Vínculos locales con la zona del conflicto repudian la invasión rusa
PREOCUPACIÓN. Residente en Moscú, descendiente ucraniano y puertovarino en Serbia plantearon sus posiciones, enjuiciaron ataques y señalaron que la invasión tiene orígenes económicos.
Desde hace cuatro años que el puertomontino Héctor Navarro se encuentra viviendo en Moscú, a más de mil kilómetros de la zona cero del conflicto en las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, epicentro de los ataques que lleva adelante el ejército ruso y que tiene en vilo al planeta.
Ayer viajó de retorno a la capital moscovita desde Santiago, pero no sabe si seguirá viviendo en ese país, dado la actual situación que estalló con la invasión militar y que tiene en jaque al mundo por los posibles efectos que tendría en Europa Oriental.
"Estoy en la disyuntiva acerca de mi futuro laboral, porque es muy fuerte lo que está ocurriendo allá y es probable que viaje a Moscú, llegue a buscar mis cosas y me vuelva", comenta.
Navarro trabaja actualmente en una empresa de call center y asiste a clientes en español, pero no tiene claro si seguir trabajando, a pesar de que tiene un trabajo estable.
Sobre lo que ha vivido en la capital rusa, reconoce que la experiencia ha sido muy positiva, en un país libre con una cultura muy rica y expresa que la gente es distinta, un poco fría en el trato, pero amable. "En cuanto a este conflicto, de verdad que me llama enormemente la atención y me ha decepcionado. Entiendo que la mayoría del pueblo ruso está en contra de la invasión a Ucrania", aseguró.
Y afirmó que los militares han tomado control de las principales ciudades de Ucrania como Mariúpol, Kiev, Kramatorsk, Dnipro y Jarkov. "No se sabe qué puede ocurrir después, de ahí que viene esa duda de continuar allá", afirmó.
Vínculos con Ucrania
El empresario y cónsul de Alemania en Puerto Montt, Georg Wammes Matvienko- Sikar, tiene ascendencia ucraniana por el lado materno, específicamente de la ciudad de Jersón. "Hace 10 años tuve la oportunidad de visitarla junto a mi madre y aún tengo parientes, por ello es que me vinculo a este país", aseguró.
Relató que la invasión rusa está relacionada con que Ucrania tiene mucha materia prima, grandes reservas de minerales valiosos y porque es conocido como el granero del mundo, por el enorme potencial de trigo y cereales que posee.
Indicó que en general en la extinta Unión Soviética, incluso en los Estados Bálticos, en tiempos de Stalin, deportó poblaciones rusas en muchas de esas naciones y en una época más reciente, Rusia negoció con los ucranianos ser un estado "libre y soberano", y así apropiarse de su arsenal nuclear en los años '90.
Agregó que en todo este conflicto, las causas han sido económicas y políticas durante varias décadas.
Ataque y dependencia
Con respecto a la parte más humana del conflicto, declaró que es triste por lo que pueda suceder, pensando en que existe una raigambre familiar. "En general, los ucranianos no tienen mucha estima por los rusos, porque existen antecedentes históricos donde se demuestran que las relaciones han sido tirantes por mucho tiempo", explicó Wammes.
Recalcó que los ucranianos van a responder, porque se están preparando con el ejército cosaco y que se estaban armando dentro de la guerrilla que conforman y se sumen a un contraataque.
En la capital de Belgrado, Serbia, el ex basquetbolista puertovarino, Claudio Campos, quien emigró hace 14 años a esta nación balcánica, se mostró preocupado por el conflicto, dado que se ubican a cerca de mil kilómetros de distancia de Ucrania.
"Sabemos que una crisis como esta puede repercutir, dado que los países del oriente, dependemos directamente de Rusia, por lo tanto, una guerra de grandes dimensiones nos afectaría mucho económicamente", comentó.
Campos aseveró que Rusia mantiene a toda Europa como centro administrador del gas, por lo cual deja en evidencia que Europa no puede meterse en este conflicto, dado la dependencia que existe en este sentido.
1.000 kilómetros de distancia con la zona de conflicto en Ucrania vive el puertovarino Claudio Campos, residente en Serbia.
4 años lleva radicado en Moscú el puertomontino Héctor Navarro, quien manifestó sus dudas de quedarse en esa ciudad.