sobre todo en los relacionados a productos de administración de efectivo, como la CuentaRUT, pero por otra parte existen oportunidades para mejorar el acceso, uso y calidad de la oferta asociada, además de los medios de pago, ahorro, financiamiento y los seguros.
De hecho, el mismo estudio indica que las personas de menores ingresos presentan bajo bienestar financiero, ya que tienen un limitado acceso a crédito y seguros, además de dificultad para cubrir gastos imprevistos. Por otra parte, las mujeres enfrentan menor acumulación de ahorro, así como también una baja participación en inversiones y menor cobertura en seguros.
En un país en que la sociedad está aumentando la proporción de personas de la tercera edad, este grupo etario registra restricciones de financiamiento y altas tasas de deuda impaga, junto con bajos niveles de educación financiera y digital. En el ámbito de los negocios, también se detectó que las microempresas enfrentan brechas en alfabetización financiera, digitalización y formalización, y de acceso al crédito.
Mientras más temprano se apoye y oriente en torno al mundo financiero, es mejor para el futuro ciudadano que deberá tomar decisiones, además de enfrentar los derechos y responsabilidades que conlleva este ámbito. Una mejor formación puede ayudar a ejercer de manera más eficiente y menos riesgosa las finanzas en el área de los negocios, pero también las familiares y personales.