Diego Gálvez

La realidad no cumplió con las expectativas. Dirigentes relacionados con el comercio y el turismo a lo largo de la región adelantaron los resultados de ocupación hotelera, los que han estado por debajo de las expectativas planteadas en un comienzo.

"Pésimo", "muy bajo", "no es lo óptimo" y "regular" fueron los conceptos que se repiten por parte de los presidentes del comercio y el turismo de las principales ciudades de Los Lagos. Así calificaron el comportamiento de visitantes durante la presente temporada estival en sus respectivas zonas.

Todos los directivos coincidieron en que enero fue un mes bajo en ocupación y que en febrero se vio un aumento en la presencia de visitantes, pero que aun así no se logró equiparar a las cifras históricas de los años previos a la pandemia. Además, señalaron que el turista nacional gastó menos dinero en comparación al verano anterior, a excepción de Osorno.

La capital regional

El presidente de la Cámara de Comercio de Puerto Montt, Patricio Ampuero, destacó que el mundo del turismo tenía una gran expectativa de esta temporada estival, sin embargo, afirmó que estas no se cumplieron.

"Tuvimos un enero pésimo, con muy pocas ocupaciones de camas en la región", expuso Ampuero. Agregó que en febrero sí se notó un aumento de visitantes, sobre todo a nivel nacional. No obstante, fue "un verano bastante deslucido con respecto a las cifras que todo el mundo esperaba".

Adicionalmente, respecto a Puerto Montt como atractivo turístico, el dirigente mencionó que existen diversas falencias que debilitan la imagen de la ciudad. "Calle Varas, un sector comercial en donde las obras no se han terminado, (...) una catedral que después de cuatro años sigue tapada con latas, rayada por todos lados y edificios que aún tienen vidrios quebrados".