Internet en las zonas rurales
Un plan del Ministerio de Transportes pretende mejorar la conectividad digital en Los Lagos en un plazo de tres años. Mejorar la señal de internet en las áreas rurales de Los Lagos permitirá facilitar las condiciones de estudio y trabajo de las familias.
Aunque el acelerado desarrollo de internet en los últimos años ya había dejado de manifiesto la necesidad de procurar llevar la conectividad digital a las zonas rurales del país con una calidad similar a la que se goza en las ciudades, la irrupción de la pandemia, el confinamiento, las clases online y el teletrabajo han instalado tal requerimiento en un nivel más elevado de las prioridades en las políticas públicas. Las dificultades de los estudiantes de las zonas aisladas para estudiar, muchos de ellos buscando alguna señal para acceder a los contenidos o derechamente sin la posibilidad siquiera de conectarse a la red, han dejado palpable las diferencias que hay en las oportunidades de acceso digital, incrementando la histórica brecha que hay entre la educación rural y la urbana.
Emparejar la cancha en esta área significa tanto prodigar las justas posibilidades de un mejor acceso a estudiar y trabajar, como también de dignidad para las personas. De ahí que el proyecto que impulsa el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones para llevar conectividad digital al campo representa una oportunidad de desarrollo que exige el apoyo de las fuerzas políticas, representadas en el Consejo Regional (Core), a quien se le está solicitando financiamiento mediante un convenio.
De acuerdo al plan de Transportes que se presentó esta semana ante el Core, se requiere de casi $15 mil millones para asegurar lo que se ha denominado en esta materia como la "última milla", esto es, llevar la fibra óptica a las zonas rurales de Los Lagos, donde según el último censo del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) viven 218 mil personas. El proyecto considera tres años de ejecución con licitaciones simultáneas para favorecer a los territorios agrupados previamente en cinco áreas determinadas. El precio a pagar por el servicio en cada casa ascendería a $16 mil mensuales, el que podría mantenerse por el lapso de una década.
Se trata de una iniciativa que claramente favorece el desarrollo de las zonas rurales y que llega justo en los nuevos escenarios de teletrabajo y clases online.