Resguardo de los humedales
Es creciente la preocupación en el país para adoptar medidas de conservación de estos espacios ricos en biodiversidad. La ciudadanía puertomontina ha tenido un rol activo en la protección de los humedales, vitales para la mantención del medio ambiente.
La semana pasada se celebró el Día Mundial de los Humedales, fecha en que se recuerda la firma del Convenio sobre los Humedales en Ramsar, Irán, el 2 de febrero de 1971. Este convenio fue el primer tratado en el planeta relativo a la conservación y uso racional de los humedales, aspecto en el que Puerto Montt ha tenido un rol crucial en el país, dada la gran cantidad de sitios de este tipo que tiene, y la organización ciudadana que pugna por su cuidado. Cada vez está tomando más fuerza el debate sobre la necesidad de proteger estos espacios y la inconveniencia de autorizar planes de construcción de viviendas en lugares en que se pongan en riesgo esos ecosistemas.
El Ministerio de Medio Ambiente definió hace unos años un total de 40 áreas prioritarias en las que se aplica el plan de protección de humedales. La decisión se fundamentó en que esos ecosistemas tienen un gran valor medioambiental, por lo cual deben quedar protegidos.
La secretaría de Estado estimó en esa oportunidad que la medida permitiría proteger más de 250 hectáreas en el país, y luego esas áreas podrían transformarse en santuarios de la naturaleza, parques nacionales o monumentos naturales. Sin embargo, hay muchos otros humedales que no se encuentran en ese listado, pero que igualmente cumplen una importante función asignada por la naturaleza.
Por ello, en el último tiempo ha adquirido relevancia el debate sobre el uso del suelo y la conservación de esos recursos, que cumplen una vital función en la regulación de los regímenes hidrológicos, que resulta una tarea fundamental en una zona como el sur del país, propensa a las inundaciones en invierno.
Los expertos critican la falta de regulación y de mayor control por parte de organismos públicos, cuyas autoridades deberían responder por las inundaciones de sectores poblacionales donde autorizaron construir. En esta misma línea, la legislación ambiental vigente en el país es todavía insuficiente y permite que se cometan errores al permitir el uso de algunas áreas que han sido humedales por miles de años, por lo que son positivas las medidas que se toman para proteger algunas de estas áreas que están en riesgo.