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no sólo sea la zona urbana la que se planifique como sucede hoy en día, sino que sea un instrumento integrado el que considere a las zonas urbanas, las localidades periféricas, zonas rurales, suelo agrícola y áreas protegidas, como parte de una herramienta que tenga distintas condiciones de suelo y de territorio, porque hoy en día el desarrollo y crecimiento demográfico está excediendo a las ciudades y ello es una realidad de la cual tenemos que hacernos cargo. Mi invitación es a que las cámaras (Senado y Diputados), los legisladores miren lo que está pasando en las ciudades del sur de Chile ya que si no nos hacemos cargo hoy, las consecuencias serán muy grandes. Puedo decir con mucha tranquilidad que gran parte del sur de Chile se está loteando y al margen de la planificación.
Ahora, la idea no es oponerse a todo, ya que ello no es factible, sino que regular, que se haga con responsabilidad, como corresponde. Porque las externalidades negativas no se están asumiendo y ello tiene un impacto en la calidad de vida de toda nuestra comunidad.
Disponibilidad de terrenos
-¿El valor de los terrenos podría ser una externalidad a considerar?
-De hecho, la especulación en el precio de los terrenos ha generado un alza en el valor del suelo, lo que dificulta mucho la construcción de viviendas sociales. Hoy en día comprar terrenos en las afueras de Puerto Varas o de Nueva Braunau tiene un costo impresionante. Y ello no sólo afecta la calidad de vida de la comunidad, sino que de las familias más vulnerables y eso es lo que nos parece más grave.
-¿Cómo lo están abordando?
-Lo hemos enfrentado a través de la articulación de múltiples servicios, los que, de una u otra forma, están involucrados en este proceso, como Conaf, por el impacto que tiene en el bosque nativo y en las aprobaciones de planes de manejo; con el Servicio Agrícola Ganadero (SAG), que está a cargo de las subdivisiones prediales; con el ministerio de Vivienda, porque es el ente competente a cargo de regular la planificación y el crecimiento urbano; y sumamos al Consejo de Defensa del Estado, con el que, en conjunto, estamos evaluando la legalidad o ilegalidad de proyectos inmobiliarios rurales que estén desarrollando polos urbanos al margen de la planificación. Se trata, por lo demás, de una estrategia que estamos impulsando con mucha fuerza para no incentivar un mercado que necesita regularse.
Hoy, venden sin servicios o comienzan obras que no están autorizadas. O comprometen un daño ambiental relevante y para la salud de las personas. Es por ello que estamos evaluando distintas acciones legales en contra de estos proyectos inmobiliarios y de gran escala.
-Las familias compran, pero después las miradas se dirigen a los municipios en busca de una solución...
-Algunos de los proyectos indican que es el municipio el que se hará cargo del agua potable, lo que es completamente falso. No tenemos la capacidad para responder a esas necesidades. De ahí que iniciaremos distintas acciones legales porque es una irresponsabilidad e incluso, a mi parecer, una estafa para muchas personas que llegan al territorio y se encuentran desprotegidos frente a esta situación.
Queremos dar señales fuertes y denunciar esta realidad que está invisibilizada. Estoy seguro que los alcaldes de la cuenca del Lago Llanquihuese sumarán a esta causa.
Donde no había
-¿Cómo están enfrentando las consecuencias que tiene el aumento de ventas de parcelas?
-El parque automotriz aumentó de manera exponencial. Hemos visto tacos de más de hora y media y en lugares donde jamás se había visto. Mirador está completamente colapsado y con un solo acceso. Quiero ser bien categórico: la ciudad no fue planificada de manera debida en los últimos 30 años. Pero debemos hacernos cargo de la realidad, de lo que es hoy y para eso diseñamos una estrategia de movilidad que busca invertir el triángulo, la pirámide clásica, compuesta por el automóvil como lo preponderante. Ahora, buscamos que sea el transporte público, peatonalidad y ciclismo los principales medios de transportes, porque de lo contrario no nos da. Pero para que ello suceda deben existir alternativas para las cuales estamos trabajando. Por ejemplo, con la ex ministra de Transportes, Gloria Hutt acordamos iniciar el diseño de una estación intermodal.
