A tres meses del texto final, posturas de convencionales son irreconciliables
POLARIZACIÓN. Mientras la corriente oficialista habla de que será un documento acorde a los tiempos y esperanzador, la oposición alega que los invisibilizan y que se sienten en desventaja.
En medio de acusaciones recíprocas, encuestas, rumores, noticias falsas y a menos de tres meses de que tenga que estar redactada, de forma definitiva, la nueva Constitución, los convencionales locales se parapetan en posiciones incompatibles replicando lo que ha pasado a nivel nacional.
Mientras desde la oposición aseguran que son ellos los que están luchando por un país libre y al ser minoría los están ignorando o censurando; desde el sector más ligado a la izquierda creen que hay mucha desinformación, intentos de dañar la imagen del trabajo y que el documento final será merecedor del Apruebo de salida.
"Democratizar"
Consultada por lo que está pasando en la convención, la representante del distrito 26, Adriana Ampuero (IND), cuenta que "hay un nivel importante de desinformación respecto al trabajo que realiza la Convención. Hoy día hay 11 mil cuentas falsas en redes sociales coordinados contra el trabajo de la entidad, acreditado por la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. Hay bases de datos de Whatsapp que se han utilizado para enviar mensajes contra la Convención, y un importante cerco de desinformación mediática. Eso era de esperarse pues democratizar los derechos en beneficio de la gente indudablemente genera conflictos de interés y el rechazo de las élites políticas y económicas que impulsan estas campañas de desinformación".
Coincide con ella Julio Álvarez (PS), para quien "el rol de la oposición ha sido de obstrucción, desde el minuto uno que comenzó la Convención. Y antes de comenzar ya estaban pensando en el Rechazo y eso ha sido un rol que ellos han jugado. Eso se ha mantenido así y por lo tanto espero poco de la derecha. Sin perjuicio de ello, por ejemplo, nosotros en nuestra comisión hemos tratado de sumarlos. Hemos tenido muchas propuestas conjuntas y nos ha ido bien, hay un espacio para todos, pero al final se decide por la mayoría que es el dos tercios, por lo tanto representativo de la sociedad chilena".
El también representante del distrito 26, precisa que "hoy cuando el cuadro no está completo, cuando las normas no están construidas en su totalidad, de allí que vienen algunas corrientes de opinión que manifiestan su disconformidad. Pero no tengo ninguna duda que cuando la Constitución esté redactada en su totalidad, es decir cuando cada comisión haya terminado sus informes y hayan sido aprobados por el pleno, la situación será muy diferente. Tengo la plena confianza que el Apruebo ganará porque esta Carta Magna va a reproducir y a tener en su texto definitivo lo que la gente nos pedía".
Activismo
Desde la otra vereda el ex intendente regional y representante de RN en la Convención por el distrito 25, Harry Jürgensen, asegura que "el ambiente desde el día 1, es de mucho activismo, porque hay muchos activistas de diversas índoles que están representados ahí en la entidad, tanto ecologistas, feministas, indigenistas, en fin y ese ambiente permanece y es con ideas refundacionales a través de las ideas de la refundación total de Chile y eso es lo que se esta expresando, y ahora se esta manifestando con mucha mas nitidez en los informes de las distintas comisiones".
Sobre las críticas a un posible rol de obstrucción, asegura que "es absolutamente falso, nosotros estamos colaborando permanentemente a hacer una Constitución y bueno si significa poner trabas el estar permanentemente haciendo propuestas y proponiendo indicaciones nuevas. Claro eso dilata, pero tenemos pleno derecho a presentar nuestras iniciativas y esas probablemente les moleste, pero esa no es la razón por la cual se esta perdiendo tiempo".
Su colega, de la UDI, Katerine Montealegre, cree que "la Convención ha llegado a un punto ciego y de no retorno. Yo diría que más que polarización, hay un microclima enceguecedor, en donde una mayoría imperante y circunstancial sigue socavando a Chile y afectando con ello a sus ciudadanos entre auto aplausos, sin tomar conciencia de las pifias que cada día resuenan con más fuerza a las afueras. Tratan de negar los hechos y esconder la realidad, sin asumir su responsabilidad y por ello hablan de "obstrucción", "fake news" y "guerrillas" en su contra.
Plebiscito
Sobre qué pasará con el plebiscito de salida, Álvarez estima que existen cinco aspectos que apuntalarán un "Apruebo de salida" en la Convención: una democracia paritaria a la altura de los tiempos, una diversidad cultural y reconocimiento a los pueblos originarios, una Carta Fundamental ecológica en línea con la crisis climática, una desconcentración del poder vía la creación de un Estado regional y, por último la construcción de un estado social de derecho, que termine el Estado subsidiario y consagre los derechos sociales, que eso es muy relevante, el derecho a la salud, educación, vivienda digna, seguridad social, derecho a tener libertad sindical "y por ello tendremos un tremendo apoyo para terminar con la Constitución de la dictadura y construir definitivamente una para todos".
En tanto Jürgensen, quien asegura estar por una sociedad libre, una seguridad de vida, por el control de las fronteras, evitó referirse a su decisión. "Yo no he dado a conocer mi opinión sobre el plebiscito de salida, y no lo voy a dar a conocer hasta que terminemos nuestro trabajo. Yo no estoy haciendo propaganda para el plebiscito, solo estoy informando. Después veremos cuando esté escrita, pero aún no tengo una posición".
4 de julio de este año debe quedar listo y entregado el texto de la nueva Constitución.
4 de septiembre es la fecha para que cada chileno acuda a las urnas para aprobar o rechazar el texto.