Correo
Poesía calbucana
Nada más refrescante que recibir un libro de poesía, creación literaria de un grupo de jóvenes calbucanos, inquietos por expresarse y decir presente, como voces emergentes que estaban silenciosas en el mundanal ruido citadino. Y señala su portada el inicio de un trabajo que tiene más aliento y que espera extender sus alas y redes más allá de una producción solitaria.
Porque la portada es muy reveladora y dice, tras su título, que "Desamparo y Desacato" es un cuadernillo desde el barro a lo nauseabundo, volumen uno noviembre 2024; y en la contraportada son aún más explícitos al anunciar " la junta desamparo y desacato nace en Calbuco-Chile, se lleva a cabo a partir de la inquietud y necesidad de un grupo de amigos por expresar a través de la escritura los pensamientos y sentimientos inherentes al ser humano. Esta iniciativa autogestionada y sin fines de lucro busca crear un espacio abierto para todas aquellas personas que deseen compartir lo que escribe".
Leer los textos en formato poesía es lúdico, de encuentros y reencuentros de lo mágico que vive en el alma humana de sus autores. Al final del libro, como aún queriendo permanecer tras la bruma sureña de la tarde, sólo registran sus nombres Sebastián, Felipe A., Eduardo, Felipe P. y Violeta.
Les deseo lo mejor, jóvenes calbucanos, en la vorágine existencial, a veces acelerada y sin destino. Nuestro pueblo merece más oxígeno para transitar bajo las alamedas de tibio sol o desbordadas lluvias de un paisaje único llamado Calbuco.
Eduardo Nievas Muñoz
Paraderos de Puerto Montt
Días pasados se reparó el paradero de la locomoción colectiva en el sector de la calle Ejército, destruido por comensales okupas que pernoctaron en el lugar. Ahora bien, ¿por qué llegar a esto si las autoridades de propia iniciativa pueden hacerlo? Lo digo porque un lector del diario tuvo que informar al respecto.
Varios transitan por el citado lugar. Si arreglan uno deben arreglar todos, retirando a los que mal habitan los mismos, limpiando, sanitizando. Nombraré algunos lugares: el exterior del consultorio Angelmó, donde incluso tienen un colchón y un carro de supermercado que impide el libre tránsito peatonal; les encargo el aroma. Otro lugar se ubica en el Terminal de Buses, al costado del Hotel Ibis, que se supone es un lugar para que las personas se mantengan la espera en el uso de locomoción colectiva, pero como todos sabemos, y varios hacen la vista gorda, personas en situación de calle las vemos día y noche pernoctar con cartones, durmiendo en colchonetas abrazados a perros, haciendo un mal uso del espacio público que corresponde a todos.
Otro sector que no es paradero, es al interior del Museo Juan Pablo II, en su parte posterior, donde existe una persona que ya provocó un daño en su parte inferior de la reja para acceder al recinto y habitar en el lugar. De lo anterior mi persona lo ha dado a conocer en la Oficina de Turismo, Seguridad Pública y no ha habido ninguna acción para desalojar, absolutamente nada.
Al parecer los ciudadanos de bien perdimos autoridad y el derecho a ocupar los citados lugares (paraderos) y estamos a la orden de la indigencia, que hace mucho tiempo se apropió de estos.
Alberto Gallegos
Compra de casa de Allende I
Interesante, por decir lo menos, sería ver y escuchar comentarios y condenas de personeros de Gobierno y políticos de izquierda, si el Ejército o Armada mencionaran interés en adquirir las casas del general Pinochet o almirante Merino, a fin de convertirlas en museo.
Eduardo Mas Huber
Compra de casa de Allende II
Ante la fallida compra de un inmueble, debo sugerir a las nuevas generaciones que valoren muchos a abuelos, padres y tíos que hacen el asado, ya que ni el carbón saben prender.
Juan de Dios Videla
Compra de casa de Allende III
Definitivamente estamos a años luz del espíritu de las últimas palabras de Salvador Allende Gossens pronunciadas hace 51 años; y lo que es peor, hasta sus parientes más cercanos lo están.
Es impresentable. Casi como en un flash forward, al inicio de su último discurso espetó: "Mis palabras no tienen angustia, sino decepción". Sin dudas ahora lo estaría aún más.
Gastón Ojeda A.
Compra de casa de Allende IV
La fallida compra de la casa de Allende es amateurismo puro.
Esteban Meza
Ley Antiterrorista
En medio de la tramitación de la Ley Antiterrorista, es llamativo el flanco que ha dejado la discusión en el oficialismo por el claro descontento del PC y el FA, que decidieron llevar la norma al Tribunal Constitucional, ese organismo que llevan décadas criticando.
Sin embargo, lo más cuestionable de todo es que se busque el entorpecimiento de la discusión del proyecto en medio de alzas significativas en los índices de violencia, como lo refleja el Índice Global de Terrorismo, que para 2023 situó a Chile en el puesto 17 del mundo, siendo el segundo país de Latinoamérica con los mayores números, sólo por debajo de Colombia.
Desde sus cómodas sillas en la capital, con sus sueldos y viáticos, no sorprende que los diputados desconozcan la gravedad del terrorismo que lleva más de una década asolando el sur de Chile, sin intentos por menguar. Si realmente las necesidades de "el pueblo" son sus urgencias, entonces sabrán que su deber es proteger a los ciudadanos, y no a los terroristas.
Tomás Ojeda Aravena