Por el valor que tiene como instrumento para medir la evolución de la situación económica de los hogares en el mediano y largo plazo, la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (Casen) es uno de los instrumentos mayormente valorados, dada la profundidad de los datos que recoleta en el territorio nacional. La última Casen, correspondiente al año 2022 y que se tomó entre el 1 de noviembre del año pasado y el 2 de febrero de 2023, arrojó a nivel nacional una relativa disminución de la pobreza por ingresos y de la pobreza multidimensional, que algunos interpretaron como un éxito de las políticas públicas de este gobierno, otros como el resabio de las ayudas estatales que se entregaron durante la administración anterior, y otros como una mezcla de ambas.

Los Lagos exhibió resultados que van en la misma línea de lo que sucedió en el país. La pobreza por ingresos, que mide aquella que identifica a los hogares que no cuentan con ingresos suficientes para satisfacer el consumo básico de bienes alimentarios y alimentarios, alcanzó al 7%, lo que representó una reducción significativa con la de los años 2017 y 2020, que llegó al 11,6 y 11,5%, respectivamente. De la vereda de la pobreza multidimensional, que refleja las condiciones de vida de los hogares más allá de la disponibilidad de ingresos, en tanto, la conclusión es algo más inquietante, pues esta región, aunque anotó un 19,7%, lejos del 24,6% del año 2017, se ubicó en los últimos lugares del país, superando sólo a Tarapacá, Atacama y La Araucanía.

En la foto que va midiendo año tras año, Los Lagos logró disminuir ambas dimensiones de la pobreza, pero debe llamar la atención que a pesar de ser una de las regiones que tradicionalmente registra bajos índices de desempleo, se sitúe entre aquellas que van a la zaga en el país. Para explicar esto, se sostiene que en el nivel de sueldos se observa cierto estancamiento, de hecho, mientras el promedio nacional es de $680 mil mensuales, acá es de $550 mil.

Este indicador es el que claramente hay que mejorar. Para ello, resulta crucial mejorar los niveles de capacitación laboral, retomar la senda del crecimiento para que haya más oportunidades de empleo y, por cierto, garantizar una gestión eficiente en los recursos estatales, algo que hoy por hoy está en discusión.

Antiguamente se castigaba severamente a las niñas y niños de manera física, tanto en los colegios como en los hogares, y esto era socialmente aceptado. Con el tiempo, hemos comprendido que el castigo físico tiene consecuencias en la salud física y emocional. Aun así, la violencia infantil se sigue dando en todos los países del mundo en distintas formas e intensidad, justificada en aspectos culturales, sociales y económicos. Lamentablemente, la experiencia infantil de muchas niñas y niños revela que aún estamos muy lejos de respetarlos.

Cuando utilizamos el castigo, los gritos o la manipulación, estamos ejerciendo una autoridad sustentada en el dominio. Esto nos deja como adultos en una situación de poder y a las niñas y niños en posición de debilidad y subordinación.

Esto puede traer consecuencias que se traducen en baja autoestima, inseguridad y rebeldía en etapas posteriores del desarrollo evolutivo.

Cuando los adultos maltratan a niñas y niños, la causa no está en el comportamiento de los menores. Quizás la raíz de ese actuar tiene que ver con que estos adultos también fueron víctimas de violencia y abuso en el pasado. La mala o buena gestión emocional se ha ido transmitiendo de generación en generación, y si los cuidadores no toman conciencia y empiezan a hacer algo distinto, este ciclo de violencia seguirá afectando a las siguientes generaciones. Será la manera en que se establecen los vínculos y se resuelven los problemas.

El principal motivo por el cual no nos es posible darles voz a las niñas y niños, es porque en nuestra infancia tuvimos muy poca o ninguna voz y, por lo mismo, no tenemos un registro emocional de haber sido escuchados, respetados y amados como necesitábamos serlo.

Es importante considerar que si una niña o niño no quiere o no puede hacer lo que le pedimos, quizás el problema está en lo que le estamos solicitando o en la forma de hacerlo. En vez de gritarle o castigarlo, reflexionemos sobre lo que está sucediendo.

Somos los responsables del cambio que queremos ver en ellos. Preguntémonos: "si lo que acabo de decir o hacer a mi hija o hijo, me lo hicieran a mí, ¿cómo me sentiría?". Esto nos ayudaría a ser más comprensivos y empáticos en nuestras interacciones con las niñas y niños.

80 años | 2 de agosto de 1943

Esperan propuestas para nuevos caminos

Hemos sido informados que la oficina de Caminos de Puerto Montt, en el transcurso de los primeros días del mes de agosto, procederá a realizar el llamado de propuestas públicas para la construcción de los caminos: Puerto Montt a Chinquío; Casma a Río López y Frutillar a Casma. Tales obras son importantes para mejorar la salida de productos al puerto y los mercados.

50 años | 2 de agosto de 1973

Lanzas asaltan a mujer a la salida del banco

Una mujer de 45 años, viuda y madre de ocho hijos, fue víctima de un lanzazo afuera del Banco del Estado de Puerto Montt. Al lugar la víctima había ido a retirar su pensión, luego que falleciera el año pasado su cónyuge en Aysén. Los delincuentes huyeron por Guillermo Gallardo y se les perdió la pista. La víctima relató que necesitaba el dinero para comprarle ropa a sus hijos.

10 años | 2 de agosto de 2013

Turba saquea casas expropiadas en Ibáñez

Unas 200 personas saquearon lo que quedaba de las propiedades expropiadas en la avenida Presidente Ibáñez, en la población Antonio Varas, lugar donde se ejecutan las obras de la rotonda y paso sobre nivel que enlazará con la Ruta Alerce. Según testigos, la turba llegó hasta con herramientas para llevarse fierros y los medidores del agua de los inmuebles.