(viene de la página anterior)
tenido que tomar medidas extraordinarias y "las seguiremos tomando con la información que se ha conseguido producto del aprendizaje que estamos teniendo de una enfermedad totalmente nueva".
Tensión
Jorge Tagle reconoce que los sistemas asistenciales se han visto altamente tensionados desde el inicio de la pandemia "porque hemos tenido que crecer en nuestra capacidad de respuesta muy sobre lo que teníamos inicialmente", detalla.
Por eso, indica, que "nosotros, como red integrada de la Región de Los Lagos, contábamos -antes de la pandemia- con 44 camas UCI en todos los establecimientos públicos y privados de esta región, que comprende el Servicio de Salud Chiloé, Osorno y Reloncaví, con sus tres hospitales bases y sus cuatro clínicas privadas".
Panorama distinto al que se presentó hacia fines del año pasado, que "terminamos con 81 camas de UCI. Pero cuando tuvimos que enfrentar, en febrero, lo más importante de la pandemia, en términos de cantidad de personas que estaban enfermas, teníamos 125 camas de UCI a nivel regional".
Esto, porque, según explica Tagle, "funcionamos con una lógica de red integrada", de manera que todas las personas que requieran de una cama UCI o de un ventilador mecánico, puedan tener acceso a lo necesitan.
"Impotencia"
Fernanda Ampuero y Carolina Parada reconocen sentir impotencia porque "uno ve como los colegas se desgastan y siguen trabajando porque tienen vocación y aman su profesión".
Y, por lo mismo, "no dudan en dejar de almorzar para que el paciente pueda recibir su tratamiento a la hora que le corresponde.
De ahí que su dolor radica en que "todo ese amor que se entrega al paciente, esa calidad de atención que hacemos en el Hospital de Puerto Montt, no guarda relación con lo que vemos al terminar un turno agotador, cuando observamos unas canchas de fútbol llenas de jóvenes sin mascarilla... Estamos trabajando para que no estés grave, no te enfermes y tú estás afuera y sin ninguna conciencia".
Tagle, en tanto, complementa que siguen enfrentando la pandemia, ya que no ha cesado y por eso el mensaje que "hemos tratado de transmitir de todas las formas posibles, es que esta enfermedad permanece entre nosotros y en estos momentos está afectando a personas más jóvenes".
Por lo mismo, recuerda, que "tenemos pacientes, en las UCI, de 30 y 40 años, que están graves y conectados a ventilación mecánica, que es un fenómeno que no veíamos al comienzo de la pandemia. Hoy más del 60% de los pacientes tiene menos de 59 años a nivel del país y de la región".
Tagle llama a no olvidar que hoy existe una situación sanitaria muy compleja que ha requerido redoblar esfuerzos y se tomasen medidas extraordinarias para poder dar respuesta a estos pacientes.
Por eso, en su reflexión, Parada, piensa en "cómo poder llegar a la conciencia de las personas y que entiendan lo complejo de este tema. Es tan difícil…, qué podemos hacer para que el mensaje llegue a la gente".
Las enfermeras piden apoyo para poder comenzar a ganarle a esta enfermedad.
Acciones
Carlos Becerra sostiene que hay varias acciones que se pueden realizar para cambiar el panorama que hoy se vive en este lugar.
Algunas de ellas, dice, tienen que ver con asegurar a los funcionarios con protección personal para que, efectivamente, no se puedan contagiar.
Aparte de esto, señala, que requieren de algunas condiciones de confort en sus lugares de trabajo, de manera de que puedan tener espacios para poder hacer pausas saludables. Así también la buena alimentación tiene que ser objeto de preocupación en el hospital, lo mismo que el reforzar los turnos para que se cuente con el personal que se requiere.
Por ello es que aboga que cada vez que se abra una cama, se cumpla con los criterios de calidad para la atención que se presta.
Todo esto significará, subraya Becerra, protección para los profesionales y para que trabajen en las mejores condiciones posibles.
Becerra llama a no descuidar los cuidados infantiles asociados a los trabajadores de la salud, ya que hay funcionarios que tienen niños pequeños y "hemos visto también que en las medidas del Plan Paso a Paso no siempre se le han dado todas las facilidades y por eso se ha tenido que pedir expresamente que las credenciales sirvan de salvoconducto" para poder ejecutar alguna actividad física.
Ello, dice Becerra, porque las bandas horarias disponibles para esta finalidad, "son muy poco amigables para los turnos que habitualmente cumplen los profesionales de salud. Por eso se necesita que sean flexibles y que el funcionario porte su credencial para poder utilizar otros horarios -en las comunas que están en cuarentena- ya que a través del ejercicio físico se pueda generar este descanso psicológico y mental que permite renovar energías y poder estar en condiciones para el turno siguiente".
Hacer frente al cansancio y al desgaste de los trabajadores de la salud figura como uno de los desafíos más próximos y para ello se requiere de la colaboración de toda la comunidad.
las dirigentas destacaron el compromiso de todos los trabajadores para sacar la tarea adelante.
los funcionarios piden a la comunidad que adopten los cuidados tendientes a prevenir la enfermedad.