Los relatos del docente y futbolista Alfredo Lange
El experimentado profesor de Educación Física tiene una larga trayectoria como relator deportivo en Puerto Montt.
"El sentado frente al mar... el choapino sintético... el choapino chilote... la carpeta verde de Chinquihue... y el estadio más pintoresco y más austral del mundo". Esas son algunas de las frases que forman parte del repertorio de relatos de Alfredo Lange, quien ha destacado durante las últimas décadas en la transmisión radial de encuentros deportivos, en especial los que tienen que ver con el club de sus amores: Deportes Puerto Montt.
Pero la vida de este hombre de las comunicaciones no sólo guarda relación con su trayectoria en medios, sino que también en la docencia, ya que como profesor de Educación Física, titulado en la Universidad de Chile, sede Osorno, cuenta con una amplia trayectoria en los establecimientos educacionales de Puerto Montt, su ciudad natal.
Sus inicios en el aula, a comienzos de los 80, fue en escuelas rurales. Es así como desempeñó labores en Lenca, Piedra Azul, Alerce y Las Quemas.
Posteriormente se fue a trabajar al Liceo Industrial de Puerto Montt y de ahí pasó al Liceo de Hombres Manuel Montt, donde estuvo nueve años.
Desde hace 23 años que se desempeña en el Colegio San Javier, aunque también trabajó en el Colegio Salesiano y en The American School.
¿Su especialidad? "El fútbol", responde el hoy relator deportivo de la Radio Nueva Belén y con amplio recorrido por diferentes radios, como la Nacional y la Gratissima de Puerto Varas.
Y era que no, si también incursionó con éxito en el fútbol amateur, donde consiguió importantes logros junto a su club: el Deportivo Lintz, defendiendo también con éxito los colores de la selección de Puerto Montt. De hecho, formó parte de la escuadra que obtuvo el vicecampeonato nacional en el Campeonato Nacional realizado en Pichilemu (1984).
Pero no sólo defendió la tricota de Puerto Montt, ya que también fue convocado a la selección de Osorno, puesto que en sus tiempos de universitario incursionó en el fútbol amateur de esa ciudad.
Lange recuerda que jugaba "desde el mediocampo hacia arriba", aunque también se desempeñó en otros puestos. Incluso, como anécdota, cuenta que hasta el arco defendió en una oportunidad.
"Para el Nacional de Pichilemu nuestro arquero no pudo seguir jugando y tuve que apechugar yo, porque los cambios ya estaban realizados. Jugué alrededor de 15 minutos en un partido que apenas ganábamos 2-1 y que el empate nos dejaba fuera... Me puse los guantes y la polera de golero y defendí el arco por unos minutos que para mí fueron eternos", relata.
"Tenía facilidad para hacer goles y era rapidito -dice-. Era flaquito y ahí me las arreglaba... si me pedían jugar de lateral le daba igual. Me las arreglaba".
Y ahora, en sus años de docente, se ha dedicado a enseñar el fútbol. De hecho, en una oportunidad, junto al fallecido profesor de Educación Física, Rudy Vargas, dirigió la selección juvenil de Puerto Montt.
"Enseñar a los niños es lo más importante. Con mi colega Francisco Gutiérrez estamos a cargo del fútbol y trabajamos desde las series chiquitas, con niños de primero y segundo básico, y hasta la selección mayor, que es donde están los alumnos, por lo general, de enseñanza media (en el Colegio San Javier)".
-¿La pandemia complicó la actividad deportiva de los niños?
-Ha sido complicadísimo, porque tuvimos que cambiar todo. Desde marzo que teníamos todo planificado para las actividades del colegio, campeonatos en los que participaríamos, horarios de entrenamientos y talleres deportivos. Tuvimos que variar nuestra planificación y destinarla al trabajo físico, a la actividad física, para que se puedan mantener de la mejor manera posible y también quitarse toda esta tensión de la pandemia y porque, además, tienen que responder en las demás asignaturas. Por eso nosotros seguimos trabajando a full con nuestros alumnos.
-¿El costo alto de no tener una actividad adecuada?
-La pandemia ha afectado profundamente y sobre todo en la parte física, porque hoy aumentó de manera notoria la obesidad y el sedentarismo. Los niños están sentados frente a un computador respondiendo sus tareas y la parte física es mucho más difícil. Hay gente que vive en un departamento, por lo que no pueden realizar las actividades que hacen siempre. Hay gente a la que le gusta el ciclismo, recorrer las calles, pero hoy no lo pueden hacer y ya llevamos 10 semanas de cuarentena, encerrados y baja mucho la condición física, aumenta el estrés y está complicado el que los chicos no se puedan juntar. Y si bien les hace mal tanto juego electrónico, es una forma que tienen ellos de escapar de todo esto. Pueden conversar a través del computador.
-¿Cómo llegó a las comunicaciones?
-Yo llegué a las comunicaciones porque para la inauguración del gimnasio del club (Lintz), con todas las autoridades presentes, me preguntaron si podía hacer la locución. Y la hice y entre la gente que estaba se encontraba el recordado comunicador Fernando Núñez, quien me dijo: "oye Alfredo, me gustó y lo hiciste súper bien". Me invitó a la radio, en ese tiempo la Nacional, para que entregara los resultados deportivos. Trabajamos transmitiendo rally y el jeep fan race. Y de ahí me dijo que hiciera cancha, así que estuve mucho tiempo haciendo cancha en el Chinquihue. En una oportunidad me dice que lo acompañara a Colchagua, llegamos allá, pero el relator no llegó y me preguntó si me atrevía a relatar y desde esa vez no he salido más de los relatos.
"La pandemia ha afectado profundamente, sobre todo en la parte física"
"Si bien hace mal tanto juego electrónico, es una forma que tienen de escapar de todo esto"