-¿Se requerirá invertir en infraestructura para sacar adelante estas iniciativas?
-Puerto Varas no cuenta con una estación de buses. Somos capital turística, pero no tenemos este espacio. Ahora, con este recinto se busca recibir un flujo de transporte intercomunal, de buses turísticos y de un sistema de buses urbanos basados en electromovilidad. Estamos evaluando y dimensionando una flota de unos 10 buses eléctricos que nos permita, mediante un subsidio con el ministerio de Transportes, entregarle a nuestros vecinos y vecinas una solución de transporte público, seguro, eficiente y limpio. De esta manera quienes no quieran usar el auto podrán contar con una opción que sea medianamente económica, que cumpla con los horarios y que disminuya los tiempos de traslado. Al mismo tiempo proyectamos una red de ciclovías, de 27 kilómetros por toda la ciudad. Tenemos metas anuales y a partir de este año iniciaremos esta red. Al año queremos construir unos 8 kilómetros en distintos sectores de la ciudad, para de esta manera ir entregando alternativas a nuestras familias.
Transporte público
-¿En qué consiste el plan de puesta en marcha de servicio de buses?
-Lo de los buses es un proyecto bastante ambicioso, que rompe la inercia de lo que se venía realizando en materia de gestión vehicular. Ya contamos con los recursos para el diseño de la estación, el cual durará todo 2022 y parte de 2023, por lo que esperamos que hacia fines de 2024 contar con nuestro sistema de transporte público. Aunque estamos aún en la fase de diseño, proyectamos que la estación implicará una inversión del orden de los mil millones de pesos, el centro de carga del electrocorredor tiene un costo estimado de 250 millones de pesos y la flota de buses 750 millones de pesos.
A ello se tiene que considerar el costo al subsidio de la tarifa que debe disponer el ministerio de Transportes para este fin.
-¿Han considerado el desarrollo del tren, teniendo en cuenta el movimiento que existe entre Puerto Varas y las demás comunas, como Puerto Montt?
-Definitivamente, llegó el momento de planificar el desarrollo de la provincia de Llanquihue a una escala mayor. No sacamos nada resolviendo los problemas particulares de cada comuna si es que no los enfrentamos de manera conjunta. La planificación a escala comunal nos quedó chica y es ahí donde proyectos como el tren se hacen absolutamente necesarios.
Si es que queremos no incentivar el uso del automóvil y no llenar el sur de chile de autopistas necesitamos proyectos de movilidad alternativa y ahí, por supuesto, que el tren me parece una opción sostenible, sobre todo para trayectos cortos. La idea de conectar todo Chile a través del tren es muy potente, pero compleja de alcanzar. Soy más bien de la idea de que en zonas de alto crecimiento demográfico y con capitales regionales se construyan trayectos de cortos de tren para que puedan ejecutarse a corto y mediando plazo.
Si bien son otros los actores que tienen la potestad de definir estas iniciativas, en conversación con el gobernador regional, Patricio Vallespín y con el alcalde de Puerto Montt, Gervoy Paredes y con el EFE a nivel central, puedo decir que existe disposición.
"Hoy, venden sin servicios o comienzan obras que no están autorizadas. O comprometen un daño ambiental relevante y para la salud de las personas" "La planificación a escala comunal nos quedó chica y es ahí donde proyectos como el tren se hacen absolutamente necesarios"
12 mil parcelas se vendieron el año pasado en la ciudad lacustre. La mitad tuvo lugar en diciembre.
10 buses eléctricos proyectan contar con Puerto Varas, como una medida para hacer frente a la congestión.
27 kilómetros de ciclovía proyecta implementar el alcalde Gárate como una forma de contar con más alternativas de transporte.