Cristina Ortega, la gran maestra del ballet chileno
La coreógrafa, profesora de Educación Física e Hija Ilustre de Puerto Montt hace un repaso a su exitosa trayectoria.
Cristina Ortega tiene una gran trayectoria en el mundo de la danza. Es por lejos una gran maestra del ballet chileno y así ha sido reconocida en diversas oportunidades. Posee una carrera extensa y brillante y donde la receta del éxito ha estado en el inmenso amor con el que se dedica a la pasión de su vida y a entregar su conocimiento a quienes llegan donde ella para iniciar su recorrido en el mundo del ballet.
El ser nombrada Hija Ilustre de Puerto Montt 2017 es una de las distinciones que ha recibido a lo largo del tiempo.
Pero no sólo los premios dan cuenta de su aporte a Puerto Montt, sino que también el cariño que ha recibido de parte de todas las niñas que ha formado en estos años.
De hecho, emocionada cuenta que para su cumpleaños (el pasado 9 de octubre) pudo darse cuenta de que todo el amor que ha sembrado, lo está cosechado. "Recibí flores en el cerco de mi casa, así como muchas atenciones porque tengo un centro de padres muy lindo, ex alumnas muy lindas también y gente que me quiere mucho, mucho, y eso nunca lo soñé. Y realmente ahora te das cuenta que cuando siembras, cosechas, y yo en mi vida nunca me imaginé cosechar cosas tan lindas".
Cristina Ortega lleva toda su vida dedicada a la danza. Y es que, según cuenta, comenzó desde muy niña su enseñanza en esta área.
Fue así como cursó, entre otros, estudios de danza en el Instituto Coreográfico de Santiago y participó como asistente de coreografía técnica y académica en la Escuela Coreográfica del Ministerio de Educación. También en el Teatro Municipal tomó clases con la famosa maestra rusa Helena Polyakowa.
Además, durante tres años integró el Ballet Folclórico Nacional Chileno, Bafona, y hace 60 años fundó la Escuela de Ballet Cristina Ortega, la que primero funcionó en Osorno y luego en Puerto Montt, donde la instaló hace ya 46 años, mientras que han transcurrido 12 años desde que la inaugurara también en Puerto Varas.
En estos momentos, son unas 130 las niñas, desde los 3 años, que están en su escuela.
Docente
Cristina Ortega es, además de coreógrafa, profesora de Educación Física, carrera que desempeñó en los colegios Inmaculada de Santiago, Osorno y de Puerto Montt, y por espacio de 30 años en el Instituto Alemán de la capital regional.
Pero antes de radicarse en esta ciudad, estuvo un tiempo en su natal Osorno, desde donde, en una primera etapa, viajaba una vez a la semana a Puerto Montt para hacer clases en el Colegio Inmaculada Concepción.
Luego se trasladaba dos veces y "de ahí me casé (con Luis Villavicencio) y me trajo un caballero para acá".
Además, destaca y reconoce el trabajo desempeñado durante 30 años por su secretaria Yasna Díaz, así como por la ex alumna Pilar CanaleS, quien lleva 32 años como profesora de su escuela en Puerto Montt, mientras que Bárbara Sepúlveda suma ocho años como profesora en Puerto Varas.
Premios
Entre los premios que Cristina Ortega ha recibido a lo largo de su carrera figuran el de 100 Mujeres Líderes en Chile, entregado por El Mercurio y Mujeres Empresarias, 2015; Premio Regional de Arte y Cultura Los Lagos (2013); Mujer Creadora, Seremía de las Culturas y el Patrimonio, 2019; Premio Apes (2007), por su aporte a la difusión de la danza con los Encuentros Interregionales de Danza (2014); y un reconocimiento que recibió, junto a otros cuatro creadores, con motivo de los 50 Años del Teatro Diego Rivera.
-Ha visto pasar generaciones por su escuela...
-Es una maravilla. Es un orgullo tener a la tercera generación. Las abuelitas (que también estuvieron en la escuela) traen a las nietas. Hay tan lindas cosas que contar porque hay muchas alumnas que han seguido mis pasos (tanto en Chile como en el extranjero).
-También han resaltado por las galas que organizan a fines de año...
-Nosotros hacemos galas dos veces al año. Hemos estado en el Teatro del Lago, donde hemos realizado dos funciones. Hemos tenido la gran oportunidad y la suerte que nos han facilitado esta bella sala de espectáculos que tenemos en el sur de Chile y gracias a un gran esfuerzo de los padres, apoderados y centro de padres. Es así como con apoyos muy importantes hemos podido llegar a estar dentro de esta sala porque no es fácil estar ahí. El Diego Rivera, en tanto, es como nuestra casa porque los mismos 46 años hemos estado haciendo funciones. Tengo que destacar que en estos momentos, su director Marcelo Utreras lo tiene de forma maravillosa y muy bien montados todos sus equipos de trabajo porque nosotros, cuando llegamos, teníamos que llevar enchufes, ampolletas y arreglar las cortinas. Era toda una odisea para realizar las funciones en el teatro y ahora es una maravilla. Es un lujo todo lo que tenemos.
-¿Qué significó para usted ser Hija Ilustre de Puerto Montt?
-Me siento muy bendecida de haber sido nombrada Hija Ilustre de Puerto Montt no siendo de aquí. Es un orgullo y me siento bendecida también de dejar un legado, porque quedarán muchas ex alumnas que podrán seguir mis pasos. Como amo tanto esto, te cuento que me reinventé un poquito y ahora estoy haciendo clases online.
-Por la pandemia...
-Nunca pensé hacerlo, sino que por la necesidad de un grupo de apoderados que querían que las niñas participaran de estas actividades. Me siento tan feliz de estar estudiando mi música, preparando las clases y una alumna del grupo superior está como asistente. Además, está el profesor Felipe Almonacid, que hace clases de danza espectáculos con todo el alumnado grande una vez a la semana.
"Tengo un centro de padres muy lindo, ex alumnas muy lindas también".
"Me siento bendecida de haber sido nombrada Hija Ilustre"