Marcelo Galindo

A un país del continente asiático era exportado el producto "loco" robado en las áreas de manejo en Maullín. Incluso, el recurso era vendido en una cadena de supermercados, de acuerdo a la indagatoria llevada adelante por Sacfi de la Fiscalía, con un equipo multisectorial compuesto por la PDI, la Armada y Sernapesca.

De acuerdo a los antecedentes entregados por fuentes ligadas a la investigación, el producto era procesado hace más de dos años en una empresa ficticia que funcionaba en Maullín.

Varias veces a esta misma organización se le incautaron locos en diversos operativos, pero seguían funcionando y procesando el recursos marino en la planta clandestina en Maullín.

La banda tenía un importante patrimonio, porque no sólo operaban con una planta clandestina en Maullín, sino que también tenían plantas en Puerto Montt y Calbuco, y generalmente las labores de envasado y otros se ejecutaban en horario nocturno.

Una de las empresas falsas que operaba en Maullín, ya había sido clausurada a mediados del año pasado, sin embargo, volvieron a realizar sus operaciones en el mismo domicilio.

Durante el operativo llamado "La ruta del loco" se detuvieron a 14 personas, y tres de ellas quedaron en prisión preventiva por mantener antecedentes por este mismo delito y ser reiterativos.

Empresa ilegal

La fábrica clandestina envasaba los locos y los vendía a un bajo valor en comparación a las empresas oficiales, incluso desde la empresa ilegal se vendían frascos de locos a supermercados y Taiwan.

"La empresa, como sociedad de fachada, tenía la posibilidad de poder enviar recursos marinos al extranjero, actualmente es materia de investigación, ya que existen indicios que algunos de los productos podrían haber sido enviado al exterior", sostuvo el subprefecto Sergio Castro, jefe de la Brigada Investigadora de robos (Biro).

Respecto del modo de operar, el subprefecto Castro observó que los productos sustraídos eran derivados a "bodegas clandestinas y otras que eran de empresas que tenían legalidad y formalidad en el rubro".

A juicio del jefe de la Biro "estas (empresas) eran implementadas para poder procesar el producto marino, el acopio y comercialización en varios puntos de la región y en Santiago".

Sobre los empleados que se desempeñaban en el proceso del producto, explicó que "las personas que trabajaban eran integrantes de la organización", pero además habían trabajadores de las plantas.

Lucrativa

La fiscal regional, Carmen Gloria Wittwer, reconoció que esta actividad ilegal es lucrativa, y por ello se llevan adelante estas investigaciones.

"Hay una estructura criminal con muchos recursos, esta es una actividad ilícita muy lucrativa, así como lo es el robo de salmones y tráfico de drogas", observó.

Comentó Wittwer que hay varios ilícitos, entre ellos "sustracción, almacenamiento y procesamiento y se suma el lavado de activos. Una de las formas de atacar a las organizaciones criminales es a su patrimonio", reconoció.

"panga"

El capitán Dinson Baack, gobernador marítimo de Puerto Montt, explicó que el principal medio que se utiliza para el robo en las áreas de manejo es la embarcación llamada "panga". Anotó que ubicar este medio de prueba llevó varios meses (la investigación se extendió por 2 años).

"La ubicación de estas naves fue complejo, porque se mantienen en zonas alejadas y fondeadas en el Río Pudeto (Ancud) y en sectores rurales de islas lejanas (en Chiloé)".

De acuerdo al oficial de la Armada, esta "investigación nace de las denuncias de los sindicatos de Maullín y de Chiloé, los que tienen las concesiones de las áreas de manejo".

El subprefecto Sergio Castro, jefe de la Biro, destacó que se logró establecer la estructura completa respecto de las personas que operaban en el mar, equipos de extracción del recurso marino, a los "financistas, empresas que eran utilizadas como sociedad de fachada y los receptores finales en la Región Metropolitana", adujo el oficial de la Policía de Investigaciones.

100 detectives se desplegaron entre Ancud, Maullín y Puerto Montt el lunes pasado.

14 son las personas detenidas en el operativo llamado "La ruta del loco". Tras quedaron presos.

Para Zoila Bustamante, presidenta regional de la Conapach (Confederación Nacional de Pescadores Artesanales de Chile) en la actualidad existe una ley bentónica que declara estos hechos como robo "y (por ello) hay que tomar cartas en el asunto y espero que se acate la ley y no tengamos nosotros que estar sufriendo las consecuencias, porque cuando estas personas quedan libres las consecuencias las sufrimos nosotros los que vivimos en el borde costero y que trabajamos las áreas de manejo". La dirigenta recordó que los pescadores tiene una ley "que se dictó hace poco tiempo, y (está) la ley de pesca que declara esto como robo en las áreas de manejo